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domingo, 4 de noviembre de 2018

José Hazim Azar en el corazón de todos


José Hazim Azar un emprendedor coronado en la historia de San Pedro de Macorís.



                                                  Escrito por: Enrique Cabrera Vásquez

Nota informativa para los lectores: Los espacios entre paréntesis que indican espacios de fotos es porque las mismas se encuentran  en la versión original del libro  formato  Microsoft Word y PDF, y están debidamente insertadas. En esta publicación digital tenemos limitaciones en razón del  amplio volumen del texto y  no podemos ponerlas como era lo deseado y apropiado. Así es que lo aconsejable es adquirir el libro impreso. Gracias.


  Prólogo del autor



San Pedro de Macorís, 7 de mayo -2018.-La primera publicación de los criterios que exponemos en este libro vieron la luz  en la edición impresa del periódico semanario provincial y regional  El COLOSO DE MACORIX, en su  edición No. 97, páginas 9 y 10  de fecha 30 de marzo del año 1999,  con el título, Mi Panegírico a don José Hazim Azar,  luego reproducido en el  periódico digital El Coloso de Macoris.Com; http://elcolosodemacoris.com/web/,  el blog El Coloso de Macorix, https://elcolosodemacorix.blogspot.com/, así como en el blog  Macorís del Higuamo editado y dirigido por el comunicador Luis Manuel Medina, quien fuera cobardemente asesinado la mañana del martes 14 de marzo de 2017,  cuando realizaba sus labores de locutor profesional comentando y leyendo noticias  en la emisora F.M103. Este trabajo originalmente lo escribí la misma madrugada del fallecimiento de don José Hazim Azar el martes nueve de marzo de 1999, con el propósito de leerlo en el cementerio durante su sepelio. Lamentablemente no pudimos llevar a cabo nuestro propósito,  en primer lugar, porque el  conocido político del Partido Reformistas Social Cristiano Ramón Pérez Martínez (Macorís)  leyó un discurso fúnebre que llevó para  la ocasión, y en segundo lugar, porque mientras yo esperaba mi oportunidad para intervenir con mi discurso un reconocido dirigente sindical del transporte urbano local  intervino bruscamente declamando una poesía sabida de memoria por él; a partir de ese momento la situación alrededor de la tumba que se encontraba rodeada de cientos de personas que acompañaron el cortejo fúnebre rompieron la compostura y todo se tornó en un caos incontrolable. Empero, tuve a bien hacer de público conocimiento mi escrito panegírico en el conocido semanario provincial El Coloso de Macorix en la fecha ya indicada ya que en ese tiempo tenía su edición impresa y de cuyo medio de comunicación era editor y director. 

 
Lo que dijimos y escribimos en aquella oportunidad quedó corto, hoy con mayor amplitud tenemos a bien exponer las ideas concebidas para aquel luctuoso momento adentrándonos por rutas clarividentes en interés de redimir y rescatar de la mezquindad injusta y sectaria la memoria de un hombre cuya trascendencia lo situó en las clarinadas de la historia.

Y visto esta información pertinente y de lugar, paso pues, a exponer mis criterios con relación a este libro. Ya lo dijo Ramón Emilio Jiménez “publicar un libro es hacer una ofrenda al porvenir. Solo sus contemporáneos pueden aprovechar las ideas de los grandes pensadores cuando éstos no las llevan al libro”.  “El libro es la esencia del cerebro pensante, que sobrevive a la función creadora”.

 Toda obra literaria tiene una intención claramente predefinida por su autor, la de atraer lectores para que conozcan razonamientos y digieran ideas que este considera apropiadas e importantes. En este caso creemos a través de estas sumas de líneas escritas contribuir a valorar con mayor amplitud y calidad la vida de un hombre emprendedor y visionario, y que, por demás, fue un extraordinario hombre público.  Una persona que transitó por los caminos del aporte social, emprendiendo proyectos y procurando con ello engrandecer su ciudad amada. Su veneración por el Macorís del Higuamo y El Soco fue tan desbordante que no escatimó esfuerzo alguno para concretizar los sueños que siempre concibió para que San Pedro de Macorís brillara con esplendor propio ante el país. Desde que asumió el papel de líder actuó como tal buscando apoyo y recursos para que las necesidades reclamadas por la población social fueran satisfechas.

Toda su energía la puso al servicio de la ciudad. Su afán en este sentido traspasó lo convencional, sus insistencias a veces eran vista como una necedad fastidiosa, empero, no cejaba en su propósito hasta alcanzar lo anhelado.


Para poder desarrollar una fecunda labor emprendedora nuestro personaje debió primero vencer la obsecuente mentalidad de la estupidez del subdesarrollo donde la resignación y aceptación de los hechos es una constante, una justificación para nunca enfrentar las adversidades. Para nunca hacer nada. En ese escenario atreverse se convierte en una palabra de cambio, transformación y lucha. Es asumir una posición revolucionaria que incita y motiva jornadas sociales por la superación del entorno; de lograr nuevos espacios de sobrevivencia, de encontrar formas de vida diferentes para el colectivo ciudadano tendente a mejorar y elevar su calidad de existencia humana. Esta brega implica compromiso y responsabilidad con sí mismo. Dando paso al protagonismo de la decencia en cada paso emprendido. 
 
 Esperamos, pues, que estas páginas vibren en las manos del lector, por cuantos las imágenes y los paréntesis informativos adrede que hemos buscado para acompañar el contenido de esta publicación  buscan asociar el  amplio compendio  de esta obra con el casi bicentenario  de San Pedro de Macorís para que contribuyan a despertar la imaginación del lector hacia el pasado de nuestra historia, local, provincial, regional y nacional tan cautivante. Que lo lleve a hondas reflexiones críticas, autocriticas y reflexivas  en torno a lo que fuimos y somos y en el camino hacia el futuro durante todo el trayecto de nuestra pretéritas andanzas, esa es nuestra intención, hacer al lector participe de todas las peripecias y altibajos que tuvo que enfrentar  en sus largas jornadas emancipadora José Hazim Azar en su interés persistente por lograr una mejor ciudad, organizada, atendida, reconocida e integrada al desarrollo del país, ejerciendo su liderazgo regional, compitiendo en base a la calidad y la entrega amorosa de sus hijos para que sea cada vez mejor.

 

  La valoración histórica de José Hazim Azar que hacemos en este libro incluye algunos de los procesos que se dieron durante los casi 200 años de vida comunitaria y urbana que tiene nuestra querida ciudad. Porque las sustancias  contenidas dentro del curso de los acontecimientos de lo que fue desde la creación del Macorix pueblo-comunidad  fueron influidas por el nacimiento y desarrollo de la industria azucarera; por las inmigraciones que atrajo el esplendor y el progreso  al Macorís Oriental, una provincia que posee más de 130 ríos subterráneos, como  el Brujuelas que  nace en la Sabana de Guabatico, municipio de San José de los Llanos, con un recorrido de  unos 40 kilómetros por debajo de la tierra hasta entrar al mar caribe por Boca Chica, así como el Casuí, que alimenta nuestro querido Higuamo y cuyo trayecto lo ha convertido en unas de las reservas de aguas subterráneas más importante del país, abasteciendo de agua potable a vastas zonas del país desde Bocha Chica, parte de la capital y otros lugares distantes de San Pedro de Macorís.  La Madre Naturaleza nos ha proporcionado de fuentes acuíferas; riqueza ésta que  constituye un patrimonio hidrológico y  afluencia que permite la siembra y cultivo de alimentos; además, porque en diferentes renglones fuimos líderes, iniciadores; los primeros en muchas cosas de importancia, y cuyos resultados han contribuidos de manera fructífera al progreso nacional.

No todo está dicho. Hay cosas que escudriñas, indagar, investigar, hurgar. Nuevas verdades ocultas esperando ser desenterradas para erradicar dudas y malos entendidos, divagaciones producto  del subjetivismo histórico y el simplismo de conjeturas acomodadas.  Este libro convoca a ese trabajo necesario. Constituye un aporte  valioso  y  una contribución para que la presente y futuras generaciones pueda disponer de mayor  información descontaminadas  de pasiones fundamentalistas,  y se actualice con los acontecimientos de nuestra historia, y en particular, saber de la vida biográfica de uno de los  más grandes emprendedores de éxito que ha tenido San Pedro de Macorís y  la Republica Dominicana. Porque como dijera Joseph Conrad: "El autor sólo escribe la mitad del libro. De la otra mitad debe ocuparse el lector". En sus manos queda lo que falta.  Disfruten, pues, la lectura de este ensayo biográfico ilustrado con algunos capítulos interesantes de nuestra historia nacional y provincial, que estimamos pertinente en la contundencia de la impronta de don José Hazim Azar. 


José Hazim Azar un emprendedor coronado en la historia de San Pedro de Macorís.

Escrito por: Enrique Alberto Cabrera Vásquez.

«El futuro pertenece a quienes creen en la belleza de sus sueños». Eleanor Roosevelt.

«La idea no es vivir para siempre, es crear algo que sí lo haga». Andy

(Una vista de la zona céntrica de la ciudad, las inmediaciones del Parque Duarte, anegada por las aguas de algún aguacero, esa parte siempre ha sufrido de inundaciones, foto de los años de 1935 al 45).

 José Hazim Azar, un emprendedor coronado en la historia de San Pedro de Macorís.

Escrito por: Enrique Alberto Cabrera Vásquez.

«El futuro pertenece a quienes creen en la belleza de sus sueños». Eleanor Roosevelt.

«La idea no es vivir para siempre, es crear algo que sí lo haga». Andy Warhol


José Hazim Azar recogió en su vida social todo el crisol acumulado a todo lo largo de la historia de San Pedro de Macorís. Sobresalió como egregia, relevante y significativa figura pública de primer orden; como emprendedor constante y líder de una provincia cuya historia y aporte nacional ha sido más que evidente. Los pueblos tienen su peculiar proceso de evolución que lo va marcando e identificando como tal, sobre su marcha define ciclos y etapas concretas atractivas. Así como el padre de la patria Juan Pablo Duarte personificó en su impronta los anhelos de cambio y transformación de su tiempo influenciado por las distintas corrientes del pensamiento de entonces, como lo fueron el nacionalismo, romanticismo, socialismo, liberalismo, y cuya base histórica estuvo en ese movimiento filosófico, pedagógico  y de conciencia conocido como enciclopedismo, fontana de donde se nutrió y se ilustró el pensamiento político de avanzada durante los años 1751, 1772,  1776 y 1777,  y que tuvo en D'Alembert y Diderot sus más renombrados exponentes; así mismo y guardando la distancia,  nuestro querido Don José Hazim Azar fue influenciado por la visión pragmática de aquellos que siempre abogaron por situar a la Sultana del Este en un pedestal de desarrollo y progreso  ejemplar. Su personalidad suma virtudes legadas. Fue la preocupación latente, apasionada y vibrante, de un pueblo cuyas realizaciones y aportes trascendieron sus fronteras. Su obra bienhechora indica claramente por si solo las cualidades que lo adornaban, de ahí, que recibiera respeto y aclamación constante; pues, era un excelente dirigente social, emprendedor audaz y destacado hombre de servicio que procuraba con insistencia las posibilidades exitosas de sus proyectos e ideas pensadas siempre en interés de mejorar las condiciones materiales y sociales de su pueblo. Quizás la nostalgia del pretérito desarrolló en él su vocación de emprendedor. A partir de su iniciativa la memoria de la ciudad estuvo sobre sus hombros.  Fue tan fuerte su accionar que su nombre alcanzó una dimensión histórica de constante referencia. Su grandiosa proporción obliga a recorrer algunos peldaños resaltantes de nuestra historia debido a que su obra portentosa encarna tantos anhelos almacenado desde que llegaron a nuestra comarca los primeros pobladores en 1815. Tal es la fuerza de su presencia en la historia de San Pedro de Macorís. Representa un antes y un después con signo colosal. Su nombre sobresale con creces en nuestra historia provincial. El rico arsenal que la conforma revive en el esfuerzo y entrega de cada proyecto surgido de su talento; en los éxitos alcanzado. ¿Qué sería del presente petromacorisano si su alcance visionario se hubiese quedado en simple enunciado y retórica discursiva de cumplido público? Alguien dijo que es mejor equivocarse haciendo que no hacer nada por temor a errar.  Atreverse en medio de las dudas y la vacilación constituye un acto de valentía.

 (Una vista de la zona céntrica de la ciudad, las inmediaciones del Parque Duarte, anegada por las aguas de algún aguacero, esa parte siempre ha sufrido de inundaciones, foto de los años de 1935 al 45).

  Querámoslo o no, la fuerza histórica del nombre de José Hazim Azar se concatena, se entrelaza, con la historia misma de su ciudad amada. Su estupenda obra social expresa el sentir y el anhelo de un pueblo-ciudad que aportó y aporta con una proyección que vuela sobre la geografía nacional como ejemplo y referencia histórica mostrada.  Por ello es necesario situarlo dentro del curso histórico de nuestro desarrollo social. Científicamente se ha establecido que la historia de cada individuo está relacionada con el rol y papel que este desempeña en su medio social, estableciendo, "que son los propios hombres quienes crean su historia, pero siempre en condiciones materiales históricamente determinadas". Es lo que se llama la personalidad del individuo en la historia.

 (Un desfile de coches a caballos por la avenida Independencia, frente al Parque Duarte por allá por los años de 1930-40).

Partiendo de estos criterios el lector no podrás extrañarse ver, quizás con sorpresa, que insertemos algunos episodios destacados de nuestra historia provincial dentro de este ensayo y narrativa biográfica de don José Hazim Azar; pues, entendemos que la suma de su obra es la culminación del proceso de vivencias, esfuerzo, creatividad y lucha de nuestra población durante la suma de años de su historia. Es a partir de las metas obtenida por este líder extraordinario que nuestra historia entra en un terreno de amplio reconocimiento cimero. La efeméride de la celebración de nuestro primero cien años como provincia lo atestigua y confirma. 

Mucho se ha escrito, se ha dicho; repetido y reiterado; transmitido de boca en boca, de generación en generación, dando testimonio fehaciente de hechos ocurridos en la oriental provincia de San Pedro de Macorís. No hay agotamiento en ello.  Centenares de libros y cuartillas periodísticas; docenas de periódicos, revistas, semanarios, quincenarios, mensuarios, han difundido en sus páginas las vivencias, folklor, heterogeneidad étnica y cultural; el valor de su patrimonio arquitectónico, las hazañas y proezas producidas a lo largo de nuestra casi bicentenario historia por afamados talentos y propulsores en cada tiempo transcurrido. En esas páginas excitantes se reseña el rico arsenal poético, literario, cultural, arquitectónico, deportivo, empresarial y demás ramas que conforman e integran la estructura social histórica del Macorís del Mar. Y en este sentido, se acumula también la manifestación particular devenida de hombres y mujeres cuyas actuaciones han atraído atención especial ante los ojos de los demás. Su loables peripecias  están ahí expuesta con claridad obvia, por cuanto en nuestras tierras de verdor cañero, ríos inagotables e inspiración lírica constante, han nacidos hombres y mujeres que se han destacado en los deportes, en la salud, en las artes, en las ciencias económicas, en el ejercicio periodístico de la comunicación, en el derecho en sus diferentes manifestaciones jurídicas; en las áreas del comercio; como  empresario, emprendedor y propulsor de actividades sociales, culturales,  comunitaria, gremiales, sindicales, artísticas, artesanales y científicas, entre otras. En el abanico de la diversidad social de la vida comunitaria y en sociedad de nuestra historia, hemos tenidos personas sobresalientes cuyos méritos y capacidad se han impregnado en la historia.  Si se quiere se puede hasta decir que no todo se ha dicho ni escrito, que falta mucho más, quizás haya habido algún sesgo de exclusiones interesadas resultantes de alguna mezquindad y cierto sectarismo de clase, no obstante, a esta presunción quizás subjetiva, podemos decir desde una visión flexible que las ponderaciones han sido justa y sensata, y que cualquier omisión en el menú biográfico y referencial no ha sido adrede ni de mala fe alguna. Así las cosas, hemos tenido deportistas de alcance nacional e internacional como lo fue Tomás Binet Mieses, considerado por los expertos el atleta más completo que ha tenido la República Dominicana, por cuanto se destacó como figura de primer orden en atletismo, baloncesto, béisbol, vólibol, softball, natación, tenis de campo y de mesa y hasta como boxeador.  

 (“Tomás José -Tomasito- Binet Mies. - Exaltado en Atletismo en el Ceremonial del año 1993. Nació en San Pedro de Macorís el 2 de noviembre de 1930. La Asociación de Cronistas Deportivos de Santo Domingo le eligió Atleta del Año en 1957, y le otorgó la placa Julio C. Linval. En julio de 1959 ganó el primer lugar en Salto con Pértiga, lanzamiento de jabalina, el disco y la pesa. En 1983, en San Pedro de Macorís, fue seleccionado por su trayectoria para portar antorcha en la inauguración de los VI Juegos Deportivos Nacionales”).

(Por sus condiciones excepcionales fue escogido Selección Nacional. Un verdadero héroe deportivo cuyo nombre barniza el orgullo de lo que se proclaman Serie 23.)

Nuestra historia es rica y abundante en su producción social, y dentro de la misma sobresale una estrella cuya luz lleva sobre si la encarnación de las demás constelaciones, pues su obra le ha dado continuidad desde un ámbito sustancial a la emprendida por sus antecesores en los diferentes renglones ya indicado. 

¿Qué hubiese sido de estos nombres, de esas historias, de aquellas hazañas, si no tuviésemos hoy la Universidad Central del Este, creada por don José Hazim Azar, dándole continuidad desde la suscitación de su legado, a través de sus realizaciones en las diferentes áreas en que esos hombres y mujeres descollaron?  Es posible que poco de las generaciones de 1970 para acá conocieran de su aporte y proeza sorprendente, pues, si bien lo más destacados son reseñados por los medios de comunicación de alcance nacional, la mayoría no cabe dentro de una prensa de espacio constreñido, más una competencia capitalina y cibaeños que copa los mismos con celo regional y chauvinista. La gran verdad es que desde la creación de la UCE la dinámica humana y social de San Pedro de Macorís ha sido otra, ya que esta institución académica y de servicio social desde su inicio ha puesto énfasis en los deportes en cuyo renglón ha hecho cuantiosas inversiones; desde entonces la UCE ha estado presente en las áreas empresarial, educativa, cultural, productiva, emprendedora, tecnológica, científica y comunitaria. A los mismos le ha dedicado tiempo, recursos y jornadas significativas; ha actuado con una visión de alcance nacional desde cuya infraestructura se proyectan valores humanos de alta dimensiones. Gracias a su presencia los logros alcanzados en el pasado se han multiplicado con creces en el presente de cara al futuro; hoy nuestra cantidad de talentos en las disciplinas ya enunciadas ha aumentado con rapidez de manera considerada, y, por lo tanto, tenemos mucho más médicos, abogados, educadores, deportistas, emprendedores, científicos, economistas, periodistas y dirigentes sociales. La matrícula de hombres y mujeres público se ha triplicado.

El recorrido de años en años que ha caracterizado a la ciudad de los Bellos Atardeces ha tenido lazos con el acontecer nacional. El quehacer de sus figuras célebres ha repercutido más allá de sus lindes. Sus nombres han sonado alborozados en el sentimiento nacional. El desarrollo de la civilización patrio ha tenido el empuje y el aporte de nuestra realización cultural. Desde la instalación de su primer grupo humano organizado San Pedro de Macorís ha señalado los caminos del progreso y acrecentamiento de sus valores educacionales situando sus hechos con característica representativa.

En el año 1815 se inició a la orilla del río Higuamo un significativo asentamiento humano encabezado por Juan Antonio Aybar, quien luego sería el primer alcalde pedáneo del lugar. Sobre ese proceso civilizador iniciado a partir de esa fecha numerosas familias despavoridas, huyendo de la temible invasión y ocupación haitiana de 1822, que se prolongaría por 22 años hasta 1844, llegaron a estas tierras llaneras y costeras los cuales en su inicio conformaron dos caseríos en la margen occidental del histórico río arriba mencionado. Sin embargo, hay quienes sostienen que existen documentos de la época colonial donde se indica que ya para el año de 1508 existía un minúsculo poblado en este lugar.

 (Foto, una vista del río Higuamo)

La historia de todos los pueblos del mundo tiene sus atractivo e interés y la de San Pedro de Macorís no puede escapar a esa apreciación histórica, sin embargo, hay particularidades contrastantes  que diferencian cada historia: la idiosincrasia, cultura, temperamento, herencia antropológica, raíces sociales, migraciones y procedencia étnica, factores ambientales, condiciones climáticas, rivalidad racial, entre otras tantas singularidades, conjugan la vida y el desarrollo  de los pueblos, y en consecuencia,  cada historia expresa y representa de manera ilustrativa e interesante la razón de su existencia geográfica y social. 

 (Una vista de la edificación de la comandancia del puerto en los años de 1920).

Los acontecimientos que se sucedían en el orden político en esta región estuvieron muy vinculados a los intereses de la producción y negocio de azúcar. Por los puertos de San Pedro de Macorís y Montecristi llegaron barcos de guerra norteamericano durante la primera ocupación efectuada por la poderosa nación del norte en los años de 1916-24.

La masiva presencia de mosquito como plaga y el fuerte sol abrazador hizo que la zona recién habitada y en proceso de organización comunitaria se le llamara Mosquitosol. Para subsistir tanto de manera individual como grupo social los advenedizos ya establecidos como residentes del lugar se dedicaron a la labor de siembra y cosecha de víveres, muy en especial plátanos, cuya masiva producción vendían a comerciantes que llegaban de la capital y otra zona cercana. De las entonces limpias aguas del río Higuamo salían decenas de botes y pequeñas embarcaciones repleta de plátanos. La producción era tan abundante y exitosa que entre los años de 1868 al 1875, al nuevo poblado se le denominó Macorís de los Plátanos. La cercanía al rio y a la costa del Mar Caribe convirtió el área en una llamativa zona de pescadores, cuyos lugareños además de alimentarse de su resultado vendían en abundancia.

Entre los años de 1873 a 1879 el país vivió años de inestabilidad y guerra regionales entre los caudillos en disputas.

En la cercanía de los litorales de Macorís del mar el 7 de junio de 1808, en El Seibo, se produjo la famosa batalla de Palo Hincado, un acontecimiento político y militar encabezado por Juan Sánchez Ramírez, donde salió derrotado y humillado el ejército de ocupación francés que dirigía el general Jean Louis Ferrand. En esta hazaña patriótica cayeron heroicamente, el general Bernabé Sandoval y el coronel Antonio de Jesús de Sosa, ambos de la comunidad petromacorisano  de San José de Los Llanos. Era la Guerra de Reconquista.  Este hecho indica de manera notable el olor a pólvora existente en la región donde llegarían algunos años después los que le darían sentido de asentamiento poblacional al futuro Macorís.

 ("Imagen del general dominico español Juan Sánchez Ramírez, figura principal de la Batalla de Palo Hincado que derrotó a los franceses para restablecer el dominio de España sobre la isla, por lo que fue designado como capitán general de la colonia. Nació en Cotuí, 1762 y murió en Santo Domingo en 1811. Conspiró contra la ocupación francesa en favor de España. Derrotó al general francés Ferrand y tomó la capital con ayuda británica (1809). Su gobierno inició el período conocido por «La España Boba» (1809-1821), y se caracterizó por la dura represión de los brotes independentistas").

("En 1795, la isla de Santo Domingo dejó de estar vinculada a España por el Tratado de Paz de Basilea (Suiza), que ponía fin a la Guerra de la Convención (1793-1795), por la que pasó a dominio francés. En 1808, a raíz de la invasión napoleónica de la metrópoli, se creó en la isla el movimiento La Reconquista, dirigido, entre otros, por Juan Sánchez Ramírez, con el objetivo de retornar a dominio español").

("Sánchez Ramírez, hacendado propietario agrícola, había luchado contra los franceses ya en la Guerra de la Convención, y en 1803 había emigrado a Puerto Rico, de donde retornó en 1807 para fomentar la insurrección. Para ello solicitó la ayuda del gobernador de Puerto Rico, Toribio Montes, y de colonos dominicanos que habían huido a esa isla, con cuyas fuerzas se sublevó contra las tropas francesas del general y gobernador Louis Marie Ferrand, al que derrotó el 11 de julio de 1808 en la batalla de Palo Hincado").

El desarrollo y crecimiento poblacional atrajo a comerciantes, emprendedores y aventureros. A partir del año 1848 la zona adquirió un impulso dinámico; a Macorís llegaron personas con recursos para invertir y hacer grandes negocios. Sobre la movilidad social y humana en expansión se inició el proceso de la industrialización de la caña. Ese año, Vicente Ordoñez (a) Santafé) montó el primer trapiche de mazas verticales movido por bueyes, “para cuajar melado, y tras él, Blas Payano, Guadalupe González, Manuel Urraca y Wenceslao Cestero”, perfilaron lo que sería la industria azucarera, la que tendría un impacto trascendente en la realidad social y material de San Pedro de Macorís.  

En el año de 1876, el cubano Juan Amechazurra, huyendo de la guerra independentista de Cuba (conocida como la Guerra de los Diez Años, iniciada en1868), vino a estas tierras macorisana e instaló el ingenio Angelina, el que luego fue comprado por Juan Vicini en 1880.

En 1879 Santiago W. Mellor, un inmigrante puertorriqueño instaló un trapiche de molienda movidos por bueyes en un sector conocido como Buena Vista.  Así inició sus operaciones el ingenio Porvenir.

 (Una locomotora de vapor de los años de 1850, de cuyo tipo vinieron al país para ser usada en el transporte de caña y braseros en los ingenios de esa época).

  En 1880 nació el ingenio Santa Fe, propiedad de Augusto Russel y Cía.; consolidando el auge y desarrollo de la producción fabril de azúcar en San Pedro de Macorís.

En 1881 los socios cubanos Padrón y Salau inauguraron el Ingenio Cristóbal Colón, que luego sería adquirido por la familia Vicini, mientras que en 1884 los también cubanos Vásquez Roser y Compañía fundaron el Ingenio Santa Fe.  Para la misma época Juan Serrallés fundó el ingenio Puerto Rico y en el año 1892, Juan Fernández de Castro fundó el Ingenio Quisqueya, común de Los Llanos. Sobre el creciente empuje y prosperidad de la fabricación de azúcar de caña y otros derivados de esta San Pedro de Macorís atrajo masivamente a centenares de trabajadores, jornaleros, técnicos y gentes de negocios en busca de mejores condiciones de vida. Con rapidez el flujo de inmigrantes transformó la estructura social de la ciudad de los bellos atardeceres.

 Debemos consignar que según una monografía de Alexis Calderón Del Giudice durante el periodo colonial en 1520 en la isla La Española funcionaban tres ingenios de azúcar mientras otros se encontraban en proceso de construcción.

 (Imagen de cómo se maltrataba a los esclavos y aborígenes durante la época de la colonia).

Al momento de iniciarse el proceso de la industria azucarera nuestro país vivía un estado de tensión permanente caracterizada por las rebatiñas y enfrentamientos de los tozudos caciques regionales y la inquina política de sus líderes. En 1872 los capitalistas que llegaron de Cuba huyendo de la guerra de independencia que se libraba allí venían imbuidos de ideas no conocidas en nuestro sistema de producción. Pues, si bien el azúcar como materia fabril ya se comercializaba la forma de hacerlo era mayoritariamente rudimentaria y artesanal, Los pequeños trapiches ya instalado carecían de la suficiente capacidad para producir el producto en cantidades significativas y la mayor parte se quedaba en el mercado nacional. Todavía no había un mecanismo industrial amplio que garantizara un mercado exportador atractivo

Los máximos dueños del negocio azucarero que en su mayoría llegaron de Cuba, Estados Unidos, Puerto Rico, Italia y Alemania, vieron que las perspectivas de su desarrollo económico y comercial estaba situado en lugares geográficos estratégicos como Azua, Sánchez, Montecristi, Puerto Plata, Barahona y San Pedro de Macorís, cuyas demarcaciones tenían costa, constituyendo puntos clave para construir puertos o muelles para la exportación de azúcar.  A partir de esta realidad San Pedro de Macorís pasó a tener una importancia comercial trascendente.

 Décadas de esfuerzo enfrentando los avatares de las circunstancias tuvieron que padecer los hombres y mujeres que comenzaron a poblar con criterio de permanencia los terrenos circundantes al río Higuamo.  La severidad del inhóspito ambiente que encontraron significó para ellos un desafío imprevisto. La isla dividida por las apetencias y codicias de los europeos que intrusamente llegaron a estas tierras habitados por pacíficos aborígenes de costumbres sencillas y humildes había sufrido la secuela de sangrientos enfrentamientos voraces. Sobre el curso histórico de acontecimientos que parecían no tener fin, este grupo de personas deseosa de encontrar un lugar apropiado para desarrollarse y vivir con dignidad decidió hacer vida en lo que hoy se conoce con el nombre de San Pedro de Macorís.  Aquí emprendieron nuevas formas de subsistencia a riesgo de los avatares de la lucha política tan frecuente en esa época. Con esfuerzo y voluntad personal crearon un nuevo escenario social en comunidad que se proyectaría en tiempo y espacio en un marco de continuidad subyacente al margen de los acontecimientos que de un lado a otro estremecía la isla. Españoles; franceses, ingleses, corsarios, filibusteros, piratas, aventureros, entre otros, se diputaban el control y dominio de la geografía nacional, empero, al parecer lo que sería el Macorís costero no sufrió percances mayores.


Desde su propia peculiaridad organizacional nuestra ciudad marcó camino distante en su propia conformación al momento de separarse en lo político y en lo geográfico de la provincia de El Seibo de la que era común desde el 24 de agosto de 1861, circunstancias impuesta por el dominio de la traidora anexión santanita a España sobre la isla.  En la época originaria de los pueblos indígenas lo que es hoy Macorís pertenecía al cacicazgo de Higüey donde reinaba el cacique Cayacoa.

 (Una imagen en pintura de la época de la esclavitud en el continente tras la llegada de los europeos en 1492, tomada de una página web del internet).

 Aquella novedad productiva iniciada en 1848 por Vicente Ordóñez, Manuel Urraca, Guadalupe González, Wenceslao Cestero y Blas Payano, proyectó en el horizonte historiográfico, económico y social todo San Pedro de Macorís, sobre esas bases materiales se forjaría la fortaleza industrial y empresarial de la ciudad. Jornadas históricas en su quehacer laboral vibraron con intensidad social más allá de sus fronteras para convertirse en referente de su grandeza histórica.

Atraído por este impulso económico durante la década de 1870 a 1880 llegaron por vía marítima los inmigrantes de color conocido como “Los Cocolos”, procedente de las caribeñas islas de Saint Kitts, Anguila, Saint Croix, Saint Thomas, Nevis, Santa Lucía, Islas Vírgenes, Dominica, Saint Martin, Martinique, Bahamas, Antigua y Barbuda, Aruba, Curazao, Guadalupe y  Tortola, bajo dominio imperial británico, francés y holandés; también vinieron de  Panamá, luego de terminado los trabajos de la construcción de su Canal.


(“En una embarcación a vela, barlovento es por donde incide el viento a la embarcación. La parte de sotavento es el lado opuesto, teniendo como referencia el centro de la embarcación”).

Estos se establecieron como excelentes obreros, técnicos, maquinistas, y trabajadores especializados en las factorías donde llegaron a escalar posiciones de respeto y alta jerarquía.

Los primeros súbditos cocolos que llegaron a nuestro puerto descendieron de una goleta con el nombre de Echar-Apitex; quienes insertaron en San Pedro de Macorís su costumbre, hábitos, creencias religiosas y forma organizada de convivencia.

"Los horizontes visten el verde esmeralda
de los cañaverales,
y las cintas negras de las chimeneas
viajan en espirales
la desorbitada dimensión del espacio.
La sirena de los ingenios
y el chirrido de las máquinas
sepultan la bucólica paz de la vida aldeana".
 (Homero Henríquez Verges
 Macorís Centenario).
(Citado por Freddy Reyes en su libro novela El Paseo, página 51).

