SAN PEDRO DE MACORIS.-La representante del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), Gilka Meléndez sostuvo que el desafío ahora consiste en transformar las estrategias de la política nacional en programas y proyectos a ejecutar por las instituciones gubernamentales y privadas para así garantizar un mejor futuro para la juventud del país.
Durante el lanzamiento de la “Política Pública Nacional para el Desarrollo de la Juventud 2008-2015” en la Secretaría de Relaciones Exteriores, con la presencia del presidente Leonel Fernández advirtió que el inicio de las relaciones sexuales a una edad temprana es un problema grave, para la adolescente, para la familia y para la sociedad en su conjunto.
Meléndez dijo que el documento puesto a circular fue formulado de manera coherente, pertinente y eficaz, tomando en cuenta las necesidades de los verdaderos problemas de la joven generación y en las que se conjuga el pensamiento de la gran mayoría de la población juvenil dominicana, por ser el resultado de un ejercicio altamente participativo, abierto y democrático.
Sostuvo que la maternidad adolescente está asociada con deserción escolar, menos logros educativos, pobreza intergeneracional, y empleos poco remunerados o de baja productividad, lo que la hace vulnerable a la explotación sexual y comercial.
Explicó que también la joven pierde su autonomía y autoestima, y tiende a no recurrir a servicios de atención prenatal o los pospone, razón por la cual se verifica una alta tasa de mortalidad infantil por bajo peso en bebés nacidos de madres adolescentes.
Reveló que una de cada cuatro adolescente dominicana entre 15 y 19 años ya ha estado embarazada alguna vez, dato comparable al de hace 10 años, lo que indica que las estrategias implementadas en el país han sido insuficientes o no han sido eficaces.
“Creemos que la educación formal debe incluir en sus curriculas la educación para la sexualidad, con la participación de maestras y maestros capacitados, así como en la participación de padres y madres informados, de las iglesias, de organizaciones de la sociedad civil, el Gobierno; pero de manera especial en el modelo que ha desarrollado con éxito la República Dominicana, con la educación de pares. Jóvenes educando a jóvenes, jóvenes incorporando a sus padres, jóvenes sensibilizando a sus profesores”, dijo.
Aseguró que el mejor agente educador de la sexualidad es una persona jóven, debidamente formada y capacitada, así como también ha mostrado que la transmisión de conocimientos y de actitudes respetuosas y responsables la pueden ejercer las personas jóvenes.
“Confiemos en nuestra juventud, en sus capacidades y en sus valores, todos los sectores podemos formar parte del diseño del presente y futuro que queremos para la juventud de este país”, dijo Meléndez.
Destacó que la presidencia del presidente Fernández Reyna refleja su gran interés por el bienestar de un grupo poblacional que concentra 2.9 millones de personas entre las edades de 10 a 24 años, cifra que representa el 30% de la población dominicana.
Dijo que la adolescencia se entiende como el período de vida en que ocurre la transición entre la niñez y la adultez, siendo un momento clave en el desarrollo humano, por ser la etapa donde se adquieren las destrezas necesarias para la vida y se sientan las bases para el futuro.
Expresó que es el momento de formación de la identidad y la personalidad del individuo, de su autonomía.
Explicó que en un entorno favorable, donde el joven se inserta productivamente en la sociedad, desarrolla un compromiso ciudadano y conciencia democrática.
La Representante del UNFPA en la República Dominicana manifestó que la transición hacia la vida adulta está fuertemente condicionada por el contexto de desarrollo.
“Los aspectos socio-económicos, como pobreza, desigualdades sociales, discriminación y violencia por razones del género, desempleo y flexibilización laboral, el acceso a sistemas de salud, así como la pandemia de VIH/SIDA, se enlazan con otras variables como el acceso a los medios, a nuevas tecnologías, al surgimiento de redes de organizaciones juveniles y la alta conectividad entre los y las jóvenes de todo el mundo”, precisó.
Meléndez dijo que las inversiones en salud, educación y empleo juvenil son claves para el desarrollo y el futuro de los países.
Manifestó que las mujeres jóvenes particular, son figuras esenciales para la cohesión social. Su salud y bienestar afectan también a la próxima generación, puesto que aseguran la salud y el bienestar de sus hijos e hijas, y también el de sus mayores, por ser regularmente la mujer la transmisora de la cadena afectiva.
“En el amplio marco de asistencia en que se desenvuelve nuestra agencia, como es el apoyo que brindamos a la realización, análisis y difusión de investigaciones, censos y encuestas; a programas de espaciamiento territorial; urbanismo; migraciones; asistencia a la salud, sobre todo la salud materna y neonatal; a la disminución de infecciones de transmisión sexual y el SIDA; al empoderamiento y la visibilidad de la mujer; a la elaboración de políticas públicas y planes de protección a grupos vulnerables, como envejecientes y discapacitados; al cumplimiento de parte de los países miembros de las Naciones Unidas de todos los acuerdos de las Cumbres Mundiales y los compromisos internacionales, se encuentra también como prioridad la atención a adolescentes y jóvenes”, destacó.
La representante del UNFPA dijo que el trabajo en apoyo a la población adolescente nos muestra una realidad que hemos venido enfrentando, pero su solución definitiva amerita la intervención de las más altas instancias,
Explicó que en el Caribe, la actividad sexual entre jóvenes comienza más temprano que en cualquier otra región del mundo y que un tercio de las adolescentes ha tenido relaciones sexuales a los 10 años o antes.
En la actividad además estuvieron presentes Manuel Crespo, secretario de Estado de la Juventud, Humberto Salazar, director ejecutivo del Consejo Presidencial del SIDA (COPRESIDA), Secretarios de Estado, funcionarios y funcionarias del Gobierno, representantes de organizaciones de la Sociedad Civil, del Cuerpo Diplomático y de la prensa, muy buenos días.