Para asumir una idea conceptual del valor de José Hazim Azar como personalidad histórica de San Pedro de Macorís es necesario apuntalar históricamente hechos y sucesos antecedentes cuyo proceso en sí pudieron crear las bases motivantes en que sustentó sus ideas y pensamiento de emprendedor.  Hay situaciones que se produjeron muchos años antes de que éste naciera, y, sin embargo, pudieron influir en su forma de pensar,  en razón  de que siempre mantuvo sobre sus labios la referencia del pasado, el legado de aquellos tiempos luminosos, por ello en el contexto en que acontecieron mantienen una relevancia en la forma de pensar de don José Hazim Azar, pues el mismo exhibió en su esfuerzo de lucha social todo lo que significaba y representaba la historia de San Pedro de Macorís,  y hasta  la historia nacional misma. Esta era su bandera de emprendedor; por lo que no podríamos desligarla de su nombre; la llevó en su memoria como señal de su significado, la promovió y difundió como justificación de sus actos públicos en cada jornada social asumida.

El pensamiento político de José Hazim Azar era de corte liberal; su misma profesión de abogado quizás le sirvió de zapata para conformar su visión político-social. Empero, las evoluciones de sus ideas marcharon con discreción durante su juventud, adultez y crecimiento personal. Tal vez si hubiese sido terrateniente, potentado, oligarca en su formación y vivencia, hubiese evolucionado hacia otra visión del mundo y las cosas retrógrado.

El rápido proceso de desarrollo y crecimiento poblacional de San Pedro de Macorís se produjo dentro de un marco fabril-industrial cuyo alcance atrajo a comerciantes, emprendedores y aventureros. A partir del año 1848, época en que comienza a florecer lo que sería su poderosa industria azucarera, la zona adquirió un impulso dinámico, a Macorís llegaron persona con recursos para invertir y hacer grandes negocios. Era el vigor laboral del proceso de la industrialización de la caña. Con prontitud el flujo migratorio transformó la estructura social de la ciudad de los bellos atardeceres.

 (Inmigrantes “cocolos” durante un culto religioso en una de sus iglesias, foto, fuente internet).

Los estudiosos de la inmigración de estos hombres de raza negra procedente de la zona conocida como Sotavento y Barlovento destacan esa presencia de los años arriba indicado, incluso algunos llegan a afirmar, según sus investigaciones y estudios, que entre los años de 1824-1825 algunos llegaron desde Filadelfia, por gestiones del presidente haitiano Boyer, durante la ocupación militar y política de Haití de la parte este de la isla La Española.

En un reportaje periodístico titulado Mis queridos “cocolos” Visión estética y social.  De “arte cocolo” escrito por Indhira Suero en el periódico Listín Diario, ésta resalta el debate social migratorio que se dio alrededor de la masiva llegada de estos isleños a nuestra ciudad, en aquella época.

El trabajo de la mencionada articulista recoge palabras de una entrevista que le hiciera sobre ese particular al doctor Rafael Dunker Lamber, en la misma éste señaló: “Con ellos vinieron las nasas de pescar, que no eran utilizadas en el país antes de la llegada de los cocolos y que en un principio eran hechas de ‘bejuco’. Además, infundieron valores morales y religiosos a sus hijos, deferencia a los mayores y a las damas. Muchos hijos de cocolos han ocupado puestos como literatos, médicos e ingenieros y no se han embarrado con la podredumbre que hay en la sociedad dominicana, entre ellos Avelino Stanley, Celsa Albert, reverendo Isaac, reverendo Brooke, Nadal Walcot y Norberto James”, asegura Dunker Lamber.

“Los dueños de ingenios buscaron alternativas en la mano de obra porque desde 1880 hasta 1884, hubo una crisis en el sector del azúcar debido al bajo precio del producto, el poco interés de los campesinos dominicanos en convertirse en obreros de la industria azucarera y a los salarios excesivamente bajos. La solución más rentable fue buscar trabajadores entre los residentes de las Antillas Menores que en el momento vivían una situación penosa económicamente hablando”, afirma Jarvis, catedrático de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM).”

Más adelante Indhira Suero indica que el historiador Emilio Rodríguez Demorizi en su texto “Poesía popular dominicana”, y citando al periódico “El Dominicano” de 1855, señala que los dominicanos de esa época se referían a los haitianos con el término peyorativo de ‘cocolos’.

 (Una pintura del petromacorisano Nadal Walcot que describe simbólicamente el aporte de los llamados cocolos al desarrollo industrial y social de San Pedro de Macorís).

El mismo trabajo menciona un artículo del LISTIN DIARIO, el 21 de diciembre de 1900, donde se afirmaba que con el mote de ‘cocolos’ fueron confirmados aquí los emigrantes que de varias de las pequeñas Antillas “vienen todos los años a este distrito con el objeto de trabajar durante la zafra en los ingenios de caña”.

"En el artículo “Inmigración dañosa”, aparecido en el LISTIN DIARIO en diciembre de 1900, se decía: “Estos desgraciados cocolos… vienen a Macorís, no a vivir, no a fundar, sino a trabajar cuatro meses, en los cuales solo cambian de traje en carnaval para pedir limosnas bailando en las calles públicas; no comen, que viven divinamente con algunas galletas y un poco de bacalao, y al fin de zafra, cargados con el producido de sus jornales, emprenden viaje, hasta la próxima molienda”.

“El trabajador negro era la garantía que tenían los capitalistas para invertir y maximizar beneficios, porque árabes, españoles, chinos e italianos se dedicaron a diversos negocios diferentes al del azúcar”. (Alexis Calderón Del Giudice).

"En el 1904, los dueños de ingenios salieron a la defensa de los cocolos al asegurar que “tal inmigración era un regalo del cielo, gracias a ella no se ha arruinado la industria sacarina, pues solo pide un jornal de 40 centavos, mientras que el dominicano no trabaja por tan poco”.


A partir de 1852 cuando Macorix fue elevada a la categoría de puerto militar bajo el mando de Norberto Maldonado la pujante comunidad de pescadores, conuqueros y artesanos adquirió una trascendencia política competitiva. Desde ese momento todo sería una cadena de logros sucesivos. Inversiones, negocios, pastoreos y ganadería, entre otros renglones productivos, atraerían una nutrida inmigración que incidiría de manera notable en su estilo de vida. El auge fue tan acelerado que se dieron formas organizadas en su crecimiento y desarrollo deslumbrante. Interpretando la suma de éxito en marcha como una generosidad divina el presbiterio Elías González propone que se le añada al nombre original de Macorix o Macorís para que se llame San Pedro de Macorís; hecho que se concretizó en junio de 1858.  Así nació nuestro nombre histórico.  Y entonces en este Macorís de San Pedro se creó el primer cuerpo de bomberos de la República Dominicana en 1879; en 1912 llegó a nuestra ciudad el primer carro que piso suelo dominicano de la marca Ford; aquí se construyó en 1911, el primer monumento del país dedicado a Duarte, Sánchez y Mella, en reconocimiento a su condición de padres de la patria.

En 1902 el entonces gobernador de esta ciudad se sumó a las pretensiones de Horacio Vásquez quien había iniciado un levantamiento político y militar contra el presidente Jiménez.

A este respecto hay un dato interesante y es que, en el año de 1902 la provincia de San Pedro de Macorís tuvo seis gobernadores, quizás fue una etapa de fuerte tensión política, ellos fueron los señores, general Fernando Chalas (Vasallo), general Casimiro Henríquez, general Pedro A. Pérez, general Luis María Hernández, general Francisco Richiez Ducoudray, Licenciado Lorenzo Sánchez Rijo y Carlos Reynoso.
 
(El Edificio Armenteros, construido entre los años 1918 y 1923 en hormigón armado por el ingeniero Nicolás Cortina. Este edificio es de estilo republicano con influencias catalanas y nouveaux, poseía grandes cornisamentos y vitrales en la parte exterior, así como una rica decoración interna en sus espaciosos apartamentos. Fue catalogado como uno de los de mayor extensión del país, en la actualidad ha sido tomado por un grupo de familias que lo mantiene en el abandono total, le han destruido toda su originalidad interior hecho en caobas centenarias, lo que lo ocupan no paran en su proceso destructivo sin que ninguna autoridad se interese por su rescate y preservación).
Entre los años de 1911 a 1924 todo un dinamismo social y económico dominaba el ambiente de la ciudad. Durante esa época se levantó la construcción del más grande del país en concreto. La vista urbana que exhibía Macorís impactaba a los visitantes y llenaba de orgullo a sus habitantes. Fue la época de oro de la llamada "Danza de los Millones". El acontecimiento derivado de la Primera Guerra Mundial detuvo abruptamente este avance.


En verano de 1921 Trujillo fue asignado con el rango de segundo teniente en San Pedro de Macorís, tras asumir el gobierno entre los años de 1930 al 1961, éste desarrolló una política de resentimiento e indiferencia hacia esta ciudad, con lo que se ahondó el abandono de esta.

El despojo de tierras y propiedades que acompañó la deforestación de la zona rural de San Pedro de Macorís para sustituirlo por plantaciones de caña tuvo su secuela de abuso, arbitrariedades e injusticia. Esta situación es denunciada en la novela Caña y Bueyes de Francisco Mocoso Puello.

 También la novela Over escrito por Ramón Marrero Aristy, oriundo de San Rafael del Yuma, denuncia en la misma, los abusos, atropellos y maltratos contra los trabajadores de los centrales azucareros.

 (El edificio Morey construido en 1915 por los ingenieros Nicolás Cortina, José Turrul, Jaime Malla y José Domemech. Este edificio es de estilo victoriano, cuya torre angular es de inspiración gótica que, suspendida en el aire con bellos vitrales franceses de la época, coronada por significativos cornisamentos, adornados con guirnaldas, dardos, ovas, ménsulas, ojos de buey, claves, pilastras, forjas. En su primer nivel de la calle Sánchez, estuvo la Ferretería, y en la parte de la calle Duarte estaba instalado el Hotel Saboya o el “Gran Hotel”, cuyos dormitorios funcionaban en la parte de arriba, único alojamiento de primera clase y el primer edificio de 3 pisos del país).


Los finales del siglo X1X y comienzo del siglo XX tuvieron una marca especial para nuestra ciudad. Y quizás como estrategia de prolongarse en tiempo años los arquitectos y constructores de las bellas y atractivas edificaciones levantada en hormigón armado, símbolo del esplendor de esa época de bonanza azucarera, tuvieron la idea de consignar en sus fachadas las fecha en que las mismas fueron construida; incluso hay barriadas como los sectores de la calle Aurora y Miramar, con historia muy particulares en su propia conformación. El primero con su vetusta casa de madera y que fuera el centro comercial de la ciudad en aquellos tiempos inicial del desarrollo social urbanístico de la misma; y el segundo, cuyo contraste está en sus construcciones en cemento en cuyo sector levantó sus edificios- hospitales el prestigioso doctor George, durante los años de 1923, 1947 y 1958. Este barrio que originalmente fue "una gran Hacienda del nativo de San José de los Llanos Don Pedro Camarena",  y que "más tarde pasó a ser propiedad del cubano Don Lorenzo Zayas Bazán, quien la parceló en 1897, para ofrecerlo en venta a ricos y regaló a pobres, en su mayoría a los primeros 100  isleños cocolos que arribaron a Macorís, traídos por Don Lorenzo en 1877, dos años antes del inicio de la Industria Azucarera",  según  apunta Vinicio Viguera Ozuna, simboliza una mezcla cultural idiomática que diferenció notablemente este barrio de los demás sectores de la ciudad. La historia nacional consigna que en el sector de Miramar (en “Punta de La Pasa”), “el General Ulises Heureaux (Lilis) fusiló a los Generales Ramón Castillo y José Estay”. Y también que en Miramar nació la “primera Radiodifusora de la ciudad y de la República (1924)”.


(El edificio que alojó el Colegio San Pedro, nótese que es en la esquina Colón y que las viviendas adyacentes son de maderas).


(Estados dos fotos muestras épocas distantes, la primera uno de los tantos edificios de madera de más de un nivel existente en ese tiempo, la segunda, una vista del deterioro que en una ocasión presentó la Calle Aurora, una vía que fue el centro comercial de la ciudad a principio del siglo X1X).

(Otro edificio de dos niveles construido en madera frecuente en nuestra ciudad, esta vivienda está situada en la Calle Sánchez, en el barrio Miramar, al lado del histórico edificio donde estuvo por más de 60 años el Club Centro Español).

El auge industrial azucarero de San Pedro de Macorís tuvo un impacto e influencia atractiva en la sociedad nacional, de todo el litoral de la republica llegaban personas y familias para asentarse en la ciudad, comerciantes, aventureros, gentes de negocios y busca suerte se ubicaban en sus calles y entorno procurando algún beneficio de su esplendor económico y financiero. El periodista y escritor Francisco Comarazamy consignó esa época fructífera en un libro memoria, al respecto indica: "Tras aquella oleada advino una generación de dóricos pilares que ni el tiempo ni la extensión de la escolaridad han podido superar". En efecto, la bonanza económica y social atrajo oleada de inmigrantes puertorriqueños, árabes, europeos, norte y sur américa, y hasta de Asia, de esos lejanos lugares llegaban a la ciudad para invertir y hacer negocios.  Probar suerte. Pero de repente todo se detuvo. Los acontecimientos producidos por la Primera Guerra Mundial (1914-1918) llevó a muchos países a una crisis económica, y República Dominicana fue de lo que más sintió y sufrió la situación, los precios del azúcar, nuestro principal producto de exportación de ese tiempo, se vinieron abajo, de veinte pesos que costaba la libra cayó a un peso. La inesperada crisis detuvo el auge de las construcciones en concreto, los proyectos de inversiones y la expansión industrial. Esta situación de estancamiento se prolongó por unos veinte años.

(Imágenes diferentes emblemática y centenarias, referencial y significativa del Parque Duarte que muestra ilustrativamente la historia de San Pedro de Macorís, obsérvese que en esa época tenía el piso de tierra).

De estos ciclos de progreso, tropiezos, vaivenes, altibajos, iniciativas y paralizaciones forzadas llegamos hasta José Hazim Azar cuyo talante asume en su carismática figura el rico arsenal de nuestra historia. El prolongado aturdimiento devenido de la crisis de los años 1914 hasta los años de 1930. Los años en que nuestra ciudad se detuvo en su empuje de realizaciones materiales.  

 (Edificación Club Centro Español, construido en 1914 por Jaime Malla, ubicado en la calle Sánchez, este edificio se caracterizó por su bella fachada de estilo neoclásico).

San Pedro de Macorís tiene en su haber histórico docenas de hombres y mujeres destacados cuyo talento y capacidad personal ha quedado demostrado a todo lo largo del camino.  Un manojo de logros y anécdotas fascinante que adorna su presencia social. Cada quien en su respectivo espacio ha hecho  su aporte, ya sea en los deportes,  las artes, la cultura, la literatura, el magisterio, en  la educación,  como abogado, medico, contable; en las factorías como técnico, mecánico, tornero, electricista, alfarero, lustra zapatos, cochero, cocinero, comerciante, industrial, empresario, atleta; en fin, en las diferentes disciplina del conocimiento y del saber, hemos tenidos figuras sobresaliente que han competido y compiten con entusiasmo y entrega denodada por  amor patriótico y fe en el presente y futuro del país.  No obstante, dentro de esta gama de luces, la de don José Hazim Azar se destaca, sobresale, brilla con mayor intensidad y fuerza.

 La magnitud de su destello representa su gigantesco aporte de la Universidad Central del Este, su obra cumbre. El brillo estelar de la UCE retroalimenta el resplandor de las demás luces. La estimación, elogios y ponderación de la mayoría de las luminarias que hemos tenidos de los últimos 48 años parte de la existencia, significado histórico y legado de la Universidad Central del Este, cuya gravitación social y material a partir de su fundación y creación el 15 de octubre de 1970 se ha extendido por las diferentes áreas en que ellos han incursionados. A través de la UCE han logrado la preparación, conocimientos, asesoría y apoyo, para competir y salir airosos; para alcanzar una profesión y con ello un espacio de respeto en la sociedad. Es verdad que si nuestra UCE no existiera muchos de ellos lo hubiese conseguido en otros litorales, empero, el esfuerzo ha sido menor y las posibilidades han estado al alcance de sus manos. Si la UCE no existiera la historia de los últimos años de San Pedro de Macorís fuera otra, pues, a pesar de su existencia y aporte la situación de nuestra ciudad luce pésima, abandonada y desatendida. Gracias al liderazgo institucional de la UCE tenemos algunos acercamientos y contactos con las esferas del poder político a los que en ocasiones podemos presentarle nuestras necesidades y canalizarle reclamos.

(“Violeta Celeste Stephen Vanterpool nació en San Pedro de Macorís el 21 de noviembre de 1929 y a los cinco años ya cantaba en los actos religiosos de la iglesia episcopal anglicana del pueblo. Fueron los esposos Hodge, quienes estaban a cargo de la iglesia, los primeros maestros de música que tuvo Violeta. Con ellos se inició en los conocimientos de la teoría, el solfeo y el piano; estudió dicción inglesa y fue conociendo el repertorio vocal”.

(“Para representar a su pueblo natal en la VII Semana Aniversaria de La Voz Dominicana viajó Violeta Stephen a la capital del país en 1949 y fue tan grata la impresión que causó al cantar Granada, de Agustín Lara, que le fue otorgada una beca por la radiodifusora para estudiar canto”).

(“Muy pronto su voz comenzó a ser escuchada con frecuencia, tanto en la radio como en los más importantes teatros de la ciudad; así, el 1º de agosto de 1952 fue invitada a participar en la primera trasmisión televisiva que se hiciera en el país. Cuatro años después su preparación había llegado tan alto que, en la puesta en escena de la ópera Cavalleria Rusticana, de Mascgni, con la cual se celebró la XIV Semana Aniversaria de La Voz Dominicana, Violeta Stephen participó junto a los prestigiosos artistas Tony Curiel, Legia Monsanto, Luz Pichardo y Napoleón Dhimes, entre los que logró una actuación tan estelar que fue ascendida por la empresa a la categoría de cantante clase A”.)

(“En 1957, para el mismo evento, Violeta integró el elenco de La Traviata, y en 1961 se fue a residir a Italia, donde permaneció por espacio de dos años y se presentó en varias oportunidades por la televisión de aquel país”).

(En 1963 regresó a la patria y, luego de algunas presentaciones, decidió retirarse del canto profesional).

(Fuente Los cien músicos del siglo XX. Rep. Dominicana).

De estas tierras de caña, centrales azucareros, Guavaberry, azúcar, miel y poetas son nativas las sopranos Violeta Stephan, Ivonne Haza de Bisonó, así como las consagradas educadoras Camila Álvarez. Casimira Heureaux, Isabel Rojo, las hermanas Estelvina y Domitilia Richiez Ducuudray; Nitín Sasso, Cornelia Vicioso, Consuelo Brea, América Cestero, Mercedes Mendoza, Susana Duverge, Cheché Mon, Altagracia Domínguez, Consuelo Montalvo, Concepción Zayas, Mercedes Mendoza, Filomena Gómez, Petronila Angélica Gómez, Enriqueta Acevedo, Dalila Richiez, También Leopoldo Richiez, Rafael Augusto Sánchez, Santiago Lamela Díaz, Mario Caminero Sánchez, Baldemaro Rijo, Arístides Castillo, Liquito Leonor, Emilio A. Morel, Gustavo Julio Henríquez, Rafael Richiez Acevedo y Quiterio Berroa.

(Foto de la destacada soprano de San Pedro de Macorís Ivonne Haza.).

San Pedro de Macorís tiene el mérito de haber producido magistrados tan idóneos, serio, responsables, justo y honesto como Manuel A. Richiez, Laureano Canto Rodríguez (Galano) y Bruno Aponte Cotes. Ejemplo de vocación de servicio y decencia pública.

  Foto de Anacaona Moscoso.

Aquí se albergó y sentó las bases de su quehacer educativo Anacaona Moscoso Puello de Sánchez 1876 -1907, quien creara el Instituto de Señoritas Salomé Ureña y que murió el 5 de septiembre de 1907 en San Pedro de Macorís.

(Fotos del afamado compositor dominicano, de San Pedro de Macorís, Mario de Jesús Báez, murió el 20 de julio en Ciudad México a los 84 años.).
("Mario de Jesús (Mario César de Jesús Báez, 1924-2008). Importante compositor y editor musical dominicano").

("Nació el 18 de agosto en San Pedro de Macorís. Publicó ensayos y artículos sobre temas generales de arte y especialmente de música en distintos periódicos y revistas. Fue mensajero de aduanas y cronista de espectáculos en el periódico La Nación y en la Revista Salón Fígaro. En 1946 vivió en Nueva York y fue redactor de la Revista Teatral y corresponsal de algunas publicaciones latinoamericanas. Su deseo de componer lo llevó a estudiar música. En 1950 fue reclutado por la editora de música Peer Internacional. Visitó México y se vinculó con el ambiente comercial musical. En 1952 el cubano Bienvenido Granda acompañado por la Sonora Matancera grabó el bolero "No toques ese disco", su primer éxito como compositor. En 1959 se radicó en México. Fue subgerente de la Editora Mexicana de Música Internacional (EMMI). En 1966 fue nombrado gerente general de la Editora Mundo Musical, subsidiaria del emporio CBS, actualmente SONY. En marzo de 1968 fundó la Editora Musical Latinoamericana (EMLASA) y en 1975 inauguró Leo Musical").

("Recibió premios y reconocimientos por sus aportes como compositor y editor. En 1950 por su labor autoral le otorgaron el premio Ángel Vitoria en Nueva York. En 1959 obtuvo el premio Farándula de la revista homónima. Al año siguiente, Radiolandia, por el bolero "Ayúdame, Dios mío". En 1961 de la Revista Teatral por su canción "Y" (Y que has hecho del amor que me juraste), que han hecho famosa las voces de Julio Iglesias, Luis Miguel y Plácido Domingo. En 1963 Televicentro (después Televisa) lo distinguió por el bolero "Adelante", que Marco Antonio Solís convirtió en un éxito. En 1971 la Asociación Nacional de Locutores lo homenajeó por su carrera como compositor").

("En 1979 fue galardonado con el premio El Dorado. En 1980 recibió el Guaicaipuro de Oro, en Caracas, Venezuela. En 1986 fue reconocido en el marco del Festival Internacional Metztli de Plata, en México, por sus 40 años como autor y editor. En 1991 fue homenajeado el Reencuentro de la Canción Dominicana por enriquecer el acervo musical dominicano con antológicas canciones. En 1995 obtuvo el Premio ASCAP por la canción "Ni con la vida te pago", interpretada por Vicente Fernández que se convirtió en la canción regional mexicana más popular ese año. En 1997 participó del homenaje a Julio Iglesias en el hotel Fontainebleu en la ciudad de Miami, Florida. En mayo de 2007 le fue otorgada la Condecoración al Mérito Duarte, Sánchez y Mella, en el grado de Caballero, ceremonia celebrada en la sede de la Embajada Dominicana en México. En 2006 la secretaría de Estado de Turismo le rindió homenaje, fue distinguido en el Senado de la República Dominicana y fue realizado un disco con sus más celebradas canciones").

(Murió el 20 de julio en Ciudad México a los 84 años).

(Fuente Periódico El Caribe).

En nuestro  Macorís del mar;  de caña, guarapo, miel y  guloya, nació en 1924 el famoso compositor criollo Mario de Jesús Báez, y quien se fuera en 1959 a residir a la ciudad de México, autor de los grandes temas musicales  “Que se mueran de envidia”, “Cría cuervos”, “Perdámonos”, “Ya la pagarás”, “Cumbia del torero” ,  “Y”u “O…”, ¿Y qué hiciste del amor que me brindaste?”, entre otros éxitos musicales, interpretados por los renombrados artistas  Libertad Lamarque, Luis Miguel, Los Panchos, Vicente Fernández, Julio Iglesias, Vicky Carr, Lucía Méndez, María Luisa Landin, Lucho Gatica,  Marcos Antonio Muñiz, La Sonora Matancera y Pérez Prado, entre muchos otros.

Aquí vivió y murió el extraordinario y reputado médico alemán Carl Theodor Konrad Ludwig Georg, quien construyó con recursos propios seis hospitales de primer orden en los años de 1921, 1937. 1941, 1948, 1950 y 1957.

(Imágenes del afamado y prestigioso médico alemán Dr. Carl Theodore Georg, y del entonces hospital San Antonio, el primero de varios pabellones hospitales que éste construyó, y que fueron referente fuera del país.

(Fotos del prestigioso galeno doctor Carl-Theodor Georg, y los edificios hospitales construido con su propio recurso).

 (“El doctor Georg nació en Alemania, el 23 de enero de1884, en la ciudad de Biebrich Am Rhein, y murió en San Pedro de Macorís el 11 de junio de 1966. El hospital edificio fue construido en 1921, allí había un hospital, edificio de madera del padre Luciani, que fue destruido por un incendio. El Dr. George se interesó y en una labor generosa se dispuso a construir varios pabellones de concreto; después construir el primero en 1921, en 1937 construyó el segundo pabellón, denominado Rancho Grande 1937. En ese año estaba de moda la canción de Tito Guizar “Allá en el Rancho Grande”. Los demás edificios fueron construidos en los años de 1941, 1948, 1950, 1958, sucesivamente. Hoy en el construido entre los años 1941, 1948, 1950, 1958, funciona la sede de la Universidad Autónoma de Santo Domingo -UAD-, los edificios fueron comprados por 68 millones de pesos por el Ayuntamiento con los fondos destinados al Presupuesto Participativo de los años 2010.2011, y 2012”).

Don José Hazim tuvo la visión para recoger y expresar en la ejecución de su proyecto universitario; en el desarrollo de sus ideas maravillosas, todo el rico arsenal legado por la pléyade que surcó con su presencia rutilante la Sultana del Este. En su persona se concretizaron sus sueños y anhelos. Las letras, la poesía, las ciencias, los deportes y demás se han enriquecido y tenido continuidad y espacio para esparcirse, proyectarse y multiplicarse en cada segundo e instante en que se afianza y expande la Universidad Central del Este junto a toda su inmensa infraestructura social y de servicios deparado por su designio histórico.

  (Dos fotos que evidencian la historia de la ciudad, el edificio del primer cuerpo de bomberos del país, y una actividad de estos, hace más de 100 años).
Desde el signo de su particular personalidad sobresalía cierta aura atrayente emanado de su natural capacidad persuasiva, su estilo directo de exponer sus ideas libres de ambigüedad contaminante. Por eso le llegaba a todo con facilidad. Razonaba partiendo de las bases históricas relativas a los logros y alcance obtenido por San Pedro de Macorís en el curso de su existencia social y urbana; en su amalgama raíces heterogéneas cuyo abanico social configuró una simbología atractiva donde prendió el talento de la pléyade en sus creaciones de eternidad.  

Dentro del cenáculo en que frecuentaba elucidaba apasionadamente sus puntos de vistas, lo enfatizaba ante sus oyentes procurando en ellos algún tipo de compromiso militante. Todo su discurso social giraba en torno de la grandeza que caracterizo la ciudad emblemática de mediado del siglo X1X y los primeros 24 años del siglo XX. Ese listado de realizaciones bruscamente truncado desde el Poder egoísta y chauvinista; desde la competencia mezquina y de la rivalidad regional que nunca aceptó aquel progreso y desarrollo que anonadaba a visitantes e inmigrantes.  Nadie como él en su momento tuvo esa visión emprendedora, esa capacidad aglutinadora y ese liderazgo de respeto esparcido sobre diversos conglomerados de la sociedad y de la población.

Esta sentenciado que «Todo hombre tiene su época», y en este sentido, lo importante es tener el olfato y el instinto para situarse en el tiempo que justamente le corresponde a cada uno en el momento concreto. Aprovechar cualquier imprevisto coyuntural con templanza y entereza. Ver la situación que se presenta como un desafío propio de la vida; con la certidumbre de que todo triunfo depende de la capacidad que nos damos para subvertir el anquilosamiento social del entorno. Estar presto a rebelarnos a la presencia de todo anacronismo y a cualquier obstáculo. Tener la sapiencia y madurez necesaria para afrontar desde una filosofía de vida cualquier dilema que se nos presente, esto podría determinar el éxito o fracaso de cualquier empresa o proyecto en cuestión. Y don José Hazim Azar con el olfato social peculiar en todo visionario supo canalizar y dinamizar sobre sus hombros la nueva ruta de desarrollo y progreso que los nuevos tiempos urgían y exigían para San Pedro de Macorís; notoria realidad que lo catapultó con creces, y sin desmedro de otros, en vanguardia protagónica de su tiempo.

 (Esta imagen alusiva al dominio absoluto del régimen del general Rafael Leónidas Trujillo Molina tenía que ser colocada de manera obligatoria en cada hogar dominicano, de no hacerlo sería inmediatamente tildado de enemigo y sometido a persecución, cárcel, tortura y la muerte. El país estaba sometido a un ambiente de terror espanto).

Muchos critican la adhesión de algunos intelectuales, profesionales y hombres de letras al régimen trujillista, algunos de esos cuestionamientos se hicieron desde un exilio donde prevalecía una relativa protección física, no obstante esta apreciación, debemos reconocer que los tentáculos criminales del régimen trujillista no tenían fronteras, verbigracia, el asesinato del escritor y periodista nativo de San Pedro de Macorís  Andrés Francisco Requena en 1952, a manos del sicario Félix Wenceslao Bernardino Evangelista (Buchilay), del escritor español Jesús de Galíndez Suárez en 1956, y del también intelectual español  José Almoina Mateos, así como del dirigente sindical Mauricio Báez, entre otras muchas vidas eliminadas en tierras extranjeras.

 ("Almoina fue, masón y socialista, llega a ser profesor universitario, primero, y maestro particular del hijo de Trujillo y secretario personal del propio dictador, después. La aceptación del puesto le valió la expulsión del PSOE en el exilio. El gallego huye a México con su familia, pero antes, durante los pocos meses que permanece en el gobierno del dictador, realiza un informe secreto sobre las actividades desestabilizadoras de Trujillo en Cuba y Venezuela").

("El libro de 1949 Una satrapía en el Caribe: Historia puntual de la mala vida del déspota Rafael Leónidas Trujillo, que firma con el nombre falso de 'Gregorio R. Bustamante', recoge esas denuncias. Un año después edita con su nombre real Yo fui secretario de Trujillo, una loa al dictador destinada a despistar al régimen. Sin embargo, después de permanecer escondido durante más de 12 años, muere asesinado en México por dos pistoleros cubanos, el 5 de mayo de 1960, un día después de ser atropellado y baleado. Sus últimas palabras fueron: "Fue Trujillo". Salvador Moral).

A este cuadro de despótica bestialidad criminal tendríamos que agregar el atentado terrorista contra el presidente de Venezuela Rómulo Betancourt, el 24 de junio de 1960,   sin embargo, el mantener una línea opositora dentro del territorio nacional implicaba un alto y mayor riesgo para los actuantes. Para comprender esta situación hay que situarse en el contexto de la época. Entre las razones para sumarse al régimen estaba primera la necesidad de cuidar y proteger la integridad física de la familia, así como bienes, propiedades e inmuebles; también el vacío existencial de algunos de ellos influyó emocionalmente en su decisión equivocada. Otros, actuaron agotados por los continuos enfrentamientos fratricida entre los caciques regionales y el partidarismo irracional existente, para ellos la presencia de Trujillo al frente de la nación representaba el orden contra el caos y la anarquía imperante; veían en el dictador un líder fuerte que garantizaba la defensa de la patria frente al peligro haitiano. El nacionalismo justificaba, en parte, su conversión al trujillato. Lo hubo reaccionarios convencidos y los conservadores que evitaban tener problema debido a que ello le garantizaba su vida. Una cosa era ser trujillista víctima del chantaje, la intimidación, la amenaza y el acorralamiento, y otra fue servirle al régimen en aras de saciar alguna necesidad megalómana de poder, actuando con una vocación de servilismo criminal y represivo. Ser esbirro y verdugo al servicio de la tiranía. Algunos actuaron por cobardía y abyección. Los que contrajeron deuda de sangre con el pueblo, los que se sumaron a la depredación de la patria jamás tendrán ni justificación ni perdón, Don José Hazim Azar le aceptó el cargo de alcalde o sindico de la ciudad de San Pedro de Macorís a Trujillo no porque era un entusiasta simpatizante de éste, sino porque veía la posición como una forma de servirle a su ciudad, a su pueblo y a la nación. Un vistazo en sus ejecutorias de los dos años en que estuvo al frente del Ayuntamiento petromacorisano demuestra claramente nuestra aseveración. A pesar de la vigilancia permanente contra la ciudadanía fue capaz de arriesgar el respeto de que gozaba como profesional de mérito para comunicarse abiertamente con personas sindicada como enemigo del gobierno.

Tal es el caso de reconocido y perseguido dirigente obrero Mucio Báez, quien luego fue secuestrado y asesinado en Cuba, y del cual José Hazim Azar fue su abogado cuando éste estuvo preso y sometido a la acción de la justicia trujillista, tras encabezar las huelgas de los trabajadores exigiendo aumento salarial y mejores condiciones de trabajo entre los años de 1947-48. Ese hecho pudo haberle costado muy caro, empero su espíritu de solidaridad para con el amigo pudo más que el riesgo tomado. Su relación con el oprobio la utilizó para ayudar a amigos señalados como desafectos al sistema.

 (Foto del  cuerpo sin vida del intelectual petromacorisano Andrés Francisco Requena (1908-1952). Escritor y periodista dominicano asesinado, según denuncias y documentos desclasificados del gobierno de EE. UU., por Félix W Bernardino).  

(“En su juventud trabajó en diferentes oficios entre los que se encuentran los de sastre y boxeador. Fue diplomático durante el gobierno de Rafael Leónidas Trujillo, pero las diferencias con el dictador lo empujaron al exilio. Fue uno de los muchos escritores que vivió en los Estados Unidos que le ayudó a ampliar sus horizontes literarios. En la década de 1940 trabajó en Nueva York como periodista).

(En 1948 fundó el periódico Patria en el que denunció los abusos y crímenes del régimen. En 1949 publicó en México la novela Cementerio sin cruces, desarrollada en el sur del país en la que critica la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo y lo ridiculiza de forma directa, lo que le costó la vida. Su muerte fue un crimen del tirano y constituyó un escándalo en Nueva York. Murió el 2 de octubre a manos del sicario Félix Wenceslao Bernardino Evangelista (Buchilay), quien se dedicaba a cumplir este tipo de órdenes del gobierno trujillista. Era el jefe de los Jinetes del Este”).

 (Foto: El dictador Trujillo rodeado de algunos de sus altos oficiales de confianza durante una de sus actividades públicas).

(Algunas imágenes del temible criminal, esbirro y sicario trujillista Félix W. Bernardino, las mismas tienen cierto valor histórico, en la primera aparece sin afeitarse y fue tomada de la página web Fotos De La Era, la segunda y tercera, se le ve junto a Trujillo y algunos de los secuaces de su régimen de terror y muerte, y en la última con sus gafas habituales,).

("Es poco lo que se conoce de la infancia de Félix W. Bernardino, nativo de El Seibo, excepto que a principios de 1920 fue uno de los primeros saxofones de la banda de música de Santo Domingo y posteriormente un sicario de Trujillo. En una reconocida publicación dominicana se dijo que la W. de Bernardino significaba Winchester, porque tenía una escopeta de esa marca que utilizaba frecuentemente. Pero no es así. Son pocos los que saben que el nombre completo de Bernardino era Félix Wenceslao Bernardino Evangelista. En 1930 guardó prisión en la fortaleza Ozama por haber dado muerte a un hombre. Estudió Derecho en la prisión, graduándose de abogado en la Universidad de Santo Domingo. Una vez graduado, envió una carta a Trujillo, que ya era presidente, con elogios a su gobierno por auspiciar un régimen carcelario que permitía a los presos estudiar y lograr una profesión").

("En lo adelante, Bernardino sirvió como diplomático, político y hacendado, pero especialmente amigo y fiel servidor de Trujillo, a quien llamaba "mi Generalísimo". En sus tareas diplomáticas se vio involucrado en varios crímenes en el exterior-el secuestro en Nueva York el 12 de marzo de 1956 del profesor español Jesús de Galíndez, quien después de ser traído a la República Dominicana y llevado ante Trujillo, jamás apareció; la muerte del periodista Andrés Francisco Requena, autor del libro "Cementerio sin Cruces", contrario a Trujillo, el 2 de octubre de 1952; y en la muerte del líder obrero Mauricio Báez en La Habana, el 8 diciembre de 1950. Ese día, agentes encubiertos al servicio de Trujillo se presentaron en casa número 8 de la calle Cervantes, en el reparto Sevillano en La Habana, secuestraron a Mauricio Báez, y nunca más se le volvió a ver. Bernardino cumplía esa misión en Cuba cuando el hecho se produjo").

("Los casos de crímenes en los cuales Bernardino se vio envuelto determinaron que varios países latinoamericanos se negaran a aceptarlo en sus respectivos territorios").

("Tras la muerte de Trujillo, Bernardino fue juzgado en Santo Domingo, acusado de haber dado muerte, entre otros, a Héctor Barón García y a los hermanos Héctor y Pedro Díaz; de la muerte de Demetrio Castro; de causar heridas con lesión permanente a ciudadanos dominicanos y haitianos, en la hacienda que poseía en El Pintado, de El Seibo; de abuso de poder por haber despojado de terrenos a sus legítimos propietarios, de prisión arbitraria y actos de barbarie").

("El juicio en su contra se inició el 1 de octubre de 1962 y el proceso duró varios años, durante los cuales Bernardino permaneció preso en La Victoria, donde se dice gozaba de privilegios y comodidades. Siempre proclamó su inocencia. El 20 de abril de 1966, es decir cuatro años después de iniciarse el proceso judicial, en el Gobierno Provisional del doctor Héctor García Godoy, el fiscal de la Primera Cámara Penal solicitó el descargo de Bernardino de todas las acusaciones y que fuera solamente sometido a la pena cumplida por incendio voluntario").

("El 30 de agosto de 1963, a menos de un mes del derrocamiento del Gobierno constitucional de Juan Bosch, el Instituto Agrario Dominicano distribuyó entre 105 campesinos de El Pintado, tierras de Bernardino, que les habían sido confiscadas en 1962 por el Consejo de Estado. Sin embargo, años después Bernardino no solamente recuperó sus tierras, sino que logró un fallo condenatorio contra la empresa azucarera norteamericana Gulf and Western, para que le pagara casi un tercio de un millón de pesos por el supuesto usufructo indebido de sus tierras. Otro fallo judicial revocó el anterior y la Gulf se vio así liberada de efectuar el pago al que había sido condenada").

("Pero Bernardino, ni siquiera porque su líder Trujillo había desaparecido del escenario político, se vio nuevamente envuelto en un suceso que ocupó las primeras páginas de los periódicos, al ser acusado por el embajador de Haití en la República Dominicana, Clement Vincent, de haber dado muerte y herido a varios de sus compatriotas. La versión que circuló entonces fue la de que varios haitianos que habían terminado sus labores en plantaciones del Consejo Estatal del Azúcar, en lugar de ser repatriados como acordaba su contrato, fueron llevados a la fuerza a la finca de Bernardino. Se dice que Bernardino pagó la suma de diez pesos por cada haitiano. Pero como se negaron a trabajar, de acuerdo con esas versiones, el propio Bernardino les cayó a tiros, lo que dio lugar a que el embajador Vincent se presentara a la casa campestre de Bernardino, con quien discutió acaloradamente").

(Fuente: La Higuera. Net.  Y Diario Libre)

 En el relevante ensayo El mito de Sísifo del novelista, dramaturgo y ensayista argelino- francés, ganador del  Premio Nobel de Literatura 1957, Albert Camus, quien falleciera el 4 de enero de 1960,  a causa de un accidente de tránsito, valora la vida partiendo de su propia realidad existencial, y destaca en su trabajo las peripecias  de  Sísifo quien pese a estar condenado por los dioses  a subir  constantemente una enorme  piedra pesada de por vida, nunca acude al suicidio para liberarse de su tormento cruel.  "Nunca vi morir a nadie por el argumento ontológico. Galileo, que defendía una verdad científica importante, abjuró de ella con la mayor facilidad del mundo, cuando puso su vida en peligro. En cierto sentido, hizo bien. Aquella verdad no valía la hoguera". Esta lectura nos enseña que ningún personaje puede ser analizado fuera del espacio y tiempo de su época, ello sería injusto y acomodaticio, pues, la misma época, contribuye a su evaluación objetiva y justa.  Ha moldear su personalidad social y psicológica. La fría comprensión de cualquier acontecimiento debe llevar consigo el sentido racional de lo ocurrido, evaluarlo fuera de su autenticidad constituye un desacierto que desfigura su armonía contextual. La verdad histórica rechaza cual adulteración aberrante.  Hay situaciones que responden a coyuntura del momento y que son irrepetible, de cuya realidad el potencial protagonista no puede escapar. Fernand Braudel señala que la historia “no era más que la tropa de los acontecimientos vencedores". En este sentido, para comprender a José Hazim Azar como figura pública; líder, guía y ciudadano comprometido con el altruismo, el emprendurismo y el avance de la sociedad petromacorisana, tenemos que desmitificarlo, verlo en su realidad biológica como ser humano, con sus debilidades y fortaleza intrínseca, es lo que Edgar Morin llamaba conceptualmente "abandonar la razón mítica y salvaguardar la razón critica".  Por encima de cualquier posible mesianismo salido a flote, éste, aunque se lo propusiera, nunca pudo transformarse en una especie de santo inmaculado o cosa parecida. Su propia realidad como hombre impedía tal configuración.

  La muerte por ajusticiamiento del dictador general Rafael Leónidas Trujillo Molina el 30 de mayo de 1961 abrió un nuevo capítulo en la historia política del país, y tras este magno acontecimiento histórico devino un gran despertar de vastos sectores de la sociedad nacional y de la población que en oleajes humanos comenzaron a llenar calles y plazas pública al grito de Libertad, Libertad. Por todas partes se respiraba un ambiente de viva emoción, muchedumbres exaltadas recorrían diferentes lugares con su slogan y consignas de Libertad y Democracia.

Entre diciembre de 1961 y enero del 1962 el país vivió un ambiente de gran tensión política, ola de movilizaciones populares se sucedían con frecuencia demandando conquistas democráticas, durante ese lapso se produjo una gran huelga nacional exigiendo la inmediata salida del país de la familia Trujillo integrada por sus hijos, hermanos y otros parientes cercanos. Navidad con Libertad coreaban las masas. En medio de fuertes presiones internacionales y un ambiente de creciente tensión, la familia Trujillo y sus más connotados remanentes abandonaron precipitadamente el país. Meses después Joaquín Balaguer que era el último presidente títere de la tiranía buscó asilo en la Nunciatura, cuya sede estaba justa al lado de su vivienda, en la avenida Máximo Gómez. Se dice que éste solo tuvo que brincar la verja de su casa y toma asilo. Es en medio de este panorama de incertidumbre, temor, movilizaciones callejeras que se instala el gobierno del Consejo de Estado encabezado por Rafael Filiberto Bonnelly Fondeur (1904. 1979). San Pedro de Macorís no se quedó atrás en este clima de agitación política. Grupo de jóvenes también se habían sumado al amplio sentimiento por un país con disfrute pleno de democracia y libertades ciudadanas.

(El dictador Trujillo acompañado de algunos militares de su entorno durante una actividad oficial. La mayoría de su sequito eran hombres caracterizado por el abuso, el maltrato, crímenes y represión contra la población. Don José Hazim Azar vivió bajo esa era de terror y muerte).

 (Otra imagen del dictador Trujillo sentado en uno de sus automóviles de lujo, descapotado, en uno de su mucho recorrido).

La juventud petromacorisana no se quedó atrás, desde el liceo José Joaquín Pérez; de la intermedia Gastón Fernando Deligne, desde los sectores de clase media, brotaron voces contestatarias, inquietas, rebelde, identificada con los anhelos de cambios que sonaban por todo el país.

 (Una vista de los titulares del periódico El Caribe de la época informando de la tensa situación política existente entonces en el país).

Emblema de la agrupación patriótica liderada por el doctor Manuel Aurelio Tavares Justo y su esposa Minerva Mirabal, esta organización encabezó la lucha y resistencia contra el régimen dictatorial de Trujillo entre 1955 y 1960). 



Los jóvenes de la época que asumieron un papel combativo en esos días de incertidumbre  y desafío patrio estaba integrado por Danilo Aguiló,  Enrique Acevedo Salomón (Tito Acevedo), Iván Pérez, Arturo Rosario (España),  Iván Corazón, los hermanos conocido como Cacos de Ñames, Rugero Cordero, los hermanos Leonel y Franklin Dunker Lambert,  Héctor Vallejo (El Che),  Roberto Vallejo,  Reyes Aquilino Ramírez,  los hermanos  Lenin y Suner Martínez, el atlético  curazaleño residente en San Pedro de Macorís  conocido por Tex Lindo,  José Vallejo ( José Curva), Cecilio Pitter (Ñinpi),  Guarín Grafo, Aquilino Rivera Cotes, Luis Lora, Manuel Dolly, Antonio Thedy, Pucho Rodríguez, Pachín, Grabielito, David Escotto Veloz, Chuby, Tanito El feo, Normalina Aguiló, Juana Guzmán (Juana 14),  El gordito Almánzar,   Luis Lora,   Bienvenido Osorio (Escama), Pirulí Arias, hermano del ex pelotero Bell Arias y quien fue desaparecido sin dejar rastro alguno, hecho que se le atribuye a su abierta simpatía opositora,  y uno conocido por el apodo de Pedrito Turba, entre otros, asumieron una participación protagónica; por todas partes se buscaba a los tenidos como  calié, que eran soplones o delatores o chivatos  que se dedicaba a denunciar ante los organismos de seguridad del régimen a cualquier persona que hablara mal del gobierno de Trujillo. Al detectado les daban paliza con cadenas. Turbas de manifestantes procedían a su linchamiento sumario. 

 (Foto de Enrique Acevedo Salomon (Tito Acevedo), quien se destacó como abogado, fue gobernador de la provincia y un reconocido profesional liberal).

(Foto del periódico El Caribe destacando los hechos políticos del momento tras el ajusticiamiento del dictador Trujillo).

Y entonces vino lo de la refinería de Petróleo. Fue un gran reto, un desafío inesperado para esta población que recién comenzaba a disfrutar del aire de libertad. Pero también este hecho se convirtió en un detonante emocional que definió actitudes y conducta frente a una situación que requería una respuesta atinada y un comportamiento valiente
 (Dos fotos con los grandes titulares de primera página que recogían la tensión política vivida en el país durante la lucha contra los remanentes del trujillismo).
 (Cadáveres de jóvenes torturados y asesinados durante el régimen de Trujillo, 1930-1961).

El gobierno del Consejo de Estado presidido por Bonnelly Fondeur había aprobado que esa instalación novedosa para el país y que venía a satisfacer una necesidad importante para el desarrollo de la nación, se instalara en Punta Torrecilla, en la capital dominicana. Al grito de las consignas Punta Torrecilla No, Punta Pescadora si, Petróleo o Muerte, se inició una gran movilización por las principales calles del centro de la ciudad. Esa lucha, esa justa demanda contó con el apoyo abierto de José Hazim Azar.
 (Foto de Punta Torrecilla lugar donde el gobierno de Rafael Bonnelly anunció que instalaría la refinería que generó las protestas en San Pedro de Macorís que produjeron heridos, detenidos y una fuerte represión policial nunca vista en toda su historia hasta ese momento en la ciudad de San Pedro de Macorís).

Aquel movimiento tuvo una arrancada de espontaneidad partió de una explosión de emotividad venido de un pueblo que experimentaba el sabor de la libertad tras 31 años de sometimiento e intolerancia absoluta contó con la participación resuelta, entusiasta, vigorosa, decidida y a riesgo de lo que fuera, de un grupo de jóvenes deseosos de "tomar el cielo por asalto".

(Foto del entonces presidente de la república Rafael Bonnelly Fondeur, en la primera, gesticula al ser entrevistado por periodistas. Bajo su gobierno fue la represión en San Pedro de Macorís contra los que reclamaban la construcción de una refinería en el municipio).

Sobre la intrepidez de los manifestantes sobresalió el liderazgo de un hombre que se sentía altamente comprometido con la búsqueda del reencuentro con el progreso de la ciudad; con aquel inolvidable pasado histórico de su Macorís amado y adorado. Aquel acontecimiento imprevisto permitió que descollara la trascendencia y alcance personal de José Hazim Azar cuya identificación con la jornada de reclamo lo situó en el pináculo de los hechos. “Petróleo o Sangre".  "Punta Pescadora Si, Punta Torrecilla No", fue su primera prueba de dignidad pública. La demanda sumó en un solo ejército social a toda la comunidad. Fue la gran prueba primaria que midió su ascendencia pública en el debate social. La ciudad del Higuamo reclamaba a gritos epoyeyico la instalación de la anunciada refinería petrolera, lo entendía como un acto de justicia; como merito a sus logros, a su capacidad productiva; a todo lo que le había aportado al fisco nacional; a su ruta estratégica y a sus condiciones territoriales. Empero, el Poder entendió lo contrario e impuso otra ruta a la obra en debate. Corrió la sangre; hubo heridos; lacerados, golpeados; docenas de apresamientos, persecuciones. Todo un escenario de represión que conmovió la conciencia ciudadana. Nadie se amilanó. Nadie se acobardó. Nadie retrocedió. Había una voluntad de lucha dispuesta a cualquier sacrificio. Desde los barrios Miramar, Placer Bonito, Villa Velázquez, Villa Providencia, Los Cuatro Caminos, el ingenio Porvenir, ingenio Santa Fe, ingenio Consuelo y el centro de la ciudad, entre otros sectores, grupos de jóvenes se manifestaban coreando la consignas y slogan de la lucha: “Petróleo o Sangre".   "Punta Pescadora Si, Punta Torrecilla No”, En el momento más tenso, horrido, confuso y con los ánimos bien caldeados, apareció su fulgente figura carismática, con el semblante visiblemente cariacontecido, blandiendo el dialogo, la mesura y la calma. "Todo no está perdido, a pesar de todo hemos ganado, esta batalla nos ha situado en un espacio de distinción y respeto a los ojos del país, cualquiera que sea el desenlace tendrán que tomarnos en cuenta; tendrán que mirarnos con mayor respeto; nuestros reclamos serán canalizados y conducidos por otros litorales y canales políticos, porque, además, que lo sepan todos, el gobierno decidió que  la Refinería no será instalada ni en San Pedro de Macorís ni en Punta Torrecilla, y esto de por si constituye una gran victoria. Otras jornadas reivindicativas esperan por nosotros, presto estemos siempre a dar lo mejor de nosotros por nuestro pueblo querido que se lo merece y porque el futuro nos pertenece". Así fueron sus palabras, el discurso del nuevo líder social y público que había surgido tras aquella fecha histórica en San Pedro de Macorís, recuerdan algunos testigos de aquellos acontecimientos inolvidables.

Para algunos radicales y ultraizquierdistas del momento el liderazgo de José Hazim Azar le era chocante por cuanto consideraban que éste como reconocido abogado profesional durante la era trujillista se mantuvo en un bajo perfil. Además, recordaban con malicias cargadas de patraña, que éste ejerció el cargo de síndico o alcalde de la ciudad nombrado por Trujillo. Otros más sensatos, ecuánimes y justos, razonaban con madurez, indicando que si éste se hubiese negado a aceptar ese cargo público pudo haberle costado la vida o por los menos ser víctima tanto él como su familia de una situación de zozobra, hostigamiento, persecución y acoso constante de consecuencias indescifrable. Sin embargo, su aparición pública en el escenario indicado evidenció claramente que éste nunca estuvo comprometido con nada negativo; que siempre mantuvo una conducta diáfana, prudente y razonable. La comprensión de su actitud durante el pasado inmediato permitió a los ojos de la mayoría que emergiera con autoridad suficiente para mediar, dialogar, proponer, llamar a la razón; al buen entendimiento, al sentido común. De ese escenario tenso se erigió en el gran líder de la ocasión y más allá.  Cuando se mezcló con la juventud rebelde, con la muchedumbre, en su labor de mediador, pacificador; de líder, dando consejo contra todo tipo de violencia, nadie lo enfrentó. Allí estaba él expuesto ofertando sus pensiles virtudes de donde brotaban ideas lozanas entregada sin sobresaltos, destilada en el acopio de su experiencia vivida. A su paso desplegaba simpatía, admiración y respeto. Quien sino él para inyectarle calma y equilibrio a esa juventud enardecido recién salida del ominoso control trujillista. Sobre esa prueba donde la pasión se anteponía a la razón surgió y se catapultó su reciedumbre honorable.  Desde ese instante desarrolló una práctica social encarnando las ansias de transformación en el mejoramiento de la calidad de vida de la población petromacorisana. Frente a su magnetismo todos reaccionaban comprensivos.  Nadie puso en duda su calidad, su autoridad. Su carisma irradiaba confianza y optimismo puntuales. En aquel momento tumultuoso lleno de confusión estremecida; cargado por una crispación social acumulada la cual estuvo frenada mediante el terror y la represión despiadada del trujillato, había surgido sin la menor duda un nuevo líder para todo San Pedro de Macorís: José Hazim Azar.

La verdad histórica es que don José Hazim Azar fue un gran emprendedor. Se destacó como tal. Hizo del emprendurismo una constante en su vida. Y en consecuencia, se dedicó a emprender proyectos en distintas áreas, pensaba en el potencial turístico de la ciudad cuando  lo del ferry, en el desarrollo de una cultura de ahorro en los ciudadanos cuando lo del Banco de Ahorro Higuamo, en suplir la necesidad de viviendas para los más necesitados cuando lo de los proyectos habitacionales, en volver sobre los pasos de la producción de azúcar de caña con decidió hacer cuantiosas inversiones en ese renglón, y sobre todo, convirtió su sueño en realidad al concebir y poner en ejecución  lo de la Universidad Central del Este que vino a llenar un vacío, una necesidad para los cientos de bachilleres que  tenían que forzarse a  ir a San Domingo, ya sea en bola o aventón, pagando costosas estadía, habitaciones, y someterse a diario a múltiples inconvenientes y sacrificios personales para poder cursar una carrera profesional en la universidad más vieja del llamado Nuevo Mundo: La Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).

 Cuando la historia valora en su juicio histórico la conducta humana en la faz de la tierra coloca en una balanza lo positivo y negativo que se ha asumido en todo lo largo de la conducta humana, y entonces, desde una óptica certera establece su juicio valorativo tomando en cuenta que ha pesado más en la vida si lo negativo o lo positivo, y desde esa apreciación evaluativa de suma y resta la historia emite su veredicto. Tal es el caso de don José Hazim Azar, pues si bien es cierto que los humanos cometemos errores propios de nuestra condición como tal, mucho más cierto es que la balanza no se equivoca y en consecuencia mide de manera proporcional la conducta en su integridad absoluta, por lo que si lo positivo pesa más que lo negativo, como en este caso, no hay duda de que nuestro personaje merece ser exaltado al pabellón de la dignidad. Máxime si sumamos en toda su dimensión su aporte y realizaciones más allá de lo de “Petróleo o Sangre”, lo del ferry boat, su presencia de primer orden en innumerables rondas sociales, no hay duda de que a nuestro personaje le cabe la honra por sus méritos. Le cabe el reconocimiento por su obra portentosa. De justicia merece ser coronado en la historia de San Pedro de Macorís.

Su estilo directo, franco y preciso sirvió de estímulo a muchos de sus allegados y relacionados. Intrépidamente asumía el liderazgo de su conglomerado imbuido de una disposición férrea por hacer las cosas y triunfar. No reparaba en nada en aras de proyectar apasionadamente sus ensueños ancestrales sin detenerse en las posibilidades de su alcance y resultados. Creía en la ilusión como antesala de la realidad. Vivía convencido de la certeza de sus planes. Nadie que no tuviese el profundo carisma; la amplia visión, la tenacidad y capacidad emprendedora de don José Hazim, de cuya diestra, laboriosa y fecunda mentalidad brotaron tantos proyectos e ideas renovadoras, podía concebir los bellos y ambiciosos proyecto que él encabezó, y cuya sin igual proeza dividió la historia de San Pedro de Macorís en un antes y un después. Esto de por sí constituye una proeza inconmensurable propia de héroe.

Su fortaleza emocional radicaba en su reciedumbre inquebrantable; plateaba sus ideas con un optimismo contagioso. Confiaba en sus sueños y lo exponía con una actitud abierta. Este era su vigor social. Su fortaleza personal. Claro que no todo era color de rosa, existían inconvenientes que afrontar, además, había quienes veían sus puntos de vistas con apatía y desinterés, lo hacían por carecer de conciencia para entender la profundidad de sus planteamientos, no tenían la visión a futuro para comprenderla y asimilarla.  Todos sus proyectos salieron a la luz bajo el relativo clima de libertades pública y tolerancia resultante de la desaparición de la férrea tiranía trujillista de 31 años; a partir del 30 de mayo de 1961 comenzó a sentirse en el país un nuevo ambiente propicio para exponer y debatir ideas sin riesgo a que las mismas fueran reprimidas y perseguidas. Bajo este nuevo clima político se proyectaron las ideas desarrollistas de José Hazim Azar. Su cultura de emprendedor obstinado no cesaba, tras algún revés sufrido volvía sobre sus pasos aprovechando cualquier coyuntura o nueva oportunidad. Su círculo amistoso más cercano era un laborantismo donde se replanteaban y debatían sus temáticas concernida. En ese cenáculo se le buscaba las formas más viables para hacerla valer y prevalecer; para entusiasmar y comprometer, para organizarse y luchar por su consumación.

Luchó, abogó y diligenció de los gobiernos de Balaguer, Guzmán, Jorge Blanco y Leonel Fernández, porque se levantarán proyectos habitacionales en San Pedro de Macorís, porque se levantarán nuevas industrias; por el arreglo de sus calles, por el acondicionamiento y remodelación del puerto, por la ampliación y actualización del acueducto, por la mejoría de los centros de salud del estado. Siempre hacía gestiones alguna llamando la atención de los gobiernos y sus autoridades para que acudieran a resolver algún problema que afectaba la ciudad. Su liderazgo estaba al servicio de las necesidades más apremiantes.

Como todo héroe era profiláctico en el empeño de su obra para blandirla como señal de que solo trabajando con fe y tenacidad se podría alcanzar las cosas buenas, la mejoría en las condiciones de vid. En ocasiones el retraso en las promesas estatal lo hacía reaccionar con alguna chispa de soberbia, y en su caso, las reacciones y respuestas le era favorable.

Nunca se sintió plenamente satisfecho de sus logros; de los logros obtenidos para su pueblo. Cual verdadero conductor social buscó siempre nuevo motivo de lucha, nuevas trincheras para continuar el combate. Quien dice que ningún héroe se retira. Por eso hasta los umbrales del ocaso invernal de su existencia luchó. Luchó para que no pereciera nuestra industria azucarera referencia obligada del pasado esplendoroso que apuntaló en el horizonte a San Pedro de Macorís. Época de gloria nunca olvidada. Luchó para que tuviéramos un trasbordador turístico Ferry surcando las aguas del mar caribe en su trayecto desde y hacia la vecina isla de Puerto Rico hasta nuestro puerto sobre el río Higuamo.

Por sus logros, por ser un triunfador; por su dedicación apasionada para que la provincia de San Pedro de Macorís alcanzara un sitial de dignidad justa, este hombre apreciado por los distintos sectores sociales de la provincia es merecedor sin ningún tipo de prejuicio, regateo o mezquindad humana de que se le brinden todos los honores, reconocimientos y homenajes posibles; las más altas distinciones y el justo tributo a su memoria. Su distinguida personalidad penetró el corazón de los indiferentes e indolentes cuyo individualismo egoísta e insidiosa actitud contribuía a mantener la comunidad de San Pedro de Macorís, digna de mejor suerte, desdeñada y relegada en la indiferencia estatal y gubernamental. Gracias a su liderazgo, carisma y capacidad persuasiva; a su perseverancia, su entrega y esfuerzo sin desmayo; a su fe indoblegable y obstinado afán de lucha por un Macorís mejor, que en ocasiones hizo que los incrédulos lo trataran con desdén, nuestra ciudad luce hoy pujante en el camino firme de su desarrollo y progreso.

Desde los portafolios de realizaciones logradas a partir del nacimiento de la Universidad Central del Este en 1970 La Sultana del Este se ha proyectado como provincia de referencia histórica en el camino del progreso. En consecuencia, la historia de los últimos 50 años se divide sin menosprecio alguno, en ese antes y ese después que representa históricamente nuestra Universidad Central del Este junto al nombre preclaro de su creador fundador José Altagracia Hazim Azar. Gloria y reverencia a su nombre.

 Si la UCE no existiera la historia de los últimos años de San Pedro de Macorís fuera otra, pues, a pesar de su existencia y aporte la situación de nuestra ciudad luce pésima, abandonada y desatendida. Gracias al liderazgo institucional de la UCE tenemos algunos acercamientos y contactos con las esferas del poder político a los que en ocasiones podemos presentarle nuestras necesidades y canalizarle reclamos.

La vida y obra de este eximio líder social y comunitario que con nobleza y valentía venció “molinos de vientos”, las injurias surgidas de estúpidas y frustradas voces destempladas que cobardemente sucumbieron al desafío de su tiempo que demandaba de ellos una presencia activa en la lucha social y comunitaria, cuyo accionar era necesario en aras de que volviera a resplandecer aquella época dorada tan recordada, donde floreció la verde sonrisa de los petromacorisano, constituye de por sí una epopeya singular.

El temple de su pesada reciedumbre unida a su alta calidad humana conformaron la acerada zapata que sostiene la portentosa obra de bien que encarna la Universidad Central del Este, (UCE); los parques de Zonas Francas, los bancos comerciales, las innumerables empresas y negocios de servicios, entre otros, existentes hoy en la Sultana del Este, cuyos resultados ameritarían con profundo sentimiento de gratitud los más altos reconocimientos a su aquilatada y pluralizada figura pública.

Desde el encomio de su vida consagrada a proyectos y realizaciones permanente, surgido de su inspiración primaveral, emprendidos con audacia y desvelo; asumió con entusiasmo y optimismo cada desafío como un reto al liderazgo asumido por un San Pedro de Macorís vigoroso y reluciente, su nombre engalana los sembradíos del presente. Y desde la encarnación emblemática de su obra lo coronamos con creces en nuestra historia.

Pero la vida humana tiene un ciclo establecido por leyes biológicas y físicas de la Madre Naturaleza. (Ya estudiada por Charles Darwin y Alfred Russel Wallace en su teoría del proceso evolutivo de la selección natural).  Ningún mortal escapa a este designio inherente e   intrínseco en la Ley de la naturaleza y de cuyo mandato natural nadie escapa; en sintonía con esta realidad inalterable, inmutable e inexorable de la vida, nuestro querido José Hazim Azar agotó su tiempo terrenal y murió. Hoy vive en el legado sustancioso de su obra bienhechora; en el recuerdo agradecido de una sociedad que le debe mucho y que jamás tendrás con que pagarle.

Desde el desconcierto estupefacto que produjo su sentido fallecimiento aquel nueve de marzo de 1999, evocamos su egregia personalidad estrellada, cuyo prestigio y significado histórico de respeto y admiración continuo, se levanta como égida protectora del destino de nuestra ciudad querida; la de todo buen petromacorisano que con orgullo sabe considerarse un genuino Serie 23.

Apropiado el solemne momento de su recuerdo luctuoso para mostrar con signos reverente en el sentimiento de la gratitud merecida estas apropiadas letras tanguera, que abrimos con donaire ante la majestuosidad de su figura radiante:
“Bajo tu amparo
no hay desengaños,
vuelan los años,
se olvida el dolor.
En caravana,
los recuerdos pasan,
con una estela
dulce de emoción.
Quiero que sepas
que, al evocarte,
se van las penas
del corazón”

 En el crepúsculo fugitivo del martes nueve de marzo de 1999 falleció el amado y venerado don José Hazim Azar, sobresaliente ciudadano y distinguido hombre público de la sociedad de San Pedro de Macorís. Ese día inolvidable expiró  un hombre consagrado en procura de elevar por peldaños florecidos a su querido pueblo de San Pedro de Macorís en interés de integrarlo al signo luminoso de estos tiempos exigentes de cambios impuestos por el globalizado modernismo tecnológico de los últimos tiempos.

Su deceso produjo desgarradores sentimientos de lamento, hondo pesar y volcadas manifestaciones de solidaridad para con sus familiares y deudos. Toda la ciudad se enlutó, crespones de dolor colmaron las calles de la ciudad afligida. Fue un acontecimiento estremecedor que copó todas las fibras humanas. Su funeral y sepelio envolvió en un solo cuerpo de hondo pesar nuestra diversidad social y étnica, una larga procesión humana camino en silencio adolorido detrás del carro fúnebre que llevaba su ataúd envuelto en la bandera nacional hasta la Necrópolis de Santa Fe donde le esperaba su última morada, Era el sepelio del más grande líder petromacorisano de los últimos 50 años.

¡Qué agregar y decir de este utópico y carismático personaje de bien ampliamente conocido y estimado por todos! Decir con énfasis refulgente que sobrevivió al pasado oprobioso de la tiranía trujillista para alcanzar con su brega continua un liderazgo social y público que catapultó las realizaciones impactantes que situó a San Pedro de Macorís en un sitial de dignidad y respeto histórico.

Resaltar con energía de pueblo que cual Ave fénix supo remontarse sobre los derroteros traumáticos de la frustración para erguirse con prestancia e hidalguía para descollar con esmerado ímpetu como líder de su tiempo, liderando  la fundación de la Universidad Central del Este (UCE) en los años de 1969-70, donde  impregnó con su sello resplandeciente y sudor de su empeño tenaz su entusiasmo quimérico, su optimismo contagioso; aportando y contribuyendo en aras de impulsar los cambios cualitativo  requeridos para situar en la ruta del esplendor anhelado su venerada e idolatrada provincia de San Pedro de Macorís.

 Afirmar  con fuerza ciudadana que de su conducta generosa acrisolada con el peso reluciente de sus pasos, emanado  de su ambiciosa, osada y atrevidas ideas innovadoras, tendente a convertir a la ciudad  de San Pedro de Macorís en vanguardia de realizaciones sociales; interesado en lograr que renaciera como otrora cual “tacita de oro”, que caracterizó aquellos pretéritos tiempos anquilosado por la inercia forzada y el olvido resultante del egoísmo político y la inquina intrínseca en la mediocridad  inherente en la miseria humana, lo que dificultó situarnos  en los altos peldaños del respeto ante los gobiernos que se ha dado la República desde el fin de la tiranía en 1961. El desinterés social por los acuciantes problemas que nos afectan ha llevado a los gobernantes de turno a olvidarse de las necesidades apremiantes de San Pedro de Macorís.

Significar el valor biográfico de su recordado nacimiento, aquel medio día del 19 junio de 1913 en San Pedro de Macorís, resaltándose su condición de hijo sirio-libanés; del matrimonio entre don Emeterio José Hazim Assy y Kamel Azar. («Su padre nació en Basbina, Siria, y su madre, doña Kamel en Amiun, regiones árabes que en ese entonces pertenecían a la dominación siria, pero que hoy son territorios libres del Líbano»), circunstancias tan especial que lo convertirían en un pluralizado ciudadano de tres nacionalidades, sirio, libanés y dominicano. ¡Eureka por este Feliz comienzo biológico!

 (La Bandera de Siria).

Destacar con ardor humano y a viva voz que formó junto a María Luisa Frappier (Niní) una de las más bellas y admirada familia de la sociedad de San Pedro de Macorís, unión que produjo tres hijos, Randa, Mayra y Josecito, tres encantadoras prendas llenas de vitalidad, orgullo de su prole, quienes han sabidos tremolar con orgullo y dignidad la bandera de aportes heredada de su progenitor para continuar sin desmayo sus inconclusos proyectos de obras de bien.

Algunas imágenes personales y sociales de la familia Hazim- Frapier

(Doña María Luisa Frappier viuda Hazim (Niní), en otra foto personal).

 (María Luisa Frappier (Niní), junto a su hija Mayra y su nieto José A. Hazim Torres, hoy rector de la Universidad Central del Este).

 (Doña María Luisa Frappier (Niní), presente durante la conferencia pronunciada por el estadístico, comunicador y abogado, Leónidas Martínez, sentado a su lado figuran sus hijos Mayra y Josecito, y el locutor Leo Martínez).

  (Niní como se le conocía era hija de Adolfo Frappier y Luisa María Mallen Isambert. Tuvieron dos hermanos Adolfo Frappier Mallen (Boy) y Luis Frappier. En esta foto cuando fue coronada reina de la ciudad en una de sus Patronales de la época. Estuvo casada con el doctor José Hazim Azar, fundador de la Universidad Central del Este (UCE), quien falleció el 9 de marzo de 1999, con quien procreó a Randa, Mayra y José Hazim Frappier).

La muerte será siempre un acontecimiento estremecedor, su entorno de dolida solemnidad luctuosa conmueve y aflige sentimientos. Sobre el llanto desconsolado de los deudos asoma fugaz alguna brizna de silencio impertinente demandando acaso atención compasiva frente a ese dolor único e irrepetible que taladra el sentimiento humano, importantizando la vida y rescatándola del desdén de la insensibilidad individualista; de la atención de esa cotidianidad rutinaria que rapta el tiempo de la reflexión y la compasión humana. Más sobre esta intromisión que desvía el sentimiento humano, la muerte como hecho impactante reafirma nuestra condición protagónica en el universo como ente histórico y social capaz de enfrentar exitosamente los avatares imprevistos de la vida. Éxtasis instantáneo y trascendental de nuestra existencia y que nos reencuentra con nuestras raíces ancestrales y biológicas. La muerte es la única verdad realidad que dimensiona los colores de la vida.

Nunca, por más lapidaria que parezca, la muerte debe ser motivo de miedo, terror o maldición, entendiéndola como la última jornada eficaz, el último acto de entrega irrenunciable que posibilita la redención humana; apropiado vehículo que nos conduce por los senderos de la perpetuidad.

 La muerte consume sin conciencia la suma de virtudes que adornan el espíritu humano. Un mágico misterio copa el sentimiento de los deudos, y entre interrogantes de estupor estremecido la vida continúa su curso acentuando su belleza. Valorizado su importancia histórica, adquiriendo un esplendor de necesidad vital, desafiando ese envoltorio de oscuridad que siempre se nos impone con certeza, a veces de manera fortuita, inesperada, otras, desde dolencias acumuladas, de células degastadas y rendida en su propio ciclo; en su reproducción molecular hasta alcanzar el inexorable tiempo de la consumación de la existencia física.

Con la muerte nos remontamos por rutas insólitas e inciertas, sin embargo, dependiendo de las circunstancias y condiciones del ocaso, podemos tomar un camino de vida que apuntale sobre el silencio lúgubre de la sombra el significado histórico y filosófico de nuestra realidad biológica y social dentro del género humano, liberándonos de cualquier atadura pecaminosa. Ya lo dijo Víctor Hugo, «Sólo viven aquellos que luchan». Y don José Hazim Azar batalló incansablemente hasta el final. ¡Gloria permanente a su memoria!

La verdad absoluta de la muerte; certera y precisa en su designio, condujo al hombre a crear divinidades y deidades procurando con ello obtener su eternidad. Al tenor con este temor creó los dioses en su imaginación emocional, y, en consecuencia, le rindió culto, plegarias, sacrificios humanos y respeto. Todo en la búsqueda de la perpetuidad de la vida. Desde una concepción filosófica interpreto la vida y la muerte, más todo ha resultado en vano, pues la muerte continúa haciendo su estrago sin miramiento alguno, reyes, emperadores, ricos, sacerdotes, y líderes, son sucesivamente tomado por la muerte. Ante el fracaso de los dioses por garantizar la eternidad y perpetuidad surgió en su mente agobiada, desesperada e impotente la idea genial de un solo Dios único, omnipotente, piadoso, un dios con mayúscula, absoluto, dominante, magnánimo; una figura mística con poder y fuerza superior a todas las divinidades anteriores, con un aura de trascendencia celestial, de dimensiones galáxica. Más la muerte no cesa su labor quita vida, de manera desalmada, impiadosa, a veces con signos de crueldad e injustica abominable.  No hay poder de riqueza que valga, caudillismo mesiánico, ni fatuidad vanidosa, ella, la muerte, acecha y llega de manera implacable.  Desde la lucidez de la conciencia humana se recurre a la ciencia y toda forma posible que posibilite la prolongación de la vida más allá del tiempo signado de la existencia humana. Solo la limpieza de sentimiento, la entrega a causas justas y altruistas, la dedicación apasionada a una obra de bien; la ideología de la solidaridad como practica de vida posibilita un legado de honra y honor; de gratitud y reconocimiento póstumo e histórico. Tal es el caso del doctor José Hazim Azar un hombre que se consagró denodadamente a impulsar desde su óptica visionaria el camino del progreso, el desarrollo y el crecimiento cualitativo de nuestra querida ciudad de San Pedro de Macorís. Levantó bandera de reclamos, lucha, emprendurismo; impulso proyectos de renovación; nunca retrocedió en su propósito de ver a su amada ciudad, a su querido pueblo, en un sitial de vitalidad referencial. Ante esta realidad patética cobra fuerza la cita de Andy Warhol colocada al inicio de este ensayo biográfico, “La idea no es vivir para siempre, es crear algo que sí lo haga"

Ante esta amarga posibilidad del devenir  tenemos que apoyarnos en nuestra conciencia lúcida para transformar nuestro reposo finito en un baúl de legado altruista, cual eterna presencia tangible, catapultando los valores humanos concebidos desde una filosofía de vida; no importa el volumen de las cosas alcanzada sino la perspectiva de su  objetivo; y si el fruto de la  faena  emprendida traspasa nuestra rutinaria frontera personal entonces afianzamos con creces nuestras presencia existencial en la faz de la tierra; es la calidad y profundidad de nuestra conducta, y la intensidad de nuestro accionar social lo que le dará sustancialidad y legitimidad moral y filosófica a nuestra obra de vida insertándola inmensamente en el espacio tiempo del proceso dialéctico e histórico en que nos desarrollamos dentro de un contexto de vida social organizada. Cuando se vive con conciencia del valor de la vida la muerte tiende a reproducir nuestra vida en la profundidad de los corazones conscientes, queridos y agradecidos. Cultivar desde una conducta decente y diáfana claramente definida una hombría de bien asienta la premisa onírica de la inmortalidad histórica y humana.

Luchó, abogó y diligenció ante los gobiernos de Balaguer, Guzmán, Jorge Blanco y Leonel Fernández, porque se levantarán proyectos habitacionales en San Pedro de Macorís, para que se instalaran nuevas, fabricas, industrias, comercios; por el rescate, acondicionamiento y arreglos de aceras, calles, el ornato, y el acondicionamiento y remodelación del puerto, por la ampliación y actualización del acueducto, por la mejoría de los servicios en los centros de salud público. Siempre abogaba y demandaba la atención de los gobiernos hacia su pueblo. Su liderazgo estaba al servicio de las necesidades que más apremiantes.

 La verdad histórica es que don José Hazim Azar fue un gran emprendedor. Se destacó como tal. Hizo del emprendurismo una constante en su vida. Y en consecuencia, se dedicó a emprender proyectos en distintas áreas, pensaba en el potencial turístico de la ciudad cuando  lo del ferry, en el desarrollo de una cultura de ahorro en los ciudadanos cuando lo del Banco de Ahorro Higuamo, en suplir la necesidad de viviendas para los más necesitados cuando lo de los proyectos habitacionales, en volver sobre los pasos de la producción de azúcar de caña con decidió hacer cuantiosas inversiones en ese renglón, y sobre todo, convirtió su sueño en realidad al concebir y poner en ejecución  lo de la Universidad Central del Este que vino a llenar un vacío, una necesidad para los cientos de bachilleres que  tenían que forzarse a  ir a San Domingo, ya sea en bola o aventón, pagando costosas estadía, habitaciones, y someterse a diario a múltiples inconvenientes y sacrificios personales para poder cursar una carrera profesional en la universidad más vieja del llamado Nuevo Mundo: La Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).

Y entonces con el impulso magnético de su inmenso liderazgo logramos aquellos festejos históricos de nuestro Centenario. De ese «Siglo de Luz» que excitó nuestros corazones en aquel inolvidable 1982, proeza ésta que solo fue posible gracias al patrocinio de la UCE y don José Hazim Azar.

Sí, San Pedro de Macorís celebró con viva emoción y desbordada alegría ese acontecimiento singular que nos rescató del desdén social. Y entonces pudimos ver y valorar entre bullicios, alegría, aplausos y recordación nostálgica, todo lo que fuimos y dejamos de ser victimado por la crisis de los tiempos que, unido a la insidia, el egoísmo, la envidia y los resquemores de cúpulas circunstancialmente dominantes, frenó el impulso material que se esparcía con fuerza humana, más allá de nuestra geografía regional.

Ya lo habíamos establecido en un reportaje periodístico de nuestra autoría y que publicamos en tan especial ocasión con el llamativo título «Sin UCE no tuviésemos un Siglo de Luz», contribuyendo con ese apreciado trabajo de opinión con la memoria histórica de San Pedro de Macorís, con el propósito expreso de mantener siempre fresca en la memoria agradecida la responsabilidad histórica de aquel acontecimiento grandioso. El señalado trabajo de opinión fue publicado en las páginas 1 y 3 del periódico tabloide MACORIX, edición septiembre de 1982. Por considerarlo de interés tenemos a bien reproducirlo en este libro, al igual que otros títulos interesantes.

 En el tránsito hacia el bicentenario de la ciudad idolatrada ruinas oxidadas por el tiempo enturbian su glorioso pasado arquitectónico, “fusión de rasgos indígenas y africanos, de su realidad vernácula”, cuyo inicio se remota al 1902; el abandono de aquellas edificaciones relucientes flageladas por el descuido y el abandono  esperan sobre el suspiro del tiempo y el deseo de nuevas glorias apetecidas la atención de las autoridades pertinentes, cuyas manos son las únicas que pueden devolverles la gracia y el color  de su esencia peculiar.  Y sobre el fragor de su acervo pluralizado ensueños de inspiración plateada, florece bajo el legado de la obra sin igual de este titán de jornadas fecundas y atrevidas, cuyo acopio recoge los anhelos cultivados en el largo trajinar del desarrollo y construcción de lo que representa hoy nuestra ciudad enaltecida, motivando despertares de nuevas conciencias de indignados embravecidos.

Por eso hoy al valorar desprendido de pasiones mezquinas y de cualquier sectarismo irracional la presencia de don José Hazim Azar entre nosotros nos vemos en la justa e imperiosa necesidad de sospesar en la balanza de la valorización personal, descontaminada del dogmatizado juicio crítico, el desarrollo de la conducta de este petromacorisano sin igual, mesiánico pero sincero. Espontáneo; recio en sus objetivos. Firme en sus convicciones; en su preclaro pensamiento dirigido en una sola dirección: hacer de la ciudad de San Pedro de Macorís la comunidad cualitativamente más destacada y sobresaliente en el camino del progreso regional, colocándola en una posición de respeto dentro de la competencia nacional. Este gesto de por sí constituye una proeza encomiable. Una verdadera actitud heroica.

Su estilo directo, franco y preciso sirvió de estímulo a muchos de sus allegados y relacionados. Intrépidamente asumía el liderazgo de su conglomerado imbuido de una disposición férrea por hacer las cosas y triunfar. No reparaba en nada en aras de proyectar apasionadamente sus ensueños ancestrales sin detenerse en las posibilidades de su alcance y resultados. Creía en la ilusión como antesala de la realidad. Vivía convencido de la certeza de sus planes. Nadie que no tuviese el profundo carisma; la amplia visión, la tenacidad y capacidad emprendedora de don José Hazim, de cuya diestra, laboriosa y fecunda mentalidad brotaron tantos proyectos e ideas renovadoras, podía concebir los bellos y ambiciosos proyecto que él encabezó, y cuya sin igual proeza dividió la historia de San Pedro de Macorís en un antes y un después. Esto de por sí constituye una proeza inconmensurable propia de héroe.

En un mundo competitivo con tantos héroes y heroínas; y donde San Pedro de Macorís ha producido innumerables hombres y mujeres valioso, con sobrado talentos en sus respectivas disciplinas sea esta deporte, técnicos, artesanal, profesional o empresario; con tantos luchadores por causas nobles, altruistas y filantrópicas, como los doctores Alejo Martínez, Jaime Oliver Pino, Ángel Ponce, Luis Alam Risi y Luis Dinzey y  don Pedro Justo Carrión, para solo mencionar estos seis ilustres nombres muy significativo. Frente a tantos hombres y mujeres que hicieron grandes aportes  podría resultar difícil  reconocer la condición de héroe de don José Hazim Azar, máxime frente al predominio  de la continua competencia social cuyo curso  a veces tiende a ignorar  valores  reales cegado por exigencias e intereses personales, sociales y sectarios, pero la  producción social y material  de este  significativo hombre de bien  está ahí, expuesta de manera pública con creces multiplicativo antes los ojos de todos, ilustrado firmemente por su  hazaña valiente y clara. Por eso sin haber construido una monumental obra literaria o haber encabezado un ejército libertador puede, en su justo valor, recibir el pomposo y justo título de héroe. Su descomunal obra y aportes a la sociedad resaltan maravillosamente el escenario público para que se le otorgue sin menoscabo alguno el honroso calificativo título de héroe. Y más que eso, coronarlo en nuestra historia con brillo diamantino.

(Foto. Una reunión de la Cámara de Comercio y Producción de San Pedro de Macorís, donde los presentes trazaban su estrategia de crecimiento de sus respectivos negocios).

Sí. Héroe porque se sobrepuso a los augurios derrotistas de sus detractores interesados, de sus críticos confundidos que neciamente impugnaban sus ideas y proyectos para  negarle el respaldo necesario; renuente a situarse  junto a él a la vanguardia del proceso de cambio, de creatividad productiva y social; de construcciones y realizaciones que ha generado miles de empleos, la ocupación de manos de obras ociosas, de la formación académica y técnica de miles de profesionales que hoy exhiben con orgullo sus diplomas y títulos universitario; y de los que también disfrutan de una vida descansada, tranquila, confortable, decente y digna como resultado del proceso público encabezado por nuestro inolvidable don José Hazim Azar.

Como todo héroe era profiláctico en el empeño de su obra para blandirla con jactancia, con arrogancia y hasta con soberbia porque, quizás sin proponérselo, sin percibirlo conscientemente, nunca se sintió plenamente satisfecho de su hazaña. Cual verdadero héroe buscó siempre nuevo motivo de lucha, nuevas trincheras para continuar el combate. ! Quien dice que ningún héroe se retira!

Por eso hasta los umbrales del ocaso invernal de su existencia luchó. Luchó para que no pereciera nuestra industria azucarera referencia obligada del pasado esplendoroso que apuntaló en el horizonte a San Pedro de Macorís. Época de gloria nunca olvidada. Luchó para que tuviéramos un trasbordador turístico Ferry surcando las aguas nostálgicas de nuestro río Higuamo.

Al final de la tempestad de tantas interrogantes y dudas al proyecto de desarrollo en cierne, éste logró salir airoso. Se impuso al vendaval de dudas, a la necedad de los que torpedearon sus iniciativas ya sea por envidia, egoísmo, mero capricho o retaliación. Venció las ataduras sociales resignadas y entregadas a la rutina como modo de vida carente de perspectivas. Y triunfó en grande… Su nombre se exhibe hoy como un icono de realizaciones cualitativa en el proceso de transformación que caracteriza al Macorís de hoy.

Con su triunfo también ganamos todos. Todos los que amamos este pueblo y no cejamos en la empresa de llevarlo al puerto del éxito consumado. Nadie en toda nuestra historia más que centenaria puede exhibir la hoja de servicio y los logros obtenidos en buena lid por éste inconmensurable líder social y comunitario de probada grandeza.

 (El Consejo de la Universidad Central del Este (UCE), nombró en enero de 2014 al licenciado José Altagracia Hazim Torres como nuevo rector de esa alta casa de estudios, en sustitución de su padre el doctor José Hazim Frappier. Desde el entonces el joven profesional dirige los destinos de esa academia).




(La Universidad Central del Este (UCE) inauguró la Cátedra Magistral Ambiental “Pirigua Bonetti”, en el marco del día Mundial del Medio Ambiente, en un acto solemne oficializado mediante la Resolución 23-2016 del Consejo Superior Universitario de la UCE).

(En el acto, el Rector de la UCE dio lectura e hizo entrega a la señora Bonetti de la Resolución del Consejo Superior Universitario que creó la Cátedra Magistral Ambiental con su nombre. Doña Pirigua agradeció la oportunidad de invitarla a la palabra, y expresó su reconocimiento a la UCE por sus valiosas contribuciones en la educación superior y el sitial que ocupa en la Región Este, siendo responsable de la formación de la mayoría de su juventud).

 (La Cátedra Magistral Ambiental se celebrará cada dos años y estará organizada por una comisión dirigida por la Ex Ministra de Educación y Asesora Ejecutiva de la Rectoría de la UCE, la Lic. Jacqueline Malagón).



(Los esposos Hazim-Torres junto al entonces obispo de la diócesis de San Pedro de Macorís Francisco Ozoria).


(El conocido empresario nativo de San Pedro de Macorís, Ramón Báez Romano junto al doctor José Hazim Frappier).



(El licenciado José Altagracia Hazim Torres actual rector de la UCE junto a su esposa e hijos).

Luchó de manera insistente por el ensanchamiento de todas las conquistas obtenidas; de todas las metas alcanzadas.

 Luchó por la reconstrucción, ampliación y modernización del puerto local. Luchó contra el desempleo que nos flagelaba abriendo nuevos centros de producción y contribuyendo a que otros sectores emularan su accionar, siendo una referencia de confianza y seguridad para los potenciales inversionistas nativos y extranjeros.
 (Mayra Hazim junto a Jacqueline Malagón y Laura Povedano durante el acto de UCE remozamiento y modernización de las instalaciones del centro Médico de la Universidad Central del Este en Santo Domingo).  

Y lucho también contra la muerte misma no negándose a morir sino recibiéndola con dignidad y humildad, nunca desafiándola porque jamás le temió, convencido de que sólo a través de la muerte consagraría su obra cumbre: la inmortalidad de su vida.

(Lic. José Hazim Torres nuevo rector de la Universidad Central del Este en un acto de investidura profesional).

Hoy reconocemos su inconmensurable y encomiable aporte al desarrollo cultural, material, social y económico no solo de nuestro amado Macorís del Este sino extendida a todo lo ancho de la geografía nacional. Portentoso es su legado de bien.

 (Los esposos Vilma Torres y Josecito Hazim, en una de las tantas actividades de la universidad).

Y es, que don José Hazim trascendió las posibilidades de su entorno, del limitado especio fronterizo de su tiempo para convertirse en una extendida verdad consubstancial. En certidumbre proyectos e ideas de engrandecimientos los cuales rebasaban los parámetros convencionales y rutinarios del inmediatismo burocrático, del teoricismo flemático, de los cuestionamientos barnizados de justificaciones rimbombantes carentes de objetivos concretos. Cada idea y proyecto concebido por su recia personalidad era emprendido con optimismo, confianza y fe en el porvenir de su patria chica, su querida ciudad de los Bellos Atardeceres. Suya es pues, la gloria.

 (UCE inaugura la Cátedra Magistral de Educación Thomas McDonald).

(“La Universidad Central de Este (UCE) celebró la inauguración de la Cátedra Magistral de Educación Thomas McDonald, en un acto solemne oficializado mediante la Resolución 11-2017 del Consejo Superior Universitario”).

(“En el acto el acto El Presidente del Consejo Superior Universitario, José Hazim Frappier, entregó al Señor Thomas McDonald, la resolución que creó la Cátedra con su nombre, quien agradeció a la UCE la distinción”).

(“Thomas McDonald es un empresario estadounidense, dedicado a la filantropía, luego de haber impulsado el Parque Industrial Zona Franca de San Pedro de Macorís, con una fábrica de tecnología médica. En el 2013 creó el Fondo Rotatorio Patrimonial con asiento en la Universidad de Mercer, en Atlanta, Georgia, destinado a financiar los programas de entrenamiento a profesores de los colegios de la UCE y de la propia universidad en la Escuela de Pedagogía y en la Escuela de Medicina; coordinado por Jacqueline Malagón, Exministra de Educación y Asesora Ejecutiva de la Universidad Central del este”). Fuente: publicación de la prensa y la UCE.

En la posteridad de su presencia terrenal su obra nos queda como tangible testimonio de su vida inmortal. Certidumbre lucero guía en la conducción del futuro de nuestra ciudad de caribe mar. Nueva inspiración de deseos redentores para subvertir la patética indiferencia que atenta contra nuestras raíces enseñadas. Ahora desde su nueva morada de cruces blanca se convierte en centinela y conductor, orientando con su legado la misión de orientar el   presente y el futuro de las generaciones responsables de darle continuidad a su obra bienhechora, imprimiéndole sentido innovador a su herencia de conciencia tremolada.

(Publico integrado por profesionales y personalidades en una de las muchas actividades conferencias científicas, culturales, que realiza la academia.).

 (El reconocido poeta y escritor Tony Raful recibe un reconocimiento de la Universidad Central del Este (UCE), durante la celebración de su 46 aniversario).

Al dedicarte con ahínco y amor inmenso a la causa noble de bregar por un San Pedro de Macorís más digno y de respeto, gestionando ante todas las instancias del Poder oficial e interesados en realizar cualquier inversión, toda cosa posible en favor de todos; de convertirte en un paradigma de tenacidad; penetrando en la conciencia de nuestra historia cubierto por las razones de tu existencia, simbolizando la negación a toda excusa que la irresponsabilidad fabrica. Los impactos de tus logros han transformado la ciudad de nuestros ancestros; la que llevamos en nuestros sentimientos, por la que luchamos infatigablemente para que no perezca. Por tu obra, y a posteriori, te apreciamos, estimamos y respetamos.

Sobre el recuerdo profundo de su nombre y de su obra su pueblo querido, por el que se desveló con entusiasmo, le rinde permanente tributo de gratitud con alta sinceridad incuestionable. Pues tú, inmenso José Hazim Azar de nuestra historia venerada, no has muerto. Ningún héroe muere, máxime si es esperanza en la búsqueda del futuro anhelado. Quien dijo que la esperanza caduca, que muere; en ti ella es permanencia reconfortante, inextinguible, llama de vida, motivación de lucha por un devenir decente y justo para nuestro querido San Pedro de Macorís.

Hoy tu figura se agiganta, se multiplica en cada profesional surgido de las aulas de la Universidad Central del Este; en cada segundo de producción y empleo resultante de las empresas que levantaste para beneficio de tu pueblo. Eres continuidad sobre el tiempo de la vida. Generosa majestad de sueños. Sublevación necesaria contra razones conservadoras.

Sobre la infamia áspides de enanos mentales tu nombre se disemina y prevalece como guía supremo  del porvenir  buscado, ocupando la memoria de todos, y desde la perpetuidad cristalina tu nombre se muestra como bandera de triunfo en el camino  que emprenderán las nuevas generaciones en busca de su   futuro;  porque la lucha por mejoras conquistas sociales y materiales por el Macorís de nuestros ancestros no para, continua con más vigor que ayer, esa es tu enseñanza ofrendada: luchar y luchar hasta que nuestro San Pedro de Macorís logre ocupar el sitial de respeto y grandeza de sus tiempos reclamados, cuyo sendero de realizaciones nos conducirá al  progreso anhelado. ¡Y en las nuevas metas trazadas tu imagen líder nos acompañará! ¡Que viva tu recuerdo siempre en la conciencia de la ciudad!

Escarpado en la inmensidad del firmamento misterioso nos muestra tu obra incrustada en la historia, ella dice lo que somos  de lo que somos, la percibimos como  feérica pompa expuesta en cada alba encontrada y cuyo esplendor en asenso nos muestra tu luz de enseñanzas legadas,  y que  mostramos con orgullo, cuantificando cualitativamente   el valioso tiempo que le entregaste a este Macorís de nuestra costa caribeña, símbolo de hospitalidad solidaria, cuyas aguas saladas empujan mareas y olas mecidas  acogiendo en su misterio soliviantado las desembocaduras de nuestro Higuamo enturbiado. Y en la nostalgia que nos abruma evocamos aquella época dorada cuando sus aguas pretendidas entretenían, deleitaban y distraían nuestras miradas reposadas, viendo surcar su curso majestuoso. Ahora siguiendo su ruta destinada lleva tu nombre marmolado hasta la vivencia de la historia, donde quedará embalsamado para que jamás perezca en el olvido de los hombres.

 Ahora desde la cúspide de la gratitud extrema solo nos queda decirte…  

Adiós adalid por el cambio en aras de un Macorís mejor para todos...

 Adiós solidario amigo, abogado, periodista, emprendedor, empresario, consejero, humanista, filántropo y mejor líder comunitario que ha tenido nuestra querida ciudad de San Pedro de Macorís. Adiós excelente padre, comprensivo y recio.

Adiós consecuente esposo.

Adiós petromacorisano ilustre, héroe moderno de nuestro Macorís del Mar; de la verde Sultana del Este que siempre llevamos en nuestro corazón.    

Adiós gladiador invencible que alcanzaste la gloria… Porque como dijera alguien. «Lo que amamos nunca muere. Por eso, el adiós es el principio de una nueva vida»

«Ni el sueño y su pueblo de imágenes rotas,
ni el delirio y su espuma profética,
ni el amor con sus dientes y uñas nos bastan.
Más allá de nosotros,
en las fronteras del ser y el estar,
una vida más vida nos reclama.» (Octavio Paz).

¡Descansa en paz don José Hazim Azar del alma!

Nota informativa. Una parte de lo arriba expuesto en este libro fue Publicado originalmente en las páginas 9 y 10 del periódico semanario EL COLOSO DE MACORIX, edición No. 97, de fecha 30 de marzo del año 1999, con el título, Mi Panegírico a don José Hazim Azar, y luego publicado en algunos medios web de internet con el título La grandeza de don José Hazim Azar. In Memoriam. En esta ocasión convertido en libro le hemos hecho algunas correcciones, ampliado y actualizado con el título que identifica esta obra, José Hazim Azar un emprendedor coronado en la historia de San Pedro de Macorís.


                    Prosa a don José Hazim Azar

                                   Escrito por: Enrique Cabrera Vásquez (Mellizo).

lunes, 1 de julio de 2013

A propósito de los festejos conmemorativo al centenario del nacimiento de don José Hazim Azar, fundador de la Universidad Central del Este (UCE).

1

Labraste con tu empeño tenaz
el surco renacido
por donde transita hoy
nuestro Macorís del mar.
Ciudad amada;
solaz brisa playera,
oleajes de Mar Caribe,
desfiles de cangrejos,
plumajes de pajuil,
volar de mariposas,
aleteos de palomas,
danza de abejas en primavera,
baile guloya en Navidad
ansias de corona verde
al despertar de madrugadas.
Anhelo luminoso de Mosquitisol.

II

La quietud del tren
aloja pretéritas faenas
de azúcar,
melaza,
guarapo y caña,
producida
en laboriosas jornadas entregada.
¡Ah, la vivencias
de aquellos tiempos añorados!

III

Tu sentido desvelo
se abrió paso
 entre recuerdos idos.
sudores secados por el tiempo
y adustos rostros asombrados.
Marcaste la ruta iniciada,
continuidad de los convencidos
enfrentando a los frustrados
Se esparce tu nombre venerado
por la mayoría respetado.

IV

Desde tu morada de caracoles
rociaste con altivez tu proclama
quebradiza de quejumbrosas postraciones.
Intrepidez de la conciencia
al desdén ruin de resignados.


V

Recorriste en carruaje cocolo
los bellos atardeceres del Higuamo
y estiércol olfateado
Jadeo de trabajo activado
suspiro de obreros agotados.

VI

El progreso cincelado con tus pasos
desdeña voces de frustrados
y entre el recelo vano  
afloran voces cansadas
de incrédulos arrinconados.
Tu ejemplo convidando
nuevos despertares
de alegría, felicidad y progreso
al despuntar cada mañana

VII

Escasea la zafra
bruar de bueyes
y la sonora música
de machetes labra;
los portuarios sombreros
en mano,
miradas colgadas en el futuro,
tenue sonrisa de ocasión
 buscando el progreso en su sudada.

 VIII

Sobre el otrora humo agrisado 
brilla tu silueta sideral, copiosa
 recordándonos bonanza escapada;
el esplendor tomado por el abandono
y la lluvia que se niega a mojarnos.
Y desde la pujanza evocada
sobresale tu presencia enhiesta
soliviantando la dignidad atragantada.

IX

Ya no transita el tren
lleno de caña y azúcar;
no se ven los corpulentos
morenos isleños-caribeños,
raudos en su ajetreo fabril,
consumiendo Guaguavery añejado.
danzando su propia Pascua,
ataviados de espejitos y colores,
destacados plumajes sobre la cabeza,
al compás de flautas,
pitos
y tambores ritmados.

X

Merma
por los caminos cañeros,
el abigarrado trajinar de braseros
del oeste atormentado
colmando guijarros de sueños
buscando
amaneceres nuevos
canto de gallos acostumbrados

 XI

El invierno del ocaso eterniza
tu silueta enhiesta
símbolo majestuoso
del progreso logrado:
Es la UCE
tu obra coronada
la Universidad de todos,
patrimonio del pueblo
Emprendida con girones de ensueños,
pedazos de recuerdo
y jornadas de afanes forjados.

XII

Ahora
izamos con orgullo
tu legado inmarcesible,
renacer de alegría
estampado
en la magnitud de tu nombre.
Adalid del fausto centenario
anclado despertar de esperanza.

XIII

La lúgubre penumbra del silencio
exhibe tu faz de triunfo,
ascendente hacia el cielo
guiando los iniciados.
Tu nombre abriendo surcos
a los emergentes engalanados.

XIV
 
Y desde la cumbre azulada
tú voz de ilusión
ordena aplomada:
recojan los tiempos de ayer,
lo necesitamos,
nuevas retos y desafíos
esperan por nosotros,
epopeyas exaltadas
motivan nuevas escaladas.
Frontispicio
de mágicos retos soliviantados
protagonizando nuevos retos
por el Macorís anhelado.

Sin UCE no hubiésemos tenidos un Siglo de Luz

(Con motivo de los festejos alusivo a la celebración de los 100 primeros años de la ciudad de San Pedro de Macorís, cuyos actos efeméride duraron más de una semana, patrocinado mayoritariamente por don José Hazim Azar y la Universidad Central del Este, escribimos y publicamos un reportaje periodístico destacando la importancia de los aportes económico, logístico, técnicos, asesoramiento, etc., del fundador de la UCE. Ello hizo posible aquella celebración sin precedente que nos llenó de orgullo a todos. He aquí lo que dijimos por escrito):

    Por: Enrique Cabrera Vásquez

(Foto del tabloide provincial MACORIX donde fue publicado el trabajo de referencia),

(Foto Calle ribera del Higuamo, cerca del muelle. San Pedro de Macorís. Renacimiento, mayo de 1917. Fuente: Acento.Com)


San Pedro de Macorís ha iniciado los festejos de su histórico Centenario y el mismo es un éxito garantizado gracias a la dedicación celosa y al patrocinio en toda su parte de esta efeméride asumida por la Universidad Central del Este (UCE).

En efecto, sin la UCE hoy no tuviésemos celebrando este «Siglo de Luz». Sólo la acción perseverante y el ancestral chauvinismo de don José Hazim Azar, nos ha permitido a todos (as) los petromacorisano disfrutar en grande del amplio, pintoresco y variado programa de actividades, contentivo en el ameno y fresco folklor, concebido con la originalidad propia para tan significada ocasión.

Los gestores  de las actividades  del Centenario, señores  don José Hazim Azar, presidente del Consejo  de Administración  de la UCE y su hijo,  doctor José Hazim Frapier, Rector  de dicho centro de alto estudios, han  puesto  vehemente entusiasmo  y sobresaliente responsabilidad  con la expresa finalidad de que las generaciones presentes  y futura graven  en su memoria  la dedicación y el desvelo puesto por  ellos para darle a San Pedro de Macorís tan extraordinarios festejos  conmemorativos de los 100 años  de la proclamación jurídica y política que elevó a la categoría de  Puerto Marítimo, Provincia  capital de la Región del país a nuestra Sultana del Este.

Esta celebración solamente podía ser una realidad por la contribución económica de la UCE. Se dice que en la celebración del Cincuentenario todo el comercio de la época cooperó con cinco pesos para hacerlo posible. Sin embargo, en el actual Centenario el comercio y sectores económicamente poderosos e influyentes han mostrado una dejadez e indiferencia vergonzante. Exceptuando a don Pedro Justo Carrión, hasta el momento de escribir estas líneas, no se tienen informes serios de destacadas figuras del comercio y los negocios petromacorisano que hayan contribuido con el montaje de las actividades del Centenario de San Pedro de Macorís.

(Dos fotos diferentes de la emblemática calle Anacaona Moscoso vista de este a oeste teniendo en el fondo la Catedral de la ciudad)

(La Calle Independencia en el año de 1926). Fuente: internet

(Una vista aérea de la avenida Independencia, esta foto tiene más de 100 año. Fuente web internet).


Es muy conocido por la ciudadanía el tradicional carácter apático de la mayoría de nuestro comercio en asuntos de cooperación. Esta cuestionable actitud insensible y mezquina de los sectores poderosos de Macorís es constantemente objeto de fuerte crítica de parte de amplios sectores de la población, exceptuando a don Nicolás Gual y un reducido grupo de comerciantes, la mayoría de los hombres de negocios, empresas y comercios de San Pedro de Macorís siempre se han mostrado renuentes en asunto de contribución económica para cualquier actividad social, cultural o deportiva. Su insaciable avaricia le ha impregnado una cultural de tacaño absurda y estúpida.

(Foto centenaria de San Pedro de Macorís).

De todo lo dicho se desprende que gracias a la existencia de la Universidad Central del Este tenemos a bien festejar este «Siglo de Luz».

La UCE que en su inicio en los años 1969–70, llegamos a mirarla con cierto recelo y escepticismo, quizás contagiado y sorprendido en nuestra buena fe por las desaforadas criticas mezquina provenientes de la pasión política de la época, sumándonos ingenuamente a las imaginarias consecuencias nefasta del devenir que ello podría acarrear, hoy es una realidad inquebrantable. La práctica histórica. La verdad histórica ha desmentido con creces aquella visión equivocada y absurda que teníamos. Asumimos con humildad nuestra autocritica al respecto.

La UCE es hoy un patrimonio social, cultural y público de nuestra sociedad; se ha proyectado por encima de todas las falacias prohijadas por el dogmatismo incoherente. Hoy gracias a su portentoso crecimiento el largo letargo en que se entumecía la otrora París del Este fue bruscamente interrumpido por la ingeniosidad creadora de don José Hazim Azar.

La UCE hoy se muestra enhiesto y firme cual institución de grandes dimensiones sociales y económicas, contrayendo en cada jornada que emprende a transformar el andamiaje físico arquitectónico y social de San Pedro de Macorís. Levantando de cara al futuro a nuestra comunidad del abyecto olvido de los gobiernos de turnos. Gracias a la familia Hazim-Azar, Hazim Frapier, San Pedro de Macorís es tomado en cuenta por nuestros gobernantes.

Al estancamiento prolongado que laceró a la Sultana del Este   contribuyó la existencia de una burguesía foránea tímida y conservadora para la inversión. La mayoría de los integrantes de ese grupo social nunca creyó en el progreso de esta comunidad y cuando obtuvieron algún beneficio en sus negocios e inversiones inmediatamente abandonaron San Pedro de Macorís rumbo a la capital u otro destino. Su falta de fe en el porvenir mermó su integración y lo alejó emocionalmente de su San Pedro de Macorís. ¡Cuánta ingratitud!

 (Calle Sánchez, 1915). Fuente: internet).

Hoy celebramos con desbordado júbilo nuestro Centenario, en este septiembre de 1982, y con ello tratamos de reencontrarnos con nuestro histórico pasado donde brilló la bonanza y el esplendor. Hoy más que ayer, proyectamos ante la geografía nacional, con ostentosidad, orgullo y jactancia de niño, nuestra condición de Serie 23.

Nota 1- : El presente trabajo periodístico escrito por Enrique Cabrera Vásquez fue publicado en las páginas 1 y 3 del periódico tabloide MACORIX, edición septiembre de 1982.

Un reportaje especial: Don José Hazim Azar

Por Enrique Cabrera Vásquez

Nota 2-: este trabajo fue elaborado por el autor en principio como práctica de redacción periodística en la Universidad Central del Este (UCE), cuando cursaba dicha carrera, a solicitud del profesor Adriano de la Cruz, que pidió un reportaje sobre la foto de un personaje de San Pedro de Macorís. Luego se publicó como reportaje en el periódico Macorís, edición segunda quincena de agosto de 1983, y nuevamente reproducido en el tabloide Macorís en Nueva York, en octubre de 1990).

SAN PEDRO DE MACORIS.- Sus peculiares gestos, la inquietante mirada, los rasgos de su rostro; de su semblante sirio-libanés, su positiva actitud ante la vida, su sápido serpentear social protagonizando el impulso de los valores olvidados de la autenticidad petromacorisano; con su pasionaria carga de desvelo por su siempre amado San Pedro de Macorís, acentuando rigurosamente su plateada cabeza, entre otras de sus destacadas pluralizada facetas físicas y personales, indican patéticamente las duras faenas, el duro batallar, los valiosísimos años de dedicación para lograr impulsar el desarrollo de una institución, que como la Universidad Central del Este ( UCE), más que el símbolo del saber, la ciencia, la tecnología y la cultura de la Región Este, representa el inicio de una nueva etapa de crecimiento material y social transformadora del anquilosado orden estructural de nuestra provincia, prisionera en la postración y el abandono; ignorada y olvidada por todos los gobiernos de los últimos tiempos.

Es don José Hazim Azar el pujante batallador de muchas empresas, el desafiante abogado que asumió sobre sus hombros el enorme e histórico reto de liderar esa vasta institución pedagógica y académica de tan alta significación dimensional como lo es la Universidad Central del Este (UCE), ícono emblemático de nuestro presente y futuro histórico desde el mismo día de su nacimiento.

En esta foto o retrato nos expresa la simbología perenne de sus incansables preocupaciones, porque a pesar de que la UCE es hoy por hoy una sólida institución consolidada y en desarrollo él no tiene descanso; para él no hay paz, pues a pesar de los logros de su indescriptible hazaña, él sigue desvelado por su amado y ancestral San Pedro de Macorís. El Macorís histórico de la danza cocola, caña y azúcar, poetas, intelectuales, lar de inspiración de poetas dimensionales y hombres anegados como don Pedro Justo Carrión y don Fello Kidd, y de mujeres inmensas como  Evangelina Rodríguez Perozo, Ludín Lugo Martínez y Violeta Stefani.

Es don José Hazim Azar un consuetudinario emprendedor de proezas y empresas difíciles. Una expresión elocuente de “reto al destino”.

Sus expresiones y rasgos físicos son preguntas interminables… respuestas cortantes. Su visión pragmática le imprime sello inmortal a su conducta, cuyas ideas de cambio tienden a transformar, inmediatamente, lo sombrío en luz de esperanza, sus propuestas son bien acogidas como la esperada aurora que subvierte la pesarosa madrugada incierta.

El acierto proveniente de su sapiencia recoge atinadamente las continuas preguntas que traspasan la rutina surgidas del laboranismo dado en la producción social de su trabajo creativo e innovador.

La interrogante inherente en la competitividad del desarrollo de la realidad social de San Pedro de Macorís la responde adecuadamente trazándose nuevas pautas y metas sustentadas en el acierto de su inmenso liderazgo, sus ideas traslucidas inmediatamente con palabras y gestos expresivos, concatenadas con una inmediata reacción, surgen al unísono con rápidos planteamientos concretos de soluciones instantáneas. Ejemplo de ello lo tenemos en la UCE, en lo que es hoy, desde 1970, nuestra Sultana del Este, el Macorís del Mar Caribe. El de los Bellos Atardeceres que inspiró a nuestro Pedro Mir a proclamar en su trascendental poema de vida, amor, aliento y esperanza, Hay un país en el mundo, «colocado en el mismo trayecto del sol. Oriundo de la noche. Colocado en un inverosímil archipiélago de azúcar y de alcohol…»

Don José nunca luce abatido por el peso de su más de 70 años, no muestra ningún cansancio, no se le ve agotado, no hay desesperación, parece no sentir en sus condiciones fisiológicas el peso de los años, o el esfuerzo del trabajo. No, todo lo contrario, luce vigoroso, jovial, alegre, emprendedor, dispuesto, a la expectativa de algo nuevo, presto a iniciar cualquier nueva magna jornada; listo siempre a comenzar otra nueva tarea en favor de su amado San Pedro de Macorís.

No exhibe tranquilidad, tampoco prisa, transforma su trabajo en símbolo de su perenne obra social, cultural, pedagógica, arquitectónica, académica, monumental, filantrópica, humana, cooperativista e histórica: la Universidad Central del Este. Esa es la característica expresiva de este retrato, sus ademanes buscan quizás la colaboración del cosmos, o tienden a darle fuerza material-personal a las explicaciones que encierra su ejemplarizante práctica.

Los años que exhibe el retrato son las consecuencias naturales del proceso biológico de sus células, pero detrás de esta realidad física está su alma, sus ideales pragmáticos, sus ideas de bien, y sus sueños quiméricos que algunos escépticos tildaron de ilusos y fantasmales.

Tras su acuciante mirada, escudriña en el horizonte el inmenso poder de sus logros materiales y sociales.

Pero quizás lo más llamativo, lo más sugestivo, es su poder de convencimiento, su voluntad de decisión y su mágico liderazgo. Con humildad y sencillez personal exhibe una hombría de bien; una elocuente personalidad de padre, guía, conductor, maestro y líder carismático; la de un profesional triunfador, satisfecho del deber cumplido.

Nota: este trabajo fue elaborado por el autor en principio como práctica de redacción periodística en la Universidad Central del Este (UCE), cuando cursaba dicha carrera, a solicitud del profesor Adriano de la Cruz, que pidió un reportaje sobre la foto de un personaje de San Pedro de Macorís. Luego se publicó como reportaje en el periódico Macorís, edición segunda quincena de agosto de 1983, y nuevamente reproducido en el tabloide Macorix en Nueva York, en octubre de 1990).

conferencias de Leónidas Martínez: Don José Hazim Emprendedor y Visionario”. 

(Fotos de las distintas poses y ángulo  de la conferencia en los diferentes escenarios donde impartió la misma).

En el mes de octubre del 2013 el reconocido comunicador, abogado y estadístico Leónidas Martínez inició un ciclo de conferencia con el título, “Don José Hazim Emprendedor y Visionario”, en la que ponderaba sus aportes y conducta en favor de San Pedro de Macorís.

Resaltaba que don José Hazim reunía 10 cualidades que muy pocos seres humanos han podido compendiar: Emprendedor, Visionario, Creativo, Soñador, Solidario, Humilde, Líder, Paciente; Bohemio y Triunfador.

Destacaba que éste fue un hombre que compartió con todos los sectores de la Serie 23. Se reunía con presidentes, senadores, diputados, síndicos, obreros, jornaleros, amas de casas, estudiantes y cualquier segmento de la población.

“Siempre vivió y luchó por el desarrollo de su ciudad, implementando planes y proyectos que permitieran un mejor nivel de vida para los habitantes de San Pedro de Macorís. Fue síndico de esta ciudad en la década del 50”, exponía con elegancia.

Leo Martínez resumía en una apretada síntesis, la vida y la obra del doctor José Hazim Azar, abarcando desde su nacimiento en San Pedro de Macorís en el año 1913, hasta su muerte en el año 1999.

Su discurso conferencia incluía algunos párrafos del periodista Enrique Cabrera Vásquez, quien escribió un trabajo alusivo al fundador de la Universidad Central del Este, publicado en el medio El Coloso de Macorís. Incluso terminaba la misma con una cita de éste. Lo citaba con visible orgullo.
   
Los auspiciadores de estas conferencias eran el Grupo de Medicina Comunitaria, conocidos como Los Amarrillos, dirigido por el epidemiólogo Goldny Mills, la Asociación de Egresados de la UCE y el programa radial Milenio Caliente, del cual Martínez era director-editor y conductor.

(Recordemos que cerca del mediodía del martes 14 de febrero del 2017, Leónidas Mariñez fue asesinado junto al también comunicador Luis Manuel Martínez, en un hecho que estremeció y llenó de indignación a la población de San Pedro de Macorís.  En torno a esos asesinatos se han escritos centenares de cuartillas noticiosas en los diferentes medios de comunicación locales, nacionales e internacionales).

Cada una de las actividades actividad de la conferencia contaba con una masiva asistencia de personas de diferentes estratos sociales. Los auditorios siempre estaban abarrotados de público. Además, el exponente era un hombre consagrado que realizaba con alto sentido profesional su trabajo.
 
Esta primera actividad conferencia se llevó a cabo en el salón de eventos de la UCE en la celebración del 46 Aniversario de dicha universidad. La conferencia “Don José Hazim Emprendedor y Visionario” fue dictada por el comunicador, matemático y abogado Leo Martínez.

La crónica redactada indicaba: “los rectores admitan de la UCE y actual senador de la provincia San Pedro de Macorís, manifestó que Leo Martínez, ha resumido perfectamente la vida de mi padre fue un hombre que vivió y siempre pensó en el desarrollo y bienestar de la Serie 23. Nunca se mudó de San Pedro y las veces que viajamos al exterior, a los dos días quería retornar a su ciudad”.

El profesor Goldny Mills el cual coordina a los estudiantes de medicina conocidos como Los Amarrillos de la UCE, junto a estos entrego un reconocimiento al rector de la academia Licenciado José Hazim Torres y al charlista invitado Leo Martínez.

José Hazim Frappier recuerda los últimos minutos de vida de su padre.

En la primera de esta serie de conferencias el doctor José Hazim Frappier, hijo de Hazim Azar, pronunció algunas palabras llenas de emoción. Si intervención fue a nombre de la Hazim Frappier.

Minutos antes de morir en el Centro Médico UCE, donde ya no podía hablar, me tomo de las manos y sentí en su mirada que me instruía para que me mantuviera al servicio de San Pedro de Macorís. Manifestó José Hazim Frappier.

Esta misma conferencia la pronunció el destacado comunicador petromacorisano Leónidas Martínez en el auditorio de la Universidad Central del Este, en el salón de actos de la Catedral de San Pedro de Macorís, en el Ayuntamiento local y en la ciudad de La Romana, en distintas fechas.

Una comisión de diputados aprovechó la ocasión para entregar un reconocimiento póstumo realizado por la Cámara de Diputados al doctor José Hazim Azar.

También le fue entregada una placa por parte de la Asociación de Egresados de la UCE.

El mismo fue recibido por familiares del homenajeado, encabezado por su hijo, el rector de la Universidad Central del Este, doctor José Hazim Frappier.

Entre los asistentes estaban los diputados petromacorisano Juana Vicente, Luis Martínez Peña, Franklin Peña, Nelson Arroyo y Sergio Julio Muñoz (Pilincho).

Distinguidas personalidades estuvieron presentes en la actividad, entre ellos el alcalde Tony Echavarría y el Gobernador Félix de los Santos.

El título de la conferencia fue “Vida y Obra del doctor José Hazim Azar” y se inscribe dentro de la celebración de los cien años de su nacimiento.

Entre los presentes estaban además doña María Luisa Frappier Vda. Azar (Coña Niní), quien fuera la esposa de Hazim Azar y su hija Mayra Hazim Frappier.

Francisco Comarazamy evoca etapa de la tertulia en SPM

Motivado por el liderazgo del doctor José Hazim Azar un grupo de selectos amigos tenían a bien reunirse para evocar, recordar y memorizar pasajes históricos de hechos y sucesos ocurridos en San Pedro de Macorís. Lo hacían también deslumbrado y maravillado por la magna obra emprendida y lograda por este visionario trascendente. Los encuentros sociales y amenos adquirieron una importancia interesante que el fallecido periodista y escritor don Francisco Comarazamy, quien siempre exhibía con orgullo su condición de petromacorisano Serie 23, recogió en varias crónicas y artículos periodísticos de opinión algunos pasajes interesantes de esos encuentros, describiendo situaciones y anécdotas memorable que el grupo exponía, así como algunos de sus personajes, en su columna narraba con pasión las conversaciones  Y en esa loable tarea de mantener viva la memoria histórica, destacaba el significado de la Universidad Central del Este, de la cual fue profesor de la escuela de comunicación.  Su trabajo de opinión refrescaba la memoria histórica de la ciudad. Para que los lectores de este libro tengan una idea más exacta del tipo de reuniones que ellos hacían, tengo a bien reproducir uno de su trabajo periodístico al respecto, la reseñada publicada en el periódico Hoy dice así:   
“La tertulia pública y privada, o sea la conversación en grupos fue una de las manifestaciones más influyentes en la vida cultural y social de San Pedro de Macorís del pasado siglo XX. Al parecer habría sido introducida con la llegada de los hermanos Rafael y Gastón Deligne, poetas ambos, venidos de Santo Domingo y secundados por una vigorosa pléyade de la región oriental, destacándose en primer término los hermanos Lolón y Félix Ducoudray, los hermanos Félix y Leopoldo Richiez, el poeta y tribuno Quiterio Berroa, el civilista Pedro Mortimer Dalmau, los poetas Baldomaro Rijo, Porfirio Herrera, el libanés Aquiles Nimer y otros adalides de la cultura, la ciencia y las artes que he citado en anteriores comentarios de la misma índole”.

“Este período prácticamente se extinguió al producirse la estrepitosa caída de la Danza de los Millones con la terminación de la Primera Guerra Mundial (1914-1918) y la baja asimismo del precio del azúcar que de veinte pesos la libra cayó al mínimo de centavos en su comercialización. Operaban entonces en la zona siete ingenios y su economía dependía de esa industria. Una cosa trajo la otra consecuencialmente. De ahí el éxodo de los principales intelectuales y la muerte paulatina del auge cultural y la desaparición de las tertulias”.

“El médico e historiador Carlos Juan Musa Hazim ha revivido en mi memoria lo que podría considerarse la etapa final de la tertulia petromacorisana de finales del siglo XIX y mediados del XX, con la participación de su padre, el consagrado galeno Antonio Musa en esa última etapa de la tertulia que constituyó luz y conciencia en la cultura dominicana”.

“Transcribo a continuación la epístola de Carlos Juan para que se tenga una historia a viva voz de lo que fue en su etapa de aquella brillante jornada intelectual de la tertulia en la Sultana del Este”:

“Estimado Francisco: En fecha 7 de enero del 2007, como todos los domingos, leo tu columna “Memorias”, y en esa ocasión el tema fue “La Tertulia: fuente de amistad y cultura”. Escribiste sobre las diferentes reuniones y tertulias, formales o fortuitas, de personas relacionadas en San Pedro de Macorís. Como una vez me dijiste que te refrescara la memoria, te hablaré de lo que recuerdo, pues fui parte de éstas”:

“En época del trujillato, mi padre, el Dr. Antonio Musa Dip, era un asiduo visitante al parque Duarte (era “parquero”) y me llevaba con él, contando yo con 10-12 años, porque así se lo pedía. En ese banco del parque, frente a El Encanto, hoy Farmacia Andreíta, se reunían, además, el Dr. Basora, Ramón Zaglul Elmúdesi, Carlos Torres Ríos, Profesor Juan Daniel Ortiz (Juanchi), Lic. Pedro Julio Pérez, José Hasbún, Pío Soñé, Doctor José A. Hazim y otros que escapan a mi memoria”.

“Estos formaban un círculo cerrado cuando se iba a hablar de las peripecias de Trujillo, o sin antes chequear debajo del banco en el que estaban sentados o en el tanque de basura más próximo, de forma que no hubiera alguien vigilándoles o escuchando. Entonces, acababan con Trujillo tras su charla rutinaria de béisbol, noticias internacionales y temas en general”.

“Otras peñas se celebraban en el Grupo Médico Dr. Antonio Musa, de la avenida Independencia 40, en San Pedro de Macorís. Juntamente con mi padre, y a veces yo que me integraba, asistían Juaniquito Leonor, Eugenio Hallal, Pedro Bobea (Bobeíta ñ quien fue “outfield” del equipo Macorís (EO) cuando ganaron el primer Campeonato Nacional en el 1912 y en una de esas peñas fue que nos manifestó como se conformó la directiva y Equipo Macorís. Nota: de este testimonio le envié carta al señor Cuqui Córdova en mayo del 2004.

“También se hacían reuniones en casa de mis padres, Dr. Antonio Musa y Amanda Hazim de Musa, todos los sábados al mediodía. Ahí estaban presentes mi esposa Awilda, mis hermanos Aurorita y Santiago, Amandita y Frank y Jesús; además asistían el Dr. José Hazim Azar y Doña Ninín, Josecito, Dr. Hamlet Hazim Azar, don Francisco Comarazamy, sus hijos Danny y Roosevelt y, a veces, Doña Aura, Dr. Juan Arístides Silva, Tito Acevedo, Jesús Polanco (Puré), etc. Estas eran unas inmancables “comelonas”.

“En casa de Georgito Hazim, en el Barrio Miramar, calle Sánchez con Antonio Molano, en la terraza que había en el patio, también se celebraron otras peñas. Una de ellas la integraban Rafael Kasse Acta, Salomón Morún Acta, Fernando Morbán Laucer, Roberto Cassá, Víctor Villegas, Carlos Curiel, Juan Cheas, Danilo Vásquez, Fermín Álvarez, Benjamín Silva y quien suscribe. Otro grupo, en este mismo lugar, eran Quique Pérez, Salvador Paradas (quien hacía la visita todos los 24 de diciembre), Popí Bermúdez y su señora Elba Madera de Bermúdez, quienes le llevaban de regalo cerveza Quisqueya, ponche de la Casa Bermúdez y un güisqui de malta, que Georgito se vanagloriaba en decirlo y saborearlo. Otras personas que asistían eran Billón Hernández con su esposa María Auxilio; Héctor Luis Rodríguez; Danilo Morales Carbuccia; Hugo Tolentino Dipp; Marcio Mejía Ricart; Carmencita Méndez (puertorriqueña que estudió medicina en la UCE); Iván del Risco y otros que se me escapan”.

“Espero que estos recuerdos puedan ampliar tus memorias en cuanto a la Tertulia: Fuente de amistad y cultura. A la vez, quiero felicitarte por haber recibido el merecido galardón del Premio Nacional de Periodismo 2007. Se despide un seguidor de tus memorias y amigo a través de generaciones, Carlos Juan Musa Hazim”.

Biografia de Don José Hazim Azar

De acuerdo con el contenido de algunas publicaciones de prensa y lo que se ha divulgado y reproducido en varios medios de comunicación y en las páginas web de internet, don José Hazim tuvo una infancia, adolescencia y juventud entusiasta, en ese período de su vida moldeó lo que sería su personalidad psicológica. Pero más que nuestra apreciación quizás subjetiva preferimos ceñimos a lo ya establecido en las referidas publicaciones. Veamos:
   
“José Altagracia Hazim Azar, nació el jueves 19 de junio de 1913 e hizo sus estudios primarios en la Escuela Mixta de Niños y Niñas No.14, situada en la avenida Independencia, de Villa Velázquez, en la zona céntrica de San Pedro de Macorís”.

“Fue uno los centros educativos establecidos al calor de las autoridades de Estados Unidos que intervinieron el país de 1916-1924. Al llegar a los siete años, el tercero de los hijos de Don Emeterio estaba alfabetizado”.

“Las clases de idiomas las recibía en su hogar de parte de profesores. Aprendió a hablar árabe e inglés. En el mismo plantel hizo los estudios intermedios”.

(Símbolo de una época de entusiasmo, la altura del muro frente al río Higuamo, el edificio de madera, la vista que el panorama ofrecía, todo sepultado por la arrabalización y la irresponsabilidad de las autoridades).

“Los secundarios los hizo en la Escuela Normal, pero esta fue clausurada antes de graduarse. Este hecho lo obligó a convertirse en estudiante libre que tenía que ir examinarse a Santo Domingo. Finalmente obtuvo el título de Bachiller en Filosofía y Letras”.

“Entre sus amigos de la niñez estuvieron Fernando Amiama Tió, José Rolando Martínez Bonilla, Adolfo (Boy) Frappier, Antonio Najri Acra, Fernando Chalas Valdez, Enrique Ricart, Francisco Comarazamy, Porfirio Herrera Báez y Alfredo Dalmau Febles”.

“Con sus compañeritos se divirtió mucho a orillas del rio Higuamo, en el parque Salvador-donde se efectuaban encantadoras tardes de patines a las que acudían sus hermanas y en las áreas cercanas al entonces muelle de San Pedro de Macorís, donde atracaban barcos de carga y de pasajeros y llegaban personas del extranjero en pequeños aviones que acuatizaban en el estuario”.
 
(La Avenida España, hoy avenida Francisco Domínguez Charro).


“En esos años la avenida España o avenida del Muro-que en nuestros días se conoce como Francisco Domínguez Charro, era una concurrida vía de paseo desde la que se contemplaban el movimiento portuario y la navegación por el Higuamo de pequeños veleros, remolques y barcazas, así como el arribo y salida de buques grandes. Gran parte de la carga de estas embarcaciones era azúcar producida por los ingenios Cristóbal Colon, Consuelo, Angelina, Quisqueya y las Pajas, situados en las jurisdicciones de San Pedro de Macorís. Se movía, además, mucha mercancía que llegaba para toda la zona, en la que había muchos bateyes con población numerosa. Se trataba, sin dudas, del principal puerto marítimo del país”.

(Esta foto representa mucha historia, al fondo la parte de atrás del Hospital San Antonio construido en 1923, nótese hasta donde llegaban las aguas del río Higuamo, luego de la construcción del puerto en 1946, el espacio de donde había aguas se levantó el famoso play de La Bajadita).
   
“Para los muchachos-y también para los adultos-constituía un espectáculo el acuatizaje y despegue de hidroaviones, primero de la aerolínea Nyrba y luego de Pan American. Salían de Nueva York y hacían un largo entramado que abarcaba Miami, Nuevitas (Cuba), Puerto Príncipe, San Pedro de Macorís, San Juan (Puerto Rico), Puerto España (Trinidad), Belén y Rio de Janeiro (Brasil), Montevideo, -buenos Aires. San Pedro de Macorís era el principal puerto aéreo del país”.

“Ya de adulto, José Hazim siempre recordaba los años de su niñez, en los que ponía pretextos para estudiar y prefería andar por la calle y recrearse. Pero era obligado a estudiar y ayudar a su padre en el negocio. En la intermedia fue más apegado a los estudios y por eso recibió distinciones”.

“Cuando muchacho jugó pelota en un pequeño play que había en la Barca, en los alrededores del alambique de los Brugal y más tarde en Villa Providencia. En una ocasión-practicando beisbol se fracturó la pierna derecha. De jovencito fue un magnifico defensor de la tercera base. También practicó el voleibol y tímidamente el boxeo”.

“Fue entusiasta miembro del primer grupo de boy scouts del país-el Cuerpo de Exploradores de San Pedro de Macorís-formado el 25 de febrero de 1926. Ese día, aniversario del natalicio de Matías Ramón Mella, aparecieron por primera vez uniformados un grupo de niños y jóvenes, bajo la dirección de Sergio Augusto Beras y su asistente Miguel Zaglul, entre los que se encontraban Cesar Augusto de Windt Lavandier, Manuel E. Prieto, Rómulo Ferre, Rafael Barros González, Raúl M. Carbucia, Ramón A. Brea, Ricardo Augusto Martínez, Artemio Ferre, Rafael Atún, Pedro Juan Chalas, Alfredo Mon, Orlando Martínez, Gabriel Oliver Pino, Antonio De León, Bienvenido Martínez, Antonio Nacer, Juan Agustín Gautier, Hunfredo Rocafort, Rafael Richiez Acevedo, Miguel A. Duvergé, Julio E. García, Vinicio Febles Faxas, César Rijo, Enrique Cairo, Julio Hazim, Ángel Ponce, Pedro Juan Coiscou, Arturo Industrioso, Luís Dalmau, Danilo Santana, José A. Chevalier N., José Hazim Azar, Leónidas Henríquez y otros jóvenes que con el transcurrir de los años se convertirían en destacados munícipes”.

“De adulto, Hazim Azar hablaba mucho del cuerpo de boy scouts y le atribuía haberle forjado su vocación de servicio”.

“Con más edad, José fue asiduo visitante de centros recreativos, sociales y culturales que existían en San Pedro de Macorís, comunidad que pese al declive económico que sufría desde los años 20, mantenía un ritmo de vida con mayor esplendor que otros conglomerados del país. Así, se le veía ocasionalmente en matinés de cine del Teatro Colon, en la sede del Club 2 de julio y en el Centro Sirio Libanés Palestino.

“Sus amigos de infancia le decían José Tata, debido a su nombre correcto de José Altagracia”. Hasta aquí lo expuesto en los conocidos datos reseñados a través de los medios de comunicación”.

La sindicatura de José Hazim Azar

El recopilador oficial  de los archivos del Ayuntamiento el abogado Benjamín Silva Mercedes, quien lleva más de 25 años en esas labores fotocopiando, organizando, digitando, velando por la preservación y el cuidando de la memoria histórica de  esa institución edilicia contentivas en  las actas de las sesiones del honorable Ayuntamiento de San Pedro de Macorís, trabajo al que le ha puesto sumo empeño y dedicación; escribió un libro de 593 páginas el cual puso en circulación a mediado del año 2017 en un acto en la Cámara de Comercio y Producción de San Pedro de Macorís. Dicho libro recoge todas las actas de las sesiones de la Sala Capitular durante los once meses de gestión de José Hazim Azar al frente de la sindicatura, la cual abarcó el periodo de mayo de 1950 hasta el 17 de abril de 1951. En su libro el amigo Silva Mercedes consigna el ejercicio municipal al frente del cabildo del gran emprendedor petromacorisano y fundador de la Universidad Central del Este.

Segú Silva Mercedes los libros de Actas y de Registro Civil del cabildo reúne la mayor parte de la verdadera historia del municipio petromacorisano.

(Foto de la portada del libro del amigo Benjamín Silva Mercedes).

El libro del asesor cultural del Ayuntamiento es de sumo interés, el mismo está plasmada toda la ejecutoria municipal de Hazim Azar como alcalde de la ciudad, tiene abundantes datos desconocido hasta su publicación. Y la verdad que el grueso volumen de la obra dice por si solo de la intensa y amplia labor fructífera llevada a cabo por este distinguido y sobresaliente ciudadano que fue nombrado en el puesto por Trujillo. Para más información al respecto me veo precisado a recomendarles a mis lectores adquirir el libro citado; empero, hay una reseña que considero oportuno incluir en el presente material, me refiero al acto de la Sala Capitular que consignó para la historia el memorable día en que Hazim Azar fue juramentado en tan importante posición, Dejo, pues, ante sus ojos lo ocurrido en el Ayuntamiento en aquel memorable momento:

Libro 36, Pág. 254

“Acta No. 22- 50 Sesión Ordinaria. Mayo 9- 1950”

“En la ciudad de San Pedro de Macorís, Común y provincia del mismo nombre, República Dominicana, a los nueve días del mes de mayo de 1950, siendo las ocho de la noche, previa convocatoria ordinaria, se reunieron en la Sala Capitular del Palacio Municipal, los señores regidores, Don Santiago A. Ricart, presidente; Don Buenaventura Báez Soler, vicepresidente; Agr. Miguel A, Fiallo, Don Jaime Brugal y Don Luis Felipe Barinas, asistidos del secretario”.

(Foto del historiador de la ciudad Benjamín Silva Mercedes).

“Comprobada la mayoría reglamentaria, el Regidor presidente declaró abierta la sesión. Fue leída y aprobada el acta de la sesión anterior No. 21, de fecha 2 del mes en curso sin observación”.

(Una vista del Palacio Municipal de San Pedro de Macorís).

“Presentes en la sesión los señores Doctor José A. Hazim y Don Ramón Berroa Tolentino, el presidente Ricart pasó al secretario dos radiogramas para su lectura: uno del Secretario de Estado de la Presidencia dirigido al Dr., Hazim, el cual dice así: “Pláceme comunicarle que el Honorable Presidente de la República le ha nombrado Síndico en Comisión del ayuntamiento de San Pedro de Macorís; sírvase tomar posesión de dicho cargo”.  Y otro del Secretario de Estado de lo Interior y Policía dirigido al presidente del ayuntamiento, cuyo texto es el siguiente: - ¨No. 1929. Este Despacho le recomienda proceder a la designación del señor Ramón Berroa Tolentino como Tesorero Municipal de esa Común en lugar de Julio César Ortiz. Avise fechas designación y toma posesión nuevo Tesorero”.

“El Dr., Hazim informó que se había juramentado ante el señor Gobernador de la provincia y acto seguido tomó posesión de su cargo”. -

“El presidente le tomó el juramento de rigor al nuevo Tesorero Don Ramón Berroa Tolentino y lo exhortó a cooperar en bien de la comunidad desde el cargo para el que ha sido designado”.

(Otra imagen del edificio del Ayuntamiento de San Pedro de Macorís).

“Igualmente, en su nombre y en el de sus demás compañeros de labor le ofreció su mejor cooperación al nuevo Síndico al igual que al nuevo Tesorero. Ambos funcionarios tuvieron frases elogiosas para el Ilustre Benefactor de la Patria, y ofrecieron su cooperación para el mejor funcionamiento del tren administrativo municipal”.

“El secretario le dio lectura a la correspondencia realizada en el orden siguiente:”

“Del señor Gobernador de la provincia, oficio # 466 del 9 de mayo en curso, recomendando de acuerdo con instrucciones recibidas del excelentísimo señor presidente de la República la designación del señor Ramón Berroa Tolentino como Tesorero Municipal de esta Común en lugar del señor Julio Cesar Ortiz. Resuelto: – tomar nota en vista del telefonema anterior”.

“Se resolvió solicitar el envío de los inspectores de Rentas Internas para residenciar la Tesorería Municipal con motivo del cambio de Tesorero”.

“2. Del presidente de la Junta Comunal e Inspector del Partido Dominicano, oficio # 213 del 28 de abril próximo pasado anexando copia de la carta enviada por el Dr. Joaquín Balaguer, Secretario de Estado de Educación y Bellas Artes, en relación con la conferencia que dictará en los salones del Palacio del Partido Dominicano el día 16 del corriente mes de mayo. Se resolvió tomar nota, por haberse acordado con anterioridad ofrecerle un agasajo al distinguido conferenciante”.

“3. Del Síndico Municipal, oficio # 640 de fecha 8 del corriente mes, refiriendo una solicitud de licencia por el día 15 de mayo en curso, de la señorita Ana Elena Olivera Ríos, mecanógrafa ayudante de la sección de Estadística y Control del presupuesto. Se resolvió conceder la licencia solicitada”.

“4. Del mismo funcionario, oficio # 647 de fecha 9 del mes en curso, opinando que después de hecho el estudio considera que el Ayuntamiento debe prestarle su máxima cooperación al agrimensor Manuel Emilio Prieto dándole los $ 100.00 que pide para gastos de la nivelación de esta ciudad y facilitarle los servicios de un albañil por orden del Municipio para la realización de ese trabajo, de acuerdo con su proposición, ya que es la tesis que va a presentar en la Universidad al graduarse de Ingeniero. Debe tenerse en cuenta, agrega, que antes de autorizar al agrimensor Prieto a hacer la nivelación, debe obtenerse permiso del Instituto Militar Geográfico del Ejército Nacional para poder dar comienzo a la obra. Resuelto: – autorizar la suma de $100 para los trabajos de nivelación que efectuará el agrimensor Prieto y facilitarle un albañil por cuenta del Ayuntamiento para colocar los hitos de nivelación. Se resolvió, además escribir al Instituto Militar Geográfico solicitándole autorización para hacer ese trabajo”.

“5. Del mismo funcionario, oficio # 648 de la misma fecha que el anterior, refiriendo un oficio del director de la Banda de Música Municipal por medio de la cual solicita siete pares de zapatos para miembros de la banda en vista de la proximidad de la celebración del 16 de mayo, 20 Aniversario de la 1ra elección del generalísimo Doctor Rafael Leónidas Trujillo Molina, como presidente de la República. Resuelto autorizar al Síndico a suministrar los siete pares de zapatos para los miembros de la Banda, siempre y cuando compruebe que a esos músicos no se les han suministrado zapatos este año, con cargo al capítulo correspondiente”.

“6. Del mismo funcionario, oficio #649 de la misma fecha, refiriendo un oficio del director de la Banda de Música Municipal, por medio del cual solicita le sea confeccionado un uniforme de gala al músico 1ra Clase y Ayudante del director, señor Agustín A. Santana, un kepis de gala y uno amarillo. Resuelto: – autorizar al Síndico para que mande a confeccionar el uniforme y los kepis, votándose la suma de $ 79.20 a favor del sastre señor Federico Danguendó, para cubrir esos gastos y la confección de un uniforme de kaki para el mismo músico y el arreglo de otro para el músico Vicente Simeoli C., en cargo al capítulo correspondiente”.

“7. Del Tesorero Municipal, oficio # 168 del 9 del mes en curso, poniendo en conocimiento de la Sala que el balance en suspenso para traslado de dementes, leprosos, etc., es de $ 8.00. Se tomó nota”.

“8. Del Director General del Circuito Radial “La Voz Dominicana”, carta de fecha 2 de mayo en curso, informando que no tienen en venta atriles. Se resolvió tomar nota y comisionar al Síndico para que ordene el arreglo de los atriles que tiene la Banda de música municipal a fin de presentarlos en la mejor forma en el concierto del día 16 de mayo”.

“9. Del señor Agustín Antonio Santana, carta del día primero de mayo en curso, comunicando que el día 19 de abril tomó posición del cargo de músico de primera clase y ayudante del director de la Banda de Música Municipal de esta ciudad, cargo para el cual fue designado por este Ayuntamiento. Se tomó nota”.

“10. De Implementos y Maquinarias CxA, ofreciendo equipos para construcción y conservación de caminos y carreteras. Se tomó nota”.

“11. Del secretario de la Atlas Comercial Company C. por A. solicitando el envío de la exoneración del chasis de riego adquirido por este Ayuntamiento. Se tomó nota por haber informado el secretario que ese asunto fue tramitado”.

“12. Del señor Juan Guaschino, solicitando en arrendamiento 22 pies cuadrado de terreno en el cementerio municipal de esta ciudad, para la construcción de un panteón. Resuelto: – concederle arrendamiento y autorizar al Síndico a firmar el contrato correspondiente a nombre y representación de la Común”.

“13. Estado Demostrativo de las operaciones efectuadas en la Tesorería Municipal de esta Común, durante el mes de abril del año en curso, con un balance total representado de $ 64.978.26. Se tomó nota”.

“El Síndico solicitó y fue aprobada una asignación de fondos #5 por la suma de $12.534.48 de acuerdo con su solicitud explicativa del Form. A-37, el cual juntamente con el A-38 pasa a formar parte del expediente de esta sesión”.

“Al leerse los capítulos de la asignación de fondos para el presente mes de mayo, la Sala resolvió comisionar al nuevo Síndico para que indague por qué se ha asignado la suma de $ 2,000.00 por consumo de energía eléctrica y $2,000.00 para subvenciones municipales”.

“Se resolvió autorizar la suma hasta $100.00 con cargo al capítulo III, símbolo 3007, objeto 1o., para cubrir en gastos ocasionados con la colocación de mármoles y el busto del Ilustre Generalísimo Rafael Leónidas Trujillo en el parque Duarte”.

“Fue resuelto también, comisionar al síndico para que solicite precios de termómetros veterinarios al Dr. Portuondo de Ciudad Trujillo”.

“Fue resuelto, por último, autorizar un avance provisional de $400.00 al Ingeniero Contratista del Matadero Municipal a cuenta del avance de $3,000.00, solicitado por éste y que está en tramitación”.

“Resolución Municipal no.15-50”.

“El Ayuntamiento de la Común de San Pedro de Macorís, regularmente constituido”:

“Considerando: - Que el fondo de eventualidad por compra de sueldos no resulta suficiente para cubrir la suma adeudada al Banco de Reservas de la República Dominicana, a causa de cambios habidos en la Administración Municipal”;

“Considerando: - Que es deber del Ayuntamiento supervigilar el desenvolvimiento de las operaciones presupuestales y surtir las fuentes agotadas, autorizando las transferencias de lugar”;

“En uso de las facultades que le confiere el artículo 55 de la Ley de Organización Comunal; y oída la opinión del Síndico Municipal”;
Resuelve

““Artículo único: – Efectuar dentro del presupuesto municipal que se ejecute la siguiente transferencia de fondos”: -

“Del capítulo II”

“Símbolo 2020 B, objeto 0272”

“Seguro Social obligatorio $301.00”

“Al capítulo V”

“Símbolo 5502”
“Fondo de eventualidad”

“Por compra de sueldos $301.00”

“Dada en la Sala Capitular del ayuntamiento de la Común de San Pedro de Macorís, República Dominicana, a los nueve días del mes de mayo mil novecientos cincuenta, años 107 de la Independencia, 87 de la Restauración y 20 de la Era de Trujillo. Santiago A. Ricart, presidente; Francisco Richiez Acevedo secretario; Dr. José Hazim, Síndico Municipal”.

“-: Informes: - “

“Regidor Brugal: – Propongo a mis compañeros que se examinen todas las resoluciones pendientes dadas al Síndico saliente, para que se pongan en conocimiento del Síndico actual. Se comisionó al secretario del asunto”. -

“A proposición del regidor Brugal fue resuelto citar para que asistan a la próxima sesión, a los señores Manuel A. Caminero, rematista del matadero y al doctor Emilio León Curet, Médico Veterinario Municipal”.

El regidor presidente expresó nuevamente al Síndico Dr. Hazim la disposición de todos los regidores de cooperar con él para el mejor desenvolvimiento de las actividades municipales, a lo que contestó con sentidas palabras de agradecimiento el nuevo Síndico Dr. Hazim”.
“Informes del Síndico saliente…”

“a) La sindicatura ha realizado durante la semana los siguientes trabajos: - reparaciones de calles con material RC2 y arena, Ave. Pte Trujillo 675 ml x 8; calle Sánchez 458 m x 7 y José Trujillo Valdez 172 ml x 7; con material del dragado calle José Bernardino 191 ml x 8.-  Se están realizando los siguientes trabajos: - reparación con material del dragado en la calle Matilde Larancuent y con RC2 y arena calle Sánchez. Se tomó nota”.

“b) Los dos focos que van a instalarse para iluminar el busto del Generalísimo Trujillo colocado en el parque Duarte, cuestan $ 35.00 cada uno. Resuelto: autorizar al Síndico a comprar los dos focos al precio señalado con cargo al capítulo L. 3007, obj. 1o.

“Además, se tomaron los siguientes acuerdos y resoluciones: - “

“Fueron autorizados los siguientes pagos:”

“$10.53 a S. A. Ricart el suministro de materiales utilizados en la reconstrucción del parque Duarte, con cargo al capítulo correspondiente”.
“$5.50 a Ramón González la construcción de una vara y un balancín para el carro fúnebre, con cargo al capítulo correspondiente”.

“$29 a Federico O’Neill por suministro de materiales primas para uso de los vehículos municipales con cargo al capítulo III, símbolo 3001-B, objeto 0213.- “
“$4.50 a Metalúrgica Perera C. por A., por arreglos hechos al carro #6 de riego y al jeep al servicio del Síndico Municipal, con cargo al mismo capítulo”.

“$2.40 a Mansur Hnos, el suministro de 6 yardas de lanilla para cubrir el busto del excelentísimo presidente Trujillo colocado en el parque Duarte, con cargo al capítulo III, símbolo 3007, objeto 10.- “

“$14.00 a Telésforo Zuleta la impresión de 20 blocks de formularios para permisos de bailes con cargo al cap. III simb 2020 B, objeto 0231.- “
“$4.00 al mismo señor la impresión de 5 blocks de cheques con su duplicado, con cargo al mismo capítulo”.

“$24.00 al mismo señor la impresión de 300 programas en papel especial para la celebración del día 16 de mayo, aniversario de la primera elección presidencial del generalísimo Trujillo, en cargo al mismo capítulo”.

“Hasta $75.00 para jornaleros utilizados en la reparación con material del dragado, RC2 y arena de varias calles de la ciudad durante la semana comprendida del 5 al 11 del mes en curso, con cargo al capítulo III, símbolo 3003”.

“$9.00 a José de los Santos por la excavación de 6 fosas en el nuevo cementerio, con cargo al capítulo IV, símbolo 4101-B.”

“Finalmente fue resuelto celebrar la sesión correspondiente al próximo martes el día 17 en vista de que el martes 16 es día de fiesta nacional, con motivo del aniversario de la primera elección del generalísimo Trujillo para la primera magistratura del Estado. –“

“No habiendo otros asuntos de que tratar y siendo las diez y media de la noche, el regidor presidente declaró cerrada la sesión, en fe de todo lo cual se levanta la presente acta que después de leída y aprobada firman el presidente y el secretario que certifica”.

Bibliografías Consultadas: 

1.- Periódico Macorix

2.- El Coloso de Macorís

3.- El coloso de Macorix Blog

4.- Vinicio Viguera Ozuna, La historia de Miramar

6.- Alber Camus, El mito de Sísifo

7.- Líderes de Macoris, de Carlos Juan Musa

8.- Memoria de Francisco Comarazamy

9.- Publicaciones de la Fundación San Pedro

10.- Angela Peña, periódico Hoy, Colección de Oro

11.- Los intelectuales en la era de Trujillo, Blog

12.- San Pedro: ¡Zafra, batey y tiempo muerto!, escrito por Jaime Appleton Hamlet

13.- Publicación Historia de San Pedro de Macoris, por su regocijo municipal

14.- Historia de San Pedro de Macoris, por su regocijo municipal

15.- Publicaciones de los periódicos Hoy, Listín Diario

16.- Publicaciones en Internet del Archivo General de la Nación

18.- Mi San Pedro Labor como síndico Municipal de Don José Hazim Azar, de Benjamín Silva

19.- Antología de grandes oradores dominicanos

20.- Un trabajo publicado de Alexis Calderón Del Giudice

21.- Algunas fotos tomadas del blog Imágenes de Nuestra Historia, R.D, https://www.facebook.com/imagenesdenuestrahistoriard/posts/1118638274838208

Algunos títulos y publicaciones del periodista, político, ensayista, poeta, conferencista, panegirista y escritor Enrique Alberto Cabrera Vásquez (Mellizo).

En proceso de terminación se encuentra el libro El CEA ensangrentado, obra critica donde se denuncia las tropelías corruptas de las distintas administraciones que he tenido esa entidad descentralizada del Estado.  Este libro abarca todo el historial de robo y corrupción ocurrido en el Consejo Estatal del Azúcar desde 1966 hasta el asesinato de los comunicadores Leónidas Martínez y Luis Manuel Medina2017.-

También tiene inédita la novela Magaleno que trata sobre la vida de un vecino de su infancia que se dedicaba a la venta de carbón al pregón desde una carreta tirada por un caballo y que murió mientras realizaba amor sexual en el los terrenos-solar donde una vez estuvo el famoso club country Sirio Libanés, en la avenida Independencia, donde hoy está la conocida Plaza del pelotero de grandes ligas Sami Sosa 

Publicaciones poéticas
.
 1.- Que hay en ti mujer. Prosa.

2.- Por el encanto de tu todo. Prosa.

3.-. - Mi callado amor espera por tú. Prosa.

4.- Vivo en tu sonrisa. Prosa

5.- Más allá de albas atadas. Prosa

6.-. - Imaginario poético. Prosa

7.- Nada sin Alma… Prosa.

8.- Toda vida exterminada... Todo llanto incendiado. Poemario, prosa.

9.- Mi canto a San Pedro de Macorís. Canto en prosa.

10.- Prosas sueltas para mi abuela madre Elisa Vásquez. Prosa.

11.- Prosas devaneadas sin ataduras. Prosa.

12.-  Leo Martínez en la conciencia de todos. Prosa poética.

13-  A Leo Martínez en el febrero enlutado. Prosa. -

 14.- Haikus: vuelo de los sentimientos. Prosa corta.

15.- Haikus. Tu gracia derramada. Prosa corta.

16.- Contigo, en tu marcha acostumbrada. Prosa.

17.- Por tu sendero de encanto. Prosa. 

18.- Nuestros jueves y viernes. Prosa.

19.- Don José Hazim Azar. Hito de reciedumbre. Prosa.

21.- Estrago. Poesía.

22.- Prosas para Jarvis,

23.- Acróstico a Rafael Antonio Jarvis. Prosa. 

24.- Canción a ritmo de salsa para Robinson Canó, a petición del músico trompetista Rafael Labasta.

25.- Canción a ritmo de salsa para Vladimir Guerrero, a petición de músico trompetista Rafael Labasta

26.- Canción a ritmo de salsa a Rico Carty, a petición de músico trompetista Rafael Labasta

27.- Las letras y la cultura de Macorís de duelo. Expira la poetisa y novelista doña Ludín Lugo Vda. Martínez. Reportaje y ensayo.

28.- Aleluya por Valencia (Un canto de gratitud), prosa.

27.- Un canto a la esperanza, prosa

Algunos Ensayos publicados

1.- Asdrúbal Domínguez un intelectual marxista muerto a destiempo. Ensayo.

2.- La Madre de Máximo Gorki; refulgentes páginas de dignidad. Ensayo y crítica literaria.

3.- La grandeza de Antonio Gala. Ensayo.

4.- In memoriam, a Rafael Alberti, poeta de la luz. Ensayo.

5.- Federico García Lorca, en el corazón del mundo. Ensayo con prosa.

6.- René. Sápido poeta de insondable efervescencia protagonizando afectos...Y, sin embargo, René, tu muerte no está bien. Ensayo, crítica literaria y prosa
 7.- Yo quisiera como los poetas y humanistas universales traspasar las estrellas y ser infinito en el tiempo. Ensayo

8.- La novela “Después del Viento” de Lipe Collado, “más que un acto personal”. Ensayo y crítica literaria.

9.- Miguel Ángel Bounarroti, más que cincel y martillo. Ensayo y crítica literaria...

10.- Conceptualización Científica del Arte. Emociones Humanas y Literarias. Ensayo.

11.- El amor como locura apetecida y prosas devaneadas sin ataduras. Narrativa, ensayo y prosas

12.- Caña y Azúcar en la Poesía de Pedro Mir. Ensayo.

 13.- El pensamiento Cousteau, orientando la conciencia por la vida. Ensayo.

14.- A través de las lágrimas del arzobispo de Ayacucho lloró la humanidad ahíta de sangre y violencia. Ensayo.
.
15.- La ciencia, un reto al periodista. Ensayo.

16.- Carta a Viviana. Epístola-monologo, reflexión literaria. Narrativa, y ensayo.

17.- Las Asesinó para robarles sus fragancias. Logró el perfume del amor que hechizó a la multitud que aborreció sus crímenes. Crítica literaria.

18.- Lady Di, Diana Spencer, princesa de Gales, La Princesa Diana, flor universal. Ensayo.

19.- En obra literaria Balaguer desdeña el río Higuamo. Crítica literaria.

20.- Nueva York, entre lo portentoso y el miedo. Ensayo. 

21.- Labonismo, ideología del oportunista. Ensayo.

22.- jefes malvados y resentidos sociales. Ensayo.

 23.- Personalidad, Carácter, Autoridad y Poder. Ensayo.

24.- Clamando por la vida del Río Higuamo. Proclama. 

25.- La grandeza de don José Hazim Azar. In Memoriam. Panegírico y Ensayo.

26.- Sin UCE no tuviésemos un Siglo de Luz. Reportaje.
27.- Don José Hazim Azar. Reportaje.

28.- El asesinato de Maximiliano Gómez, El Moreno. Reportaje.

29.- Maurice Bishop: ayer Libertador; hoy Mártir. ensayo.

 30.- La grandeza de Ricardo Carty. Reportaje.

31.- La muerte de El Gallo Batista. Reportaje. 

 32.- Eddy Thomas (Tuntá), una leyenda del béisbol amateur y de Las Viejas Glorias. Reportaje

33.- ¡Viva la dignidad humana y la vergüenza personal! Proclama

34.- Interrogantes e incompetencia policial en el asesinato de los comunicadores Leo Martínez y Luis Manuel Medina. Reportaje.

 35.- Apuntes histórico. Memoria de una militancia pública pulcra. Publicado la primera parte. Ensayo Biográfico

 36.- Documental de Cesáreo Silvestre sobre asesinato de los comunicadores Leo Martínez y Luis Manuel Medina denuncia la corrupción dentro del CEA. Reportaje, guion y crítica literaria.

37.- Homenaje: Pedro Mir en los brazos de Ramón Perdomo. Crítica literaria

 38.- ¡OH gran Papa Juan Pablo 11!... Infinita es tu presencia. Eterna es tu vida, ensayo y prosa

 39.- Rafael Jarvis, Hombre de Cara al Porvenir, ensayo

40.- Pablo andino, ensayo biográfico.

41.- Trujillo, Balaguer, Sesión: “Falsificando la firma de Dios”, ensayo

 42.-… Donna Jean Hrinak, centinela de nuestra democracia, ensayo

 43.- septiembre negro y el Golpe de Estado contra Juan Bosch, ensayo

44.- Santiago Perrera y Gorgito Hazim, ensayos

45.- Acoso chantajista contra el síndico Tony Echavarría, ensayo

46.- Bruno Aponte, un cíclope de decencia, ensayo

 47.- El asesinato de Papotico Nina y la violencia como cultura actuante, ensayo

 48.- Ha muerto Enriquillo Carrión, poeta del pueblo, panegírico

 49.- Daniel Castillo. In Memoriam, articulo panegírico

Algunos títulos y publicaciones de carácter políticos
  
1.- Una reelección sostenida con la corrupción y la inmoralidad, publicado en abril de 2008

2.- Corrupción, robo y saqueo por toda parte en gobierno de Leonel y PLD; funcionarios se reparten las tierras del CEA

3.- En su discurso Leonel se auto-incriminó, noviembre 2012.

4.- La involución axiológica del PLD y la reelección de Danilo Medina.

5.- condena enérgicamente atentados terroristas en maratón de Boston

6.- Peligro... El propósito oculto de Miguel Vargas

7.- Enrique Cabrera Vásquez pide la renuncia del Tribunal Superior Electoral (TSE).

8.- Un fraude electoral legitimado por una sociedad cobarde y el entreguismo complaciente de los llamados observadores

9.- Conferencia "El Poder” pronunciada en centro UASD de SPM en octubre de 2014 con motivo de la celebración de los 477 de la universidad

10.- El PLD asesinos sociales; símbolo de la depredación y el robo del patrimonio nacional

11.- La gobernabilidad del PLD significa robo, corrupción, impunidad, delincuencia, mafia, gansterismo, saqueo, depredación, latrocinio, felonía y... Enfrentemos con valentía y coraje la corporación corrupta PLD, ensayo crítico.

12.- Un egoísmo caudillismo amenaza la unidad y el futuro del Partido Revolucionario Moderno (PRM).

13.- Elegir por encuesta el candidato presidencial del PRM es lo más atinado, ensayo crítico.

14.- Interrogantes e incompetencia policial en el asesinato de los comunicadores Leo Martínez y Luis Manuel Medina, reportaje.

15.- Personalidad, Carácter, Autoridad y Poder, ensayo.

16.- Las Hermanas Mercedarias de la Caridad y la venta de los pabellones del otrora hospital Georg, crónica, reportaje.

17.- Corrupción en el CEA causó asesinatos de comunicadores Martínez y Medina, ensayo denuncia.

18.- ¿Crisis política en República Dominicana?

19.- El pedido de renuncia al presidente Danilo Medina

20.- ¿Y después de las marchas verde, ¿qué? ¿Acudir a un matadero electoral?, ensayo.

21.- El orgullo personal en un líder político, ensayo.

22.- El poco interés, indiferencia y menguada participación de los sectores populares en la cruzada cívica contra la corrupción y la impunidad

23.- Odebrecht, la reelección de Danilo Medina y las marchas verdes, ensayo denuncia.

24.- Un fraude electoral legitimado por una sociedad cobarde y el entreguismo complaciente de los llamados observadores, ensayo denuncia.

25.- Enrique Cabrera Vásquez pide la renuncia del Tribunal Superior Electoral (TSE).
26.- Las alianzas del PRM y su futuro político

27.- Alianza PRM con PRSC legitima la delincuencia política

28.- Un consejo público a Nicolás Maduro.

29.- ¿Crisis política en República Dominicana?

30.- En Venezuela "no hay libertad".

31.- Un consejo público a Nicolás Maduro.

32.- El pedido de renuncia al presidente Danilo Medina

34.- Odebrecht, la reelección de Danilo Medina y las marchas verde

33.- El poco interés, indiferencia y menguada participación de los sectores populares en la cruzada cívica contra la corrupción y la impunidad. Reportaje.

34.- Corrupción en el CEA causó asesinatos de comunicadores Martínez y Medina. Reportaje.

35.- Dorin Cabrera, la reelección de Danilo y la conciencia liquida. Ensayo.

36.- Publicación en la web de la primera parte de: Apuntes histórico. Memoria de una militancia pública pulcra

37.- Participación con una ponencia titulada Prensa. Prejuicios raciales y su impacto en las relaciones dominico-haitianas, en el Primer Seminario Medios de Comunicación y Relaciones Dominico-haitianas, celebrado en el Hotel Santo Domingo auspiciado por el Centro Cultural Dominico-haitiano, presidido por trabajador social Antonio Pol Emil, en diciembre de 2002.

38.- Pedro Albizu Campos, grandes es el hombre, ensayo biográfico sobre el líder por la independencia de Puerto Rico, publicado en la revista Cauce Libre, 1984.
Algunos artículos de opinión

Algunos artículos de opinión:

1.    14 de junio, fecha inmortal, artículo de opinión

2.    Con España en su dolor. Condenamos el terrorismo cobarde y cruel, artículo de opinión.

3.    A Julio de Peña Valdez, artículo panegírico.

4.    El saqueo de los renacuajos, artículo denuncia de opinión

5.    Enrique Tarazona, In Memoria, artículo de opinión, panegírico

6.    Franzt Brevil (Chamo), artículo de opinión, panegírico

7.    Im Memoria, Jacobo Siempre Jacobo, artículo de opinión, panegírico

8.    Mi panegírico a Peña Gómez, ensayo panegírico

9.    La muerte de don Juan Niemen, artículo de opinión

10.    Macorís ciudad abandonada, artículo de opinión

11.    La muerte de José Oliva; artículo de opinión y una prosa a su tragedia

12.    Macorís en la Vorágine de la incertidumbre, artículo de opinión

13.    Maltrato a las mujeres y muertes pasionales, artículo de opinión

14.    Pablo Espinoza Mercedes, artículo de opinión

15.    Por Orlando, una vez más, artículo de opinión

16.    Santiago Perrera y Gorgito Hazim, ensayos

17.    Ramón Bolívar Melo, artículo de opinión

18.    Bruno Aponte, un cíclope de decencia, ensayo

19.    Catorce de junio, fecha inmortal, artículo de opinión

20.    Contra el narcotráfico y la corrupción, articulo denuncia

21.    Con el orden siempre, artículo de opinión

22.    Acoso chantajista contra el síndico Tony Echavarría, ensayo

23.    Asesinos Ecológicos, artículo de opinión

24.    Septiembre negro y el Golpe de Estado contra Juan Bosch, ensayo

25.    Ha muerto Enriquillo Carrión, poeta del pueblo, artículo de opinión, panegírico

26.    Daniel Castillo. In Memoriam, artículo de opinión panegírico. panegírico

27.    In Memoriam, A mi padre Antonio Cabrera (Miquerido), artículo de opinión

28.    Rico Carty sensacionalmente extraordinario, artículo de opinión

29.    Chile: Aniversario de luto, artículo de opinión

30.    Bell Arias en el recuerdo de Macorís, artículo de opinión

31.    Bosch Marxista Antimarxista, artículo de opinión

32.    Burocracia protocolo inhumano, desdeñoso y burlesco campea en instituciones públicas, artículo de opinión

33.    Cárcel para los que se hicieron ricos robando desde el gobierno, artículo de opinión

34.    En defensa de nuestros manglares, artículo de opinión

35.    Macorís ciudad abandonada, artículo de opinión

36.    El desfalco al Estado, artículo de opinión

37.    Una justicia venal e irresponsable, artículo de opinión

38.    Los 40 años de artista de Johnny Ventura, artículo de opinión

39.    El desorden del transporte urbano, artículo de opinión

40.    Los pobres trabajadores del CEA, artículo de opinión

41.    La delincuencia criminal, artículo de opinión

42.    Aquí siempre habrá dignidad, proclama, artículo de opinión

43.    Juventud descarriada, artículo de opinión

44.    Un país de retazos, artículo de opinión

45.    Mentira y demagogia en el escenario electoral, artículo de opinión

46.    Depredan a Macorís, artículo de opinión

47.    No habrá tregua contra los falsos apóstoles sociales, artículo de opinión

48.    Estamos con el Cardenal López Rodríguez

49.    ¡Eureka un periodista síndico en San Pedro de Macorís! Artículo de opinión

50.    No a la reelección presidencial

51.    Los muertos de la campaña electoral, artículo de opinión

52.    Contratistas ladrones, artículo de opinión

53.    Delincuentes de cuello blanco, artículo de opinión

54.    Doctor Balaguer liberte a mi Madre, articulo denuncia de opinión

55.    ¿Drogas contra opositores y periodistas serios? Artículo de opinión y denuncia

56.    Abogados corruptos, justicia corrupta,

57.    Golpistas: El fracaso de los gorilas, artículo de opinión

58.    El gesto de la familia Vicini, artículo de opinión

59.    Ha muerto Barón de Soto, artículo de opinión

60.    La Corrupción, artículo de opinión

61.    Macorís, ciudad contaminada

62.    Murió “primo” el guloya, artículo de opinión

63.    No a la privatización del CEA, artículo de opinión

64.    Una campaña electoral fraudulenta, artículo de opinión

65.    Espantosa miseria en bateyes del CEA, artículo de opinión

66.    Los ladrones del CEA, artículo de opinión

67.    Luís Girón, artículo de opinión

68.    Nelson Emilio Payano, Cisco Kid, artículo de opinión

69.    Patriotismo nauseabundo, artículo de opinión

70.    Periodistas Corruptos, artículo de opinión


Algunas publicaciones que hacen referencias relacionadas con Enrique Cabrera Vásquez.

1.- Personaje. Mellizo Cabrera: Intelectual de alto vuelo escrito por: Iván Santana, publicado en la página 9, suplemento Navidad en el Este, del periódico Hoy en fecha 21 diciembre de 1995. 

2.- Jesús Feris Iglesia presenta el libro «Pedro Mir y René del Risco Bermúdez en la literatura dominicana de Enrique Cabrera Vásquez. Artículo de opinión del doctor Jesús Feris Iglesias, publicado en el periódico Hoy.

3.- Enrique Cabrera Vásquez, un protagonista de la elocuencia y del asombro,.

escrito por: Cesáreo Silvestre en la web Algo más que noticias.
4.- Programa «Milenio Caliente» reconoce al periodista Enrique Cabrera Vásquez.


5.- Cronistas Deportivos de San Pedro de Macorís reconoce como miembros más destacados año 2007-2008, a los hermanos mellizos Cabrera Vásquez.

6.- En 1990 el periodista dominicano Enrique Cabrera Vásquez (Mellizo), le pidió a Bush padre, una América sin fronteras y con una sola moneda.

7.- Mesa de Apoyo UASD-CURSAPEM les envía carta a legisladores de SPM instándolo a cumplir compromiso asumieron con esa institución.

Editorial Santuario le ha publicado los libros:

Pedro Mir y René del Risco Bermúdez en la literatura dominicana. 2014.
El Amor como locura apetecida. 2015.  

Jarvis levantado en la memoria. 2018.

Nota: a esta lista habrá que sumarle innumerables reportajes periodísticos, artículos de opinión, algunas conferencias  pronunciadas en Colombia, España, Francia, Puerto Rico, Nueva York, la Universidad Central del Este (UCE), Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) centro de San Pedro de Macorís; también algunos de sus temas y trabajos han sido publicados en prestigiosas páginas web internacional, entre ellos su  ensayo Conceptualización Científica del Arte, cuya primera parte fue publicado el No. 7 del periódico digital Opinión,  de Madrid, España, incluido entre sus principales titulares de primera página, del viernes 30 de noviembre del año 2001, portadilla No. 7, sección Cultura, Ciencia y Sociedad, así como otras muchas páginas Web de la red de  la Internet que también han publicado sus trabajos,  entre otros muchos espacios de comunicación  local, nacional e internacional.

La mayoría de los temas arriba mencionado han sido publicado en los semanarios impreso Macorix, El Higuamo, Mesopotanio, El Coloso de Macorix, el medio digital El Coloso de Macorís. COM, el blog o bitácora periódico El Coloso de Macorix, La Noticia, El Siglo, y la desaparecida revista Cauce Libre que editaba y dirigía el periodista Raschid Zaiter.

domingo, 21 de octubre de 2018

Prólogo del libro, Freddy Gatón Arce, vuela en arcoíris de palabras, escrito por, Escrito por: Enrique Cabrera Vásquez

Prólogo de Rafael Peralta Romero

 El libro de Cabrera Vásquez constituye un justo homenaje a un preclaro escritor, quien amó  la democracia y  las libertades públicas  con similar intensidad de su dedicación al buen decir.
 
                         Freddy Gatón Arce: ante todo,  escritor


Santo Domingo, 19 de agosto de 2019.- Cuando  hablan o  escriben  acerca de la personalidad literaria de Freddy Gatón Arce, muchos se empeñan, hasta la  ofuscación,  en llamarlo poeta, periodista, novelista,  ensayista y abogado. Es cierto que obtuvo título de doctor en derecho,  pero yo nunca lo llamaría abogado. Que haya  sido poeta –y de los buenos-, novelista y periodista dificulta, y resulta injusto, por demás, citarlo  por alguno de estos roles. 

(Foto de Rafael Peralta Romero,  periodista, novelista, cuentista, recientemenrte juramentado como miembro de número de la Academia de la Lengua, autor del presente prólogo del libro Freddy Gatón Arce vuela en arcoíris de palabras).

No solo poeta, no solo novelista, no solo ensayista, no solo periodista, Freddy Gatón Arce ha sido un maestro de la palabra. Maestro de la palabra hay que llamarlo para diferenciarlo del montón de quienes  han escrito o escribimos en cualquiera de los cuatro géneros mencionados. Prócer de la palabra hay que denominarlo  para marcar su firmeza en la defensa de las ideas democráticas y la crítica ante  los abusos de los poderosos.


(Foto del periodista, ensayista, poeta, historiador, panegirista y filosofo, Enrique Cabrera Vásquez (Mellizo), autor del presente libro).
El nombre de Gatón  Arce no anda requerido de títulos (doctor, profesor, director…) ni de oficios en demasía, a mí me basta con mencionarlo con la palabra escritor, que representa una suma de aptitudes que permiten a una  persona un adecuado desempeño      - profesional, no aficionado- en la composición de textos de la índole que fueren.

Hay una vieja polémica sobre la relación periodismo-literatura. Los autores literarios miran con cierto menosprecio al periodista, considerado un escritor menor y temporal. Pero los periodistas hacen mofas de los poetas y pretenden descalificarlos para el ejercicio en las salas de redacción.  Ni una situación ni la otra podía darse con FGA, pues supo desempeñar ambos roles, ya separando una función de otra, ya  combinando ambos ingredientes en el mismo recipiente.

El origen  del periodismo está en  la literatura,  y en consecuencia, el periodismo primitivo  se escribió con criterio  literario. ¿Qué es lo común entre periodismo y literatura? Ambos son formas de comunicación que tienen como instrumento expresivo el idioma. La comunicación es un tronco. El periodismo es una  gran rama y la literatura otra inmensa rama.

Freddy Gatón Arce puso un poco de poesía, en adición a los ingredientes  comunes del periodismo, que  son los hechos. Disolvió  en medida justa y oportuna ese ingrediente,  como se le coloca vainilla a ciertos dulces  o nuez moscada al café.

De ahí que Enrique A. Cabrera Vásquez, poeta y periodista, por demás petromacorisano como FGA, haya emprendido la valiosa tarea  de escribir el ensayo “Freddy Gatón Arce vuela en arcoíris de palabras”, con el que se ha propuesto contribuir al conocimiento   de la calidad de este  gran escritor, de cuya obra, sobre todo la periodística,  considera no ha sido justamente  valorada.

“Freddy Gatón Arce fue multifacético en su activismo social y cultural y la entrega a causa noble y altruista.  No desmayó en ese ejercicio, lo asumió como un sacerdocio sin sopesar las consecuencias. Fue un ciudadano transparente y un periodista limpio y ejemplar. Es más, considero que su obra periodística no ha sido bien valorada y estimada, pues su afán en esa dirección fue altamente significativo”. (pág. 78).

Gatón fue director de la revista Poesía Sorprendida, en torno a la cual se aglutinaron  importantes  poetas dominicanos en la primera mitad  del siglo XX, pero la  máxima expresión de su labor como periodista ocurrió en su período de ocho años como primer director del diario El Nacional, fundado en 1966, en los albores de la fatídica era de los doce años que presidiera el doctor Joaquín Balaguer.

 FGA es fiel a su pensamiento, a su perenne apego hacia la luz y a diferencia de la Poseía Sorprendida, la revista poética que él dirigió en la década de los 40, donde se decía en forma simbólica  lo que  no convenía expresarse explícitamente, en sus editoriales de El Nacional hizo una poesía directa, llana y más temporal, pero fiel al buen uso de la palabra y a sus sentimientos.


 La fidelidad es un requisito para el periodista y también para un literato, lo contrario es la falsedad, la cual  es inadmisible cuando se trata de hechos reales, en el periodismo, y también cuando se manejan situaciones ficticias para crear bellezas, como en el arte literario.

 Un buen periodista  no puede ser indiferente a  la literatura ni a  la historia. Al fin y al cabo,  periodismo es historia,  historia inmediata, claro. Ambos entroncan con la literatura en cuanto al uso de la lengua para informar o convencer.

Se entiende que el periodismo no es para la producción consuetudinaria de poesía, pero los escritos periodísticos de FGA revelan que el oficio de  poeta lo acompañó  para aderezar  mejor sus textos,  teniendo como características las palabras  precisas, el juicio certero y el argumento oportuno.

Me resulta difícil hablar de Gatón Arce sin inmiscuirme con deliberada parsimonia en los artículos y ensayos que publicara como opinión editorial de El Nacional. Por fortuna,  Cabrera Vásquez, en el presente libro, traza una visión total de la personalidad literaria del autor de Vlía. Para internarse en el cosmos poético de FGA, Cabrera hurga en el amplio espectro de las múltiples  corrientes y filosofías  de la creación, expresadas a través de movimientos y tendencias y se permite ubicar el gran poema gatoniano como surrealista, aunque apunta que luego nuestro autor emigró hacia otras corrientes poéticas.

“Vlía es un texto alegórico de acentuada marca surrealista que lo situaría dentro de un reducido círculo de autores…Quizá su timidez conocida lo llevó a expresarse con acento interpretativo. No obstante, cabe apuntar, que para esa época llegaron al país cientos de refugiados políticos españoles entre los cuales hubo hombres vinculados a las letras, intelectuales, profesores universitarios y reconocidos militantes culturales”. (pág.83).

Cabrera destaca en Vlía un hecho revolucionario trascendente, vista la mixtura de elementos sociales, locales y universales que confluyen  en el poema. Apunta que FGA “Apoyaba su trabajo en la libertad métrica sin abandonar lo clásico, creando el verso libre, no sujeto a medida ni rima, el verso blanco sujeto a medida, pero no a rima y el versículo, sin número fijo de rima o de sílabas”.
La tercera dimensión en torno a Gatón Arce (además de periodismo y poesía) que aborda Cabrera es la novelística, fundamentado en las obras “La guerrillera Sila Cuásar” y “La canción de la Hetera”: ”Una muestra de su capacidad para incursionar en diferentes géneros”, sentencia Cabrera. A seguidas ofrece la sinopsis de cada una.

 “La primera novela –dice- fue publicada en 1991, narra la peripecia de una mujer que  desde su infancia enseñó cuál sería su camino, el de andar con rapidez oliendo pólvora y sudando trajines de sangre”. Respecto a “La canción de la “hetera”, publicada en 1992, afirma que “…robustece esa iniciación en el campo novelesco. Sigue el mismo lineamiento epífano de la primera: concisión. No hay desperdicio de espacio, todo está estructura dentro de un esquema escueto”. (pág.57).

 El libro de Cabrera Vásquez constituye un justo homenaje a un preclaro escritor, quien amó  la democracia y  las libertades públicas  con similar intensidad de su dedicación al buen decir.
Constante en sus editoriales: fue la  persistente  denuncia a la violación a la ley por parte de funcionarios, exigencia para respeto a los derechos individuales, fue  firme en la crítica, sereno en los conflictos.

Hablaba de muertes y atropellos locales, sin marginar la poesía ni el pensamiento de hondura y trascendencia.  FGA citaba frases de poetas, refranes y proverbios y  en sus escritos editoriales destacaba los acontecimientos relativos al arte y artistas: muerte de Walt Disney, lo mejor de los Estados Unidos para el mundo; de Agustín Lara, “Los  poetas, no mueren, se ausentan, pero los buenos poetas ni siquiera se ausentan”, “Un lacónico suceso”, cita a César Vallejo para comentar la muerte de Manolo Tavárez.
 

Hay que ver  la pieza  ensayística publicada el 18 de enero  de 1967 a propósito del centenario de la muerte de Rubén Darío.
“Darío revitaliza la poesía española. En sus manos, los metros en desuso, las formas tradicionales y nuevas calidades y combinaciones de la versificación adquieren vida, resonancia y variedad singulares”. “Así de universal es Darío, y así de universal quiere ser este homenaje”.

Cabrera ha demostrado con este interesante ensayo que  Freddy Gatón Arce profesó fidelidad a las palabras y por igual  a los buenos sentimientos. “Freddy Gatón Arce vuela en arcoíris de palabras” es  una obra bien concebida y bien desarrollada y contribuirá  a posicionar  en su justa dimensión a un escritor cabal que ejerció el arte de escribir con los más elevados fines. Saludemos con razonable alborozo este magnífico aporte de Enrique Cabrera Vásquez. ¡Enhorabuena!

Santo Domingo, 19 de agosto de 2019

         Freddy Gatón Arce vuela en arcoíris de palabras

                  Escrito por: Enrique Cabrera Vásquez

 “La nobleza del oficio de escritor está en la resistencia a la opresión, y por lo tanto en decir que sí a la soledad”. Albert Camus.


" Un  escritor  busca  una  manera  de  eternidad  no  sólo  para  sus  palabras,  lo  busca  además  para  lo  que  ha  escrito,  para  lo  que  ha  sentido,  siente  y  sentirá". José S. Revueltas Valle.


 (Preámbulo inductivo: la lectura de este introito constituye una antesala  necesaria  para valorar  la  hondura de este  ensayo biográfico y su  comprensión  histórica  en su aspecto literario, cultural, social y humano. Quizás un antídoto contra cualquier trivialización  resultante  del egoísmo y  la mezquindad competitiva. En la introducción que sigue a esta nota  abordamos  a vuelo de pájaro  la crisis cultural que actualmente afecta los escenarios  públicos  así como la  apropiación o apropiacionismo literario en la influencia creativa de los autores; tema que nos proponemos ahondar con  mayor amplitud   en un próximo trabajo intelectual  sobre el particular.

El contenido de estas páginas  tratan  de la vida  cultural y productividad  literaria   de  Freddy Gatón Arce, poeta, periodista, abogado  e intelectual, nacido en San Pedro de Macorís,  ciudad considerada como tierra de poetas e intelectuales inmensos,  y quien supo aportar y enseñar cual  culto maestro de dedicación acrisolada, y cuya conducta pública y ejercicio profesional  del periodismo constituyó un crisol referente de dignidad y entereza ciudadana.
   
Introducción.- Crisis cultural y apropiacionismo en la literatura

San Pedro de Macorís,  24-Sep-2018.-  De manera intencional vengo  introduciendo  en cada ensayo o texto libresco que escribo elementos atinentes que conduzca al lector a  indagaciones reflexivas más allá de las páginas  en proceso de lectura.  Mis escritos convertidos en  libros tienen  referencias externas por encima del tema expuesto,  por cuanto su  contenido pretendo ilustrar  y fortalecer lo abordado. Es un hecho ex profeso.

Históricamente ningún hecho particular puede desvincularse de una generalidad ambiental cuyo recorrido y trayectoria social y cultural vincula o influye en actitudes y comportamientos que sobrepase el entorno del protagonista en cuestión, y, que, por consiguientes, pudiese constituir algún estilo educativo  novedoso, además, pone de manifiesto  las relaciones de influencias de determinados autores y géneros literarios en la creación artístico cultural que se va articulando en el proceso de construcción, casos de  la poesía, la literatura o cualquier obra de arte.

Cuando abordamos cualquier recorrido biográfico de algún  personaje de la historia; esos hombres y mujeres cuyas sobresalientes presencia social  lo sitúa en un escalafón relevante antes sus congéneres, considero oportuno fortalecer su evaluación y juicio con algún pasaje interesante de hechos históricos cuya mención o inclusión en el texto procesado pueda aportar algún valor agregado al estudio o ponderación dentro del análisis evolutivo del tema,  (ya lo hicimos en los  libros titulados  Pedro Mir y René del Risco Bermúdez en la literatura dominicana, Jarvis levantado en la memoria y José Hazim Azar, un emprendedor coronado en la historia de San Pedro de Macorís).

 

 


 






 (Fotos de portadas de los últimos libros de la autoría del periodista Enrique Cabrera Vásquez y que menciona en esta texto  alusivo  a  Freddy Gaton Arce, para documentar sus argumentos en relación a su estilo referencial que hace en cada una de su obra).
 

Es el caso del presente trabajo de crítica literaria  titulado, Freddy Gatón Arce vuela en arcoíris de palabras, quien fuera  periodista, abogado, poeta e intelectual dominicano nacido en San Pedro de Macorís, figura que  traspasó su entorno  social y ejercicio profesional hasta descollar en un pluralizado ente público de sonada repercusión cultural y emocional; también hacemos este ilustrativo trayecto. 

Todo personaje de la  historia camina por encima de su ámbito, por cuanto hechos y situaciones que se le anteceden en algún momento pudo haber  tenido  algún influjo intelectual, cultural, literario, político e ideológico, en su forma de ver y entender el cuerpo de lo ocurrido en la incubación de su creatividad cultural, como es el caso que tratamos.

La acumulación del conocimiento cultural e intelectual  está estrechamente conectada con la asiduidad en la lectura, con la búsqueda inquietante de la verdad  y de conseguir  las respuestas más aproximadas en torno a la problemática planteada.
   

¿Acaso puede alguien al que se le presupone cierto  nivel  de conocimiento cultural desdeñar la ascendencia cultural y emocional que tuvo la obra de Homero más allá de su época, escrita   en el siglo VIII a. C. en la constelaciones de escritores y poetas que le sucedieron?   

La fuerza penetrante del pensamiento cultural y literario griego fue tan atrayente que a pesar de ser conquistado por el adversario romano supo transmitir sus valores humanitarios  al grado  de helenizar la civilización de aquella poderosa nación imperial.

Grecia se convirtió en el  pilar histórico  de la cultura occidental y referencia del desarrollo de  las artes, la filosofía, la política  y la ciencia en   contraposición a creencias fundamentadas  en  mitos y percepciones misteriosas.  “Los romanos estuvieron fuertemente influidos por la cultura, la religión y la filosofía griega que asumieron como propias y expandieron por toda Europa”. Hasta los Juegos Olímpicos iniciados por ellos fue asumido por occidente con paternidad deportiva seguida. Bajo su  modelo la poesía  ha tenido una función de motivación emocional, humana y  social donde el dolor, la angustia, el despotismo, los anhelos y frustraciones humanas  y la lucha  por  causas redentoras de los oprimidos ha tenido el más potente sonido de sensibilidad en la conciencia de los hombres.

 ¿Qué hubiese sido de la poesía, la filosofía, la ética  y hasta los deportes si Grecia no hubiese tenido esa caterva de ilustrados y forjadores del pensamiento humano?

¿Qué hubiese sido de las artes plásticas y la arquitectura  si  Roma no nos hubiese dado la fantasía creativa de Miguel Ángel Buonarroti, Leonardo da Vinci y Sandro Botticelli?

¿Qué hubiese sido del nacimiento, desarrollo e inspiración en la  creatividad  en  la américa hispánica si la Madre Patria no hubiese tenido su Siglo de Oro productor de un  "boom literario de irrepetible calidad" en el que surgió la magia y el ingenio artístico  de Diego Velázquez, Francisco de Goya,  Murillo, Zurbarán, Valdés Leal; época que  sirvió de base, inspiración e influencia de lo que sería el descollo del talento en la literatura dominicana?
 
¿Qué hubiese sido del mundo de hoy sin los cambios cualitativos  que produjo ese movimiento cultural, económico y político iniciado  en Italia y que se extendió por toda Europa durante los siglos XV y XV1 conocido como el nombre conceptual del Renacimiento?

Jamás podemos sacar de nuestra memoria cultural aquellas obras de la antigüedad. Clásicos  como La divina comedia, del italiano Dante Alighieri, "obra clave del Renacimiento"; ni la Ilíada y la Odisea, de Homero, considerado el  más grande poeta de la literatura griega; ni la  Eneida, del romano Virgilio, quien  en su agonía de muerte pidió  fuera destruida al entender que no había  logrado en esa obra la perfección como era su deseo.

Toda la grandeza  de Sócrates, Platón, Aristóteles, Eurípides, Sófocles, Esquilo, Aristófanes, Petrarca,  Alfonso X el Sabio, Carcilaso de la Vega, Góngora, Petronio,  Boccaccio, Quevedo, Cervantes, Lope de Vega, se inspiró en la apropiación del conocimiento que le precedió.

Las renombradas figuras de la intelectualidad  griega y romana tuvieron  en las civilizaciones que se desarrollaron a orillas  de los ríos Tigris, Éufrates, y Nilo, en Asia y  África, fuentes de inspiración nutricionales  de su saber. Egipto se convirtió en la concurrencia  de  civilización y cultura que ambos pueblos supieron adoptar, modificar, agregar  y actualizar al acervo  de su profunda sabiduría y cultura social. Cuando el historiador griego Heródoto llegó a  esa civilización milenaria buscando datos e información para la  compilación  histórica de las guerras médicas se encontró con  una cultural social  que superaba ampliamente la de Grecia. Egipto hipnotizaba a todos el que llegaba a sus tierras por sus monumentos faraónicos, su devoción religiosa  y sapiencias  de sus hombres cultos. Los griegos maravillados recurrieron a imitar su mitología, divinidades y  rituales  creencias politeístas, que también influyó en  la romana.

Los egipcios a su vez se apropiaron del aporte de la civilización sumeria (3.000-2.350 a.C.), -del periodo neolítico-, considerada la primera civilización urbana de la humanidad, así como la de acadio y semita. De los primeros reprodujeron su panteón religioso. “La humanidad le debe a los sumerios un enorme conjunto de avances que significaron una gran transformación en todos los aspectos de la vida. Quizá los más importantes fueron la invención de la rueda en torno al año 3,500 a.C. y la  escritura cuneiforme en torno al año 3,300 a.C. pero no debemos olvidar que fueron los precursores de las primeras ciudades (Umma, Uruk, Ur, Eridu, Nipur, Kish y Lagash entre otras). Los sumerios nos dejaron las primeras leyes escritas;  inventaron el sistema sexagesimal, pioneros de la medicina; de las construcciones con ladrillos de adobe y los arcos arquitectónicos." Además.   "Las ciudades Sumerias eran ciudades estado, tenían un Rey, que a su vez era sumo sacerdote, hablaban en un idioma llamado: ENKI. Desde muy temprano poseían leyes y las comenzaron a escribir.  Tenían una economía fuerte y organizada en  agricultura, ganadería: Domesticación de animales (camellos, caprios, vacunos, aves) Bancos: Préstamos, depósitos (Zigurats)."

El poema  sumerio de Gilgamesh sirvió de base cultural en la  posterior confección  de   “La Ilíada” y “La Eneida”, y en  las obras famosas  que aparecieron en la  Edad Media, verbigracia: “La Divina Comedia” de Dante, “ La Summa Teológica” de Tomás de Aquino, “El Cantar de los Nibelungos”, de  Richard Wagner “Los viajes de Marco Polo”, “El Cantar de Mío Cid”, atribuido a Per Abbat,   “El Libro del Buen Amor” conocido también como del Arcipreste o libro de los cantares, de Juan Ruiz; “Las Coplas” de Jorge Manrique o “La Celestina”, de Fernando de Rojas. Todo ese arsenal literario tuvo su desarrollo en la apropiación o apropiacionismo con la singularidad de que sus  autores tuvieron la capacidad de adaptar, innovar, actualizar, enriquecer, y revolucionar su contenido desde su  peculiaridad particular  brindándole a la humanidad obras de una originalidad sin igual.
 

La Biblia el libro mundialmente más popular, traducido en casi todas las lenguas e idiomas es una apropiación del Talmud originado en traducciones orales a través de varios siglos y cuya exégesis ha tenido un valor de continuidad histórica. Sus postulados han sido consagrados como código de comportamiento humano. “La religión judía, como es hoy día, desciende en línea directa, sin interrupciones a través de todos los siglos, de los fariseos”. Toda literatura parte de una raíz histórica que en la medida que se va ampliando se va modificando, actualizando, y adaptándose a la realidad imperante. 

Ha sido desde  esa continuidad de  apropiación o apropiacionismo asimilativo cultivando el contenido artístico de la escritura cuneiforme y pictográfica, y las creaciones culturales de semitas,  sumerios, acadios, asirios, caldeos, persas,  que egipcios, griegos y romanos, produjeron en su interior innovaciones revolucionarias  que lo situaron en una admirable altura cultural y literaria  histórica. Incluso hasta de China y  La India recogieron y heredaron valiosos aportes de su cultura y variada civilización milenaria. Los chinos  que escribieron sobre  la seda y bambú, el  “Tao Te Ching”, de Lao Tse, escrito en el siglo IV a. C. que Inventaron  el papel hacia el  año 205 después de C, y se afirma que hasta inventaron la  imprenta entre los años de  1041 y 1048.  Mientras que en La India se produjeron los extensos poemas sánscritos de características  épico-mitológico conocidos como  “Mahabarata”, “Ramayana”, y “Baideheesha Bilasha”, escritos sobre hojas de palma.

Todo ese talento inmenso entregado en creaciones sensacionales se ha transmitido como energía en la visión de los que desde el pináculo de su propia originalidad  le han dado  continuidad a la cultura escrita y al arte  pictórico, de los genios artísticos ya mencionado.

El escritor y poeta  estadounidense Henry Charles Bukowski, nacido en Alemania, tuvo en Tolstoi, Gorki,  Dostoievski, y Hemingway, las fuentes primarias de su inspiración. Se apropió de sus lecturas para trascender como un escritor con signo original.

 Esa tendencia cultural adherente hacia el apropiacionismo se percibe en  la segunda carta del escritor  y poeta checo Rainer María Rilke, señalado como uno de los poetas más importantes en  lengua alemán y de la literatura universal, al joven cadete  Franz Xaver Kappus, quien  aspiraba convertirse en poeta.  El carismático autor de Historias del buen Dios (1904), Libro de horas (1905), el Libro de las imágenes (1902-1906), Los cuadernos de Malte Laurids Brigge (1910),  La canción de amor y muerte) (1912), Las Elegías de Duino (1923), los Sonetos a Orfeo (1923), y Carta a un joven poeta ( 1929), que recoge las epístola que respondía al mencionado cadete; le recomienda sin egoísmo  a su admirador y  aspirante a poeta que se recluyese en  la lectura de La Biblia, los libros del escritor danés Jens Peter Jacobsen y las esculturas de Auguste Rodin, por el cual Rilke sentía una simpatía fascinante.

Es necesario apreciar la influencia que tuvo la lectura apasionada de novelas  de caballería  en el período medieval en el español Miguel de Cervantes Saavedra, novelista, poeta, dramaturgo y soldado, de cuya inspiración partió su  apropiacionismo literario para la construcción de su famosa obra “Don Quijote de la Mancha”.

En la Gesta de Beowulf, un poema anónimo épico anglosajón, encontramos en medio de su estructura  intercalo de versos de la Eneida de Virgilio, notándose la influencia de ese autor en  la composición de Finnsburh. El apropiacionismo literario se da continuamente, es resultado del vasto acopio de la lectura intelectual.
 

(Foto del escritor  Jimmy Sierra,  autor del libro  Idolatría, referenciado en este trabajo como ejemplo de la apropiación o apropiacionismo literaria y cultural).

Ese  apropiacionismo o apropiación en la literatura en el pensamiento intelectual  lo encontramos en el  libro del amigo  Jimmy Sierra, titulado Idolatría, con una extensión de 392 páginas, en el mismo  encontramos retrospecciones que nos refrescan y retroalimentan  al aludir  obras  de Pitaco, del brasileño Guilherme, anécdota  bíblica de Salomón, alusiones fragmentaria de Bertolt Brecht, del Éxodo del pueblo judío, del recorrido del hebreo Moisés, del  “Quijote” de Cervantes, el poema “Compadre  Mon” de Manuel del Cabral, citas de los siete sabios de Grecia, referencias  de una novela de Voltaire, de Heráclito,  de Nietzsche, Sófocles, Lope de Vega, poema de Walt Whitman, el dramaturgo español Alejandro Casona, y de obras de los escritores  criollo Lipe Collado, Santiago Estrella Veloz; Juan Bosch, Pablo Neruda,  Carlos Dobal Márquez. Nos menciona al clásico francés  Honorato de Balzac, al mexicano  Juan Rulfo, a la dominicana  Aida Cartagena Portalatín, al  poeta húngaro Imre Madach, a los historiadores criollos  Emilio Cordero Michel y  Emilio Rodríguez Demorizi, entre otros varios autores, con lo cual  tiende a refrescar su obra y a llevar al ánimo del lector por rutas superior al texto en lectura.
 

Otro indicio  de apropiación  o apropiacionismo literario lo  podemos ver  en el escritor de fuste Tulio Manuel Cestero (1877--1935)  conocido  por su obra cumbre  "La Sangre”. Su base intelectual partió del  arraigó de su lectura devota  del italiano  D' Annunzio y la novelística del francés  Émile Zola. Una de su obra,  Hombres y piedras (1915), le fue prologada  por el famoso poeta nicaragüense  Rubén Darío. 

A lo largo de  su rica producción este inquieto y rebelde autor de sobresaltado activismo político  desarrolló  formas y estilos  que contemporizaran  con los géneros literarios  proclives a su temperamento cultural. Su condición de crítico literario mordaz  lo llevó  a desarrollar un instinto intelectual  perspicaz destacado.

La influencia que determinado  autor  o autores ejercen sobre un escritor  tiende a convertirse en pieza  enriquecedora  de su creación. El norteamericano Edgar Allan Poe y el novelista, cuentista, y  músico, alemán Eta Hoffman tuvieron una presencia rutilante en la ironía poética del  francés Charles Baudelaire.

Esa apropiación o apropiacionismo literario se palpa con amplitud  en el pensamiento humanista representado en el francés Montaigne, el  inglés  Tomás Moro y  el italiano Maquiavelo,  entre otros, cuyas premisas  se convirtieron  en el preludio  de las ideas ilustrativas y progresistas en que se sustentó el desarrollo progresivo de la democracia.

Siempre hay un antes que ejemplariza y traza las pautas, es la dialéctica de la continuidad del conocimiento que  mejora, eleva, amplía y profundiza su calidad.  Shakespeare, Moliere y  Corneille, transformaron la dramaturgia dotándola de un  mayor colorido y alcance contrastante.

El Siglo de las Luces (XV111) conmocionó la literatura.  Quedó impreso en la historia por la honda lucidez  de sus autores. Desde la contestación rebelde de sus propiciadores el espacio de las letras, la plástica y la filosofía emergieron con desafío ruidoso. Su aparición  revolucionaria  tuvo en la Iglesia su más férreo  opositor.  Con  temeridad resuelta se dedicaron a transmitir en su producción cimera las preocupaciones sociales y políticas de su tiempo. Sus voces denunciaron y enfrentaron  el absolutismo imperante en Europa.  Abrió la puerta de  la conciencia que hizo posible la  Revolución Francesa, (1789),  La Comuna de París, (1871),  la revolución mexicana, (1910),   y la Revolución Bolchevique, (1917).  Con estos acontecimientos históricos vinieron  postulados de principios universales  basados en el respeto a la condición humana.
 
La humanidad patentizó en las lides políticas los Derechos Humanos como una conquista universal  de cardinales principios innegociables. Bajo su influjo y motivación  las palabras Libertad, Igualdad, Justicia,  y  Democracia,  resonaron  con fuerza popular en el sentimiento  de los expoliados y  oprimidos. Se amplió el horizonte intelectual y el mundo se interesó en la  justicia como reparación moral.  La poesía  actualizó su sonido musical para  recoger la angustia de las victimas del sufrimiento. Todo ese contexto histórico  influyó en la personalidad sensible de los indignados.

Sobre el peso en la conciencia literaria y cultural  de los  abanderados  de la poesía, el teatro, y toda manifestación artística-literaria, se construyó un nuevo mundo intelectual cultivado en su apropiación, en su lectura. Enriqueciendo con innovaciones y espíritu crítico todo ese pasado esplendoroso cuyos moldes legamos con orgullo.

El mundo hispano si bien fue influenciado por la intelectualidad europea, en especial la procedente de España, Francia e Italia, tuvo en sus hombres y mujeres de letras una iniciación  genuina y  vernácula de competencia calificada

Nuestro sensacional  Pedro Henríquez Ureña, el intelectual más alto que ha producido el país,  nos enseña  que en  el siglo XV111 se destacaron  los escritores  "Tomás Rodríguez de Sosa, Luis Jerónimo de Alcocer, fray Diego Martínez, Baltasar Fernández de Castro, Tomasina de Leiva y Mosquera.  Según el bibliógrafo norteamericano Isaiah Thomas, entonces se introdujo la imprenta; pero sólo se conocen impresos dominicanos posteriores".

Agrega el filólogo dominicano. "En el siglo XV11 se distinguen Pedro Agustín Morell de Santa Cruz (1694-1768),  autor  del primer bosquejo, escrito en rica prosa, de Historia de la isla y Catedral de Cuba, donde fue obispo y tuvo valerosa actitud, bien recordada ante  los ingleses que invadieron La Habana en 1762; el P. Antonio Sánchez Valverde (1729-1790) que, en su tratado El predicador (Madrid, 1782) intenta corregir los entonces frecuentes abusos de la oratoria sagrada (eran los tiempos de fray Gerundio), y que en su Idea del valor de la isla Española (Madrid, 1785) aboga en favor de su tierra, descuidada por la metrópolis; Jacobo de Villaurrutia (1757-1833), polígrafo  a quien  interesaron  muchas de las grandes y de las pequeñas cuestiones humanas y la situación de los obreros hasta  el progreso del teatro y de la prensa;  sus variadas publicaciones abarcan desde una selección de una  novela inglesa de Frances Sheridan (Alcalá de Henares, 1792); con Carlos María de Bustamante fundó el primer Diario de México (1805)". Y que conste, que en el siglo XVI se comenzó a perfilar  lo que sería la incursión del género poético en la isla.  Como lo fueron: "Elegías de varones ilustres de Indias (1589), de Juan de Castellanos (1522-1607); Discursos medicinales (obra inédita cuyo manuscrito se encuentra en la Universidad de Salamanca), de Juan Méndez Nieto (1531-1616) y Silva de poesía (obra también inédita depositada en la Biblioteca de la Real Academia de Historia de Madrid), de Eugenio Salazar y Alarcón (1530-1602)". 
 

De lo publicado por Pedro Henríquez Ureña y los señalamientos al respecto expuesto por investigadores en la materia, podemos colegir  con conocimiento literario e intelectual, que los  siglos  XVI, XV11, y XV111 tuvieron  una repercusión asombrosa en la tendencia hacia las letras y el accionar culto en los hombres y mujeres  de vocación libresca en nuestro país.  La iniciativa, apertura y aporte en  esos periodos históricos sirvieron  de antesala y motivación continua en la vasta producción que le siguieron en los distintos géneros literarios sucedidos. Estudiarlos, escudriñarlos, valorarlos y entenderlos en su profundidad cultural constituyó una pauta posterior  en la consecución de los objetivos y metas trazadas en la impronta de las letras dominicana.
Sobre sus pilares florecieron y se desarrollaron nuevas ideas más acorde y revolucionaria. Moderna y de cambio que se han ido transformando a la par del ritmo del mundo humano. Toda la historia de la humanidad está llena de saltos cualitativos en procura del bien común. Del progreso de la sociedad. Las ideas  innovadoras tienen un ingrediente revolucionario mayormente  si la misma se identifica con los anhelos de los que padecen desigualdades  y abusos.

El curso seguido por la literatura dominicana ha sido zigzagueante. Su potencialidad muestra  algún prototipo de retrasos venido del desenlace repetido de los gobiernos dictatoriales que hemos tenidos. Superar la dependencia emocional  del largo tiempo de colonia y dominio español y europeo  implicó un gran desprendimiento cultural y emocional.

El entremés del  autodidacta Cristóbal de Llerena cuya escenificación teatral contenía una  sátira irónica en torno al desenvolvimiento de la vida de la isla provocó la ira de los poderes españoles que raudo lo deportaron hacía, Nueva Granada, hoy  Colombia; su obra marcó el camino emprendido desde entonces.  Por su creación  literaria  se le considera, junto a Leonor de Ovando y la poetisa Elvira de Mendoza, como los pioneros  en el que quehacer literario de la colonizada isla La Española.
 

Fue  a partir de la creación del grupo socio cultural Los Amantes de las Letras surgido  en  los años 1853 y  1854 y con la motivación directa del consagrado intelectual  puertorriqueño Eugenio María de Hostos que se acentuó la inclinación de una literatura con ribetes  independiente acompañado de  un auge en su producción en la parte este de nuestra  isla.

Dentro de esa asociación se encontraban Manuel de Jesús Galván,  Francisco Javier Angulo Guridi, Manuel de Jesús Heredia, Manuel Rodríguez Objío, José Gabriel García, y  la  activa presencia de los exiliados españoles Javier Malagón,  Vicente Llorens, Antonio Bernard, el linotipista Fernando Toba y el pintor surrealista Eugenio Fernández Granell,  entre otros.

En 1873  surgió la Sociedad Literaria La Juventud, constituida jóvenes con vocación cultural, al igual que la Sociedad Amigos del país,  con el propósito de unificar a los hombres cultos alrededor de un proyecto  con tendencia patriótica. Los años de 1868 a 1874 se caracterizaron por una constante tensión política  por los enfrentamientos entre los caudillos Pedro Santana,  Manuel Jiménez, y  Buenaventura Báez.  

Nuevos aires desconocido en el ambiente intelectual comenzaron a flotar. Sus obras recogían esa mezcla de  sincretismo cultural proveniente de lo español,  francés, holandés, africanos,  indígena y  judío, que caracterizó el proceso de conquista, ocupación y guerras tanto de nuestro territorio  como del Caribe atlántico.



La poesía, la novela y la línea editorial del ejercicio periodístico  y la vida pública de Freddy Gaton Arce refleja su gran preocupación social y humana universal.  Se incubó  en esos postulados y transformaciones estremecedoras. El talento de su obra se desarrolló partiendo de esos pilares heredados; de su identificación con el pensamiento crítico de aquellos movimientos que traspasaron la frontera de su tiempo y que hoy influyen en el pensamiento cultural, literario  e intelectual.

A través de los mismos  pudo catalizar  su descontento y  rebeldía cualitativa  sin ambages. Su obra intelectual  es un  aporte certero a la calidad literaria y  un rechazo a lo trivial y frívolo que  surge  en contraposición a lo conceptual, profundo, diáfano y autentico.

Su coraza era su propia personalidad libre de sospecha y dudas interesadas. En él habló la conciencia de lo justo, la esperanza de los afligidos y  se visualizó el  horizonte de los confundidos, y  apareció luz en el camino de los desesperados e incrédulos de posibilidades. Porque como dijera  el maestro Borges: “Somos nuestra memoria, somos ese museo quimérico de formas cambiantes, ese montón de espejos rotos". "Todo lo que nos sucede, incluso nuestras humillaciones, nuestras desgracias, nuestras vergüenzas, todo nos es dado como materia prima, como barro, para que podamos dar forma a nuestro arte".

Le herencia culta de las letras ha entrado a un caos angustioso por el rumbo que en los últimos tiempos ha tomado el acontecer cultural dentro y fuera del país.  La disonancia e incoherencia con el legado encontrado es ampliamente contradictorio y contratante.  Los medios de comunicación radial, escrito y televisado que fueron promotores  de la buena producción cultural y literaria se han distanciado de esa tarea educativa e instructiva.

Hoy, con honrosas excepciones,  esos espacios se han puesto en manos de la improvisación inculta e iletrada. Una rápida mirada de su producción así lo demuestra. Por eso, al hablar o escribir un ensayo biográfico de Freddy Gaton Arce, como de cualquier otro intelectual nativo o extranjero de su categoría, podría ser hasta riesgoso y exponerse a recibir la burla ante  el predominio actual  de  actitudes de  mofa e indiferencia hacia las personas  de estudios.

Vivimos en medio de la banalización de los atributos y el culto a los espectáculos ruidosos y comunes. Lo estridente ha sustituido la calidad  del hecho cultural.  Desde el común del ciudadano se mira  de manera insignificante y peyorativa a los dotados de algún talento o conocimiento culto. Se prefiere  lo simple, lo impreciso, lo sutil. Lo que no requiere  de preparación ni  dedicación. El ambiente de la diversión pura y simple acapara mayor atención que la puesta en circulación de un libro, la escenificación de una obra de teatro, la exhibición  de pinturas artísticas de la plástica, la conferencia de un hombre o mujer erudito, entre otras.  La rapidez del inmediatismo, del modernismo contagiante  de las redes sociales ha ido deshumanizando las relaciones sociales. Todo fluye en un aparataje contaminante e irrespetuoso; no hay reparos ni principios en ese automatismo farandulero  y consumista. Hay una decadencia de las ideas y  un abandono de los moldes paradigmático en que se sustentó éticamente la sociedad en su largo trayecto de  desarrollo cultural y científico. Hoy, en República Dominicana, vemos las librerías, bibliotecas, salas de lecturas  y Ferias del Libro, con una presencia reducida.

El  hecho cultural ha ido perdiendo su carga emocional,  ha descendido a una  permeabilidad y  promiscuidad  aberrante e  insustancial,  alejándose de su originalidad estilista y metódica. Estamos siendo contaminados por  un utilitarismo comercial ruidoso, reduccionista  e insubstancial. 

El empobrecimiento es  tan evidente  que va marcando rituales espacios acumulativos. El montón que se le aglomera lo disfruta con diversión cadenciosa. El concepto real de lo que es y significa la cultura y el valor del arte  en la actualidad  representa  tantas cosas comunes que  escasamente  expresa un contenido importante. 

Lo estrepitoso y populachero predomina con estupor. La  cualquierización llena de estupidez carnavalesca traza las líneas culturales rompiendo el aura de la excelencia, de la solemnidad,  para dar paso al espectáculo de los embaucadores y  farsantes endiosados por los medios audiovisuales.

Los medios de comunicación dedicados mayormente a su negocio publicitario no vacilan en masificar y promover  esa frivolidad energúmena que envilece, enajena  y rebaja la capacidad de entendimiento cultural y la autoestima personal. Lo importante es hacer  negocio a expensa de la seriedad  y de la producción de un arte, una literatura  y una cultura decente, fresca y de calidad.

No somos  elitistas a ultranza sino defensores del valor de la cultura literaria  en sus distintas manifestaciones.  Apreciando  en su magnitud  la necesidad de  respetar su  jerarquización histórica en la civilización humana, pues,  su producción, ejercicio y dedicación,  representa esfuerzo, consagración, creatividad, entrega y amor en una brega de actitud personalizada cuyo resultado valoriza y prestigia a su hacedor. 

Por estas razones, debemos ser exigentes con la cultura;  su producción  autentica y genuina dependerá  siempre de las manos de los dotados, de los leídos,  de los artistas como tales; por  los sacrificados por la humanidad;  por los de conciencia sensible y con vocación de solidaridad encarnada. Y esa condición, esa particularidad, no se encuentra  en las personas ordinarias sino en los que  se  dedican con entusiasmo y ahínco   a acopiar    inteligencia y entendimiento intelectual  mediante el estudio, la investigación y el trabajo específico constante. Esta facultad  no puede ser remplazada por la improvisación alegre y desmeritante.
 

El escritor mexicano jalisciense Juan José Arreola Zúñiga (21-9- 1918,  al  3-12- 2001)  establece que  “la cultura  es una acción que debe ocurrir entre las cuatros paredes  de la personas que antes de dormirse se entrega a ese otro sueño portentoso del poblado de miles de sueños que es la lectura, de su lectura, que es el libros, los libros”. “Hay una sola cultura que es lo que circula  en un ser humano como su propia sangre tomando de esa lectura lo que me pertenece, el conocimiento,  la intuición y el conjunto de intuiciones creadora   y reproductora a través de unos cuantos mediato o inmediatos  de la conciencia acumulada", nos indica el autor de Sueño de Navidad, Confabulario,  Bestiario, La  Migala, Varia invención,  Estas páginas mías. La Feria,  No hay dos sin tres. Historias de adulterio,  Punta de plata,  El sapo, Tres días y un cenicero y otros cuentos,  entre otros temas, que le dieron notoriedad.
 
La contaminación y  deterioro del cauce cultural nos lleva a pensar que al parecer ya no hay espacio para los Freddy Gaton Arce, Pedro Mir, Manuel del Cabral, Salomé Ureña,  Pedro Henríquez Ureña,   Fabio Federico Fiallo,  Aída Cartagena Portalatín, Virgilio Díaz Gullón,  Franklin Mieses Burgos,  Gastón Fernando Deligne, José Joaquín Pérez, Hilma Contreras,  Manuel Rueda,   Héctor Inchaustegui Cabral,  Flérida García de Nolasco,  Julia Álvarez, Máximo Avilés Blonda, Emilio Morel Peguero,  Miguel Alfonseca,  Cayo Claudio Espinal, Jeannette Miller,  Domingo Moreno Jiménez,  Mariano Lebrón Saviñón,  Federico Jóvines Bermúdez,  René del Risco Bermúdez,  Norberto James Rawlings,  Mateo Morrison, Tony Raful, Francisco Domínguez Charro, Víctor Villegas, Carmen Natalia Martínez, Rafael González Tirado, Diógenes Céspedes, Miguel Solano, Ana Teresa Martínez, Aurelia Castillo, Enrique Cabrera Vásquez,   entre otros, y que su  idónea espacialidad trascendente, "un sitio electivo que representa una especie de paradigma poética",  ha sido ocupado por charlatanes encofrados de patrañas y sonoridad vacua  tenido en la actualidad como  "fenómenos"  en  esta era de post-modernidad que deshumaniza todo lo que toca, convirtiendo  el mundo humano, animal   y la naturaleza en un gigantesco negocio corporativo de obtención  de riqueza por la riqueza sin  aprensión  ni arrepentimiento autocrítico.
 
(Foto del  escritor Premio Nobel de Literatura 2010 Mario Vargas Llosa, mencionado en la argumentación que hace Enrique Cabrera Vásquez sobre apropiación o apropiacionismo literaria y cultural).

El trayecto de este fenómeno ha alarmado al escritor Premio Nobel de Literatura 2010 Mario Vargas Llosa quien  con ardor literario, cultural e intelectual produjo el clarividente ensayo titulado "La Civilización del Espectáculo",  en el que sostiene con la  autoridad de su prestigio literario, cultural e intelectual,   "que la cultura ha devenido en puro espectáculo". Indica,  "la época actual puede ser definida como la era pos cultural. Un momento histórico en el que la filosofía y las bellas artes han sido desplazadas por el deporte, la gastronomía y la música popular; y donde la palabra escrita ha sido condenada a la desaparición total debido al surgimiento de medios electrónicos como el ipad o el ebook que favorecen la cultura audiovisual".

Expresa  en su enjundioso libro que vivimos "la banalización de la cultura que ha tenido lugar desde el final de la Segunda Guerra Mundial y que ya fue anunciado por prestigiosos autores como T. S. Elliot en su obra Notes Towards the Definition of Culture (1948), George Steiner en In Bluebird Castle. Towards the Redefinition of Culture (1971) y, sobre todo, en La Société du Spectacle de Guy Debord (1967)".

Señala con energía teórica: "En la civilización del espectáculo es normal y casi obligatorio que la cocina y la moda ocupen buena parte de las secciones dedicadas a la cultura y que los “chefs” y los “modistos” y “modistas” tengan en nuestros días el protagonismo que antes tenían los científicos, los compositores y los filósofos. Los hornillos y los fogones y las pasarelas se confunden dentro de las coordenadas culturales de la época con los libros, los conciertos, los laboratorios y las óperas, así como las estrellas de la televisión ejercen una influencia sobre las costumbres, los gustos y las modas que antes tenían los profesores, los pensadores y (antes todavía) los teólogos. Hace medio siglo, probablemente en Estados Unidos era un Edmund Wilson, en sus artículos de The New Yorker o The New Republic, quien decidía el fracaso o el éxito de un libro de poemas, una novela o un ensayo. Hoy son los programas televisivos de Oprah Winfrey. No digo que esté mal que sea así. Digo simplemente que es así"
 

Manifiesta con brillantez intelectual. "El vacío dejado por la desaparición de la crítica ha permitido que, insensiblemente, lo haya llenado la publicidad, convirtiéndose esta en nuestros días no sólo en parte constitutiva de la vida cultural sino en su vector determinante. La publicidad ejerce una influencia decisiva en los gustos, la sensibilidad, la imaginación y las costumbres y de este modo la función que antes tenían, en este campo, los sistemas filosóficos, las creencias religiosas, las ideologías y doctrinas y aquellos mentores que en Francia se conocía como los mandarines de una época, hoy la cumplen los anónimos “creativos” de las agencias publicitarias. Era en cierta forma obligatoria que así ocurriera a partir del momento en que la obra literaria y artística pasó a ser considerada un producto comercial que jugaba su supervivencia o su extinción nada más y nada menos que en los vaivenes del mercado. Cuando una cultura ha relegado al desván de las cosas pasadas de moda el ejercicio de pensar y sustituido las ideas por las imágenes, los productos literarios y artísticos pasan a ser promovidos, y aceptados o rechazados, por las técnicas publicitarias y los reflejos condicionados en un público que carece de defensas intelectuales y sensibles para detectar los contrabandos y las extorsiones de que es víctima. Por ese camino, los esperpentos indumentarios que un John Galliano hace desfilar en las pasarelas de París o los experimentos de la nouvelle cuisine alcanzan el estatuto de ciudadanos honorarios de la alta cultura".

Cuestiona con preocupación cultural. "La masificación es otro dato, junto con la frivolidad, de la cultura de nuestro tiempo. En este los deportes han alcanzado una importancia que en el pasado sólo tuvieron en la antigua Grecia. Para Platón, Sócrates, Aristóteles y demás frecuentadores de la Academia, el cultivo del cuerpo era simultáneo y complementario del cultivo del espíritu, pues se creía que ambos se enriquecían mutuamente. La diferencia con nuestra época es que ahora, por lo general, la práctica de los deportes se hace a expensas y en lugar del trabajo intelectual. Entre los deportes, ninguno descuella tanto como el futbol, fenómeno de masas que, al igual que los conciertos de música moderna, congrega muchedumbres y las enardece más que ninguna otra movilización ciudadana: mítines políticos, procesiones religiosas o convocatorias cívicas. Un partido de futbol puede ser desde luego para los aficionados –y yo soy uno de ellos– un espectáculo estupendo, de destreza y armonía del conjunto y de lucimiento individual que entusiasma y subyuga al espectador. Pero, en nuestros días, los grandes partidos de futbol sirven sobre todo, como los circos romanos, de pretexto y desahogo de lo irracional, de regresión del individuo a la condición de parte de la tribu, de pieza gregaria, en la que, amparado en el anonimato cálido e impersonal de la tribuna, da rienda suelta a sus instintos agresivos de rechazo del otro, de conquista y aniquilación simbólica (y a veces real) del adversario. Las famosas “barras bravas” de ciertos clubes y los estragos que han provocado con sus entreveros homicidas, incendios de tribunas y decenas de víctimas muestra cómo en muchos casos no es la práctica de un deporte lo que imanta a tantos hinchas –casi siempre varones aunque cada vez haya más mujeres que frecuenten los estadios– a las canchas, sino un espectáculo que desencadena en el individuo instintos y pulsiones irracionales que le permiten renunciar a su condición civilizada y conducirse, a lo largo de un partido, como miembro de la horda primitiva".

Nos dice con acento de enojo. "Tampoco es casual que, así como en el pasado los políticos en campaña querían fotografiarse y aparecer del brazo de eminentes científicos y dramaturgos, hoy busquen la adhesión y el patrocinio de los cantantes de rock y de los actores de cine. Estos han reemplazado a los intelectuales como directores de conciencia política de los sectores medios y populares y ellos encabezan los manifiestos, los leen en las tribunas y salen a la televisión a predicar sobre lo que es bueno y es malo en el campo económico, político y social. En la civilización del espectáculo el cómico es el rey. Por lo demás, la presencia de actores y cantantes no sólo es importante en esa periferia de la vida política que es la opinión pública. Algunos de ellos han participado en elecciones y, como Ronald Reagan y Arnold Schwarzenegger, llegado a tener cargos tan importantes como la presidencia de Estados Unidos y la gobernación de California. Desde luego, no excluyo la posibilidad de que actores de cine y cantantes de rock o de rap puedan hacer estimables sugerencias en el campo de las ideas, pero sí rechazo que el protagonismo político de que hoy día gozan tenga algo que ver con su lucidez o inteligencia. En absoluto: se debe exclusivamente a su presencia mediática y a sus aptitudes histriónicas".

Explica con aire culto. "Porque un hecho singular de la civilización del espectáculo es el eclipse de un personaje que desde hace siglos y hasta hace relativamente pocos años desempeñaba un papel importante en la vida de las naciones: el intelectual. Se dice que la denominación de “intelectual” nace durante el caso Dreyfus, en Francia, y las polémicas que desató Émile Zola con su célebre “Yo acuso”, escrito en defensa de aquel oficial judío falsamente acusado de traición a la patria por una conjura de altos mandos antisemitas del Ejército francés. Pero, aunque el término “intelectual” sólo se popularizara a partir de entonces, lo cierto es que la participación de hombres de pensamiento y creación en la vida pública, en los debates políticos, religiosos y de ideas, se remonta a los albores mismos del Occidente. Estuvo presente en la Grecia de Platón y en la Roma de Cicerón, en el Renacimiento de Montaigne y de Maquiavelo, en la Ilustración de Voltaire y Diderot, en el Romanticismo de Lamartine y Víctor Hugo y en todos los periodos históricos que condujeron a la modernidad. Paralelamente a su trabajo de investigación, académico o creativo, buen número de escritores y pensadores destacados influyeron con sus escritos, pronunciamientos y tomas de posición en el acontecer político y social, como ocurría cuando yo era joven, en Inglaterra con Bertrand Russell, en Francia con Sartre y Camus, en Italia con Moravia y Vittorini, en Alemania con Günter Grass y Enzensberger, y lo mismo en casi todas las democracias europeas. Basta pensar, en España, en las intervenciones en la vida pública de don José Ortega y Gasset. En nuestros días, el intelectual se ha esfumado de los debates públicos, por lo menos de los que importan. Es verdad que algunos de ellos todavía firman manifiestos, envían cartas a los diarios y se enzarzan en polémicas, pero nada de ello tiene seria repercusión en la marcha de la sociedad, cuyos asuntos económicos, institucionales e incluso culturales se deciden por el poder político y administrativo y los llamados poderes fácticos, entre los cuales los intelectuales sólo brillan por su ausencia. Conscientes de la desairada situación a que han sido reducidos por la sociedad en la que viven, la mayoría de los intelectuales han optado por la discreción o la abstención en el debate público. Confinados en su disciplina o quehacer particular, dan la espalda a lo que hace medio siglo se llamaba el “compromiso” cívico o moral del escritor y el pensador con la sociedad. Es verdad que hay algunas excepciones, pero, entre ellas, las que suelen contar –porque llegan a los medios– son las encaminadas más a la autopromoción y el exhibicionismo que a la defensa de un principio o un valor”.

Estos atinados convenientes del laureado escritor peruano-español y del universo  robustecen nuestro planteamiento de preocupación  ante esa ausencia de contenido depurado, crítico, y de voluminoso peso cultural y literario, que siempre adornó el mundo de los sabios.

En mi libro titulado, Conceptualización Científica del Arte. Emociones Humanas y Literarias, cuya primera parte fue publicado en el número 7 del periódico digital Opinión, Madrid, España, incluido entre sus principales titulares de primera página del viernes 30 de noviembre del año 2001, portadilla No. 7, sección Cultura, Ciencia y Sociedad, indicó oportunamente:  "La sociedad demandará siempre un arte renovado, fresco, limpio, lleno de creatividad, substancial, ameno, con cierto marco ético, que inspire respeto; que llame la atención critica; que contribuya a elevar el nivel de comprensión del mundo al tiempo que proyecta ideas y valores nuevos que posibiliten un sistema de convivencia social más decente, humano y armonioso, bases fundamentales para construir los peldaños y andamios sostenedores del proceso de la dura brega en la lucha por la redención y la emancipación de la humanidad".

El apropiacionismo o apropiación  intelectual, literario, cultural, científico, tecnológico, y demás etc., etc., se diferencia del plagio; esa vulgaridad de calcar, raptar, robar,  e indisponer de ideas ajenas, de otros, y presentarla como propia. El apropiacionismo o apropiación  galvaniza, enriquece y actualiza el pensamiento expuesto.  Garantiza su libre albedrío. Le asigna libertad de movimiento y actuación a la creatividad expuesta que al salir a flote se convierte en propiedad general de toda la humanidad. Evita el estancamiento, la atrofia, el deterioro, el anquilosamiento, y la oxidación intelectual por  el envejecimiento de una práctica rutinaria cerrada a todo aporte y renovación de sus raíces ancestrales. Su utilización demuestra que el mundo del individuo no es aislado ni solitario por más que insista desde un encierro paranoico. Enseña  que mediante la  participación  social y colectividad del producto cultural la humanidad participa de ello; la hace suya, la defiende, la difunde y le da continuidad desde la secuencia de su apropiación. Toda acción cultural sucede en una dinámica  de intercambio de conocimientos. La vigencia de la  pluralidad del YO sobresale como  ribete en función de las necesidades humanas y la vida social; de la trascendencia individual hacia  la participación comunitaria, social y organizacional que permite y posibilita dar a conocer  y participar públicamente las ideas, el pensamiento, los  razonamientos; única vía adecuada para situarse en un espacio de connotación, respeto, admiración y jerarquización en la sociedad global. 

Más allá de nuestras humanas posibilidades; de nuestro aporte y esfuerzos denodado, de los sueños alojado en nuestro interior; de las múltiples preguntas  acumuladas  y sin respuestas ciertas; de las dudas y temores que nos limitaron en nuestro intento de andar con pasos más seguro; de las traiciones e ingratitudes padecidas; de los proyectos de vida inconcluso, de los amores frustrados y las ilusiones bordadas en  lúdicos ensueños y fantasías alterado con la realidad de la limitación  del tiempo en nuestra existencia. Muy a pesar de los sinsabores, desdén y vejámenes sufrido; de los anhelos y lucha por mejorar nuestra condición existencial, hay algo que pervive  como evidencia de lo que fuimos y somos: la comprensión del legado encontrado, huellas  que enseñan  con plenitud  que en definitiva somos memoria de nosotros mismo plasmada en el accionar de nuestra cotidianidad en la lucha por la vida.

La consagración que revistió la vida  de Freddy Gaton Arce tuvo esa tintura de sensibilidad que lo llevó  a solidarizarse con el dolor y la desgracia de los desvalidos. Por eso hoy ocupa un punto atractivo y  luminoso  entre los poetas, escritores, periodistas e intelectuales de República Dominicana. Este libro quizás no abarque todo lo que él  encarnó, significó y significa.  No obstante es nuestro modesto y humilde aporte  que viene a sumarse a los  muchos ensayos, artículos, y opiniones ya producidos en torno a su persona. Un reconocimiento desde la crítica literaria  a su obra estética, al valor de su consagración de periodista ético, a su condición de ciudadano de bien; a su ejercicio profesional  transparente y vocación de solidaridad  y entrega  a causas nobles y a su amor denodado por la humanidad.

Este ensayo biográfico camina  sobre un  retorico discurso  ciceroniano donde afloran  ideas filosóficas, éticas y morales y  cuyos valores constituyeron el estandarte durante todo el trayecto de la vida de Freddy Gaton Arce.  Cimientes de  sus prendas emocionales y  de sus cultivadas palabras de arcoíris;  liquen  de su  proverbial sabiduría y que lo distinguió durante todo el proscenio de su esculpida vida de decencia y dignidad. 

Y después de esta retorica antesala entramos, pues, en materia.

Freddy Gatón Arce vuela en arcoíris de palabras

https://elcolosodemacorix.blogspot.com/2018/09/freddy-gaton-arce-vuela-en-arcoiris-de.html

 



